Torreón del Monje — Restaurant in Mar del Plata

Merienda: late afternoon tea time with friends. The location is really nice as it is right next to the ocean. You have seatings inside or outside, but it could get a bit chilly when the Sun is not out. Probably much warmer in the Summer which is a few weeks away… We ordered a latte, 2 hot chocolate (submarino which is way better than the regular hot chocolate made with powder!), an apple crumble, a medialuna and 2 medialunas with ham and cheese. My favorite is definitely the “submarino” which you should try while in town. The service was standard, however the downside of this place is the acoustics… not over crowded, but real noisy! Not very pleasant to have to raise your voice to chat with your friends or family. If you take a walk along the beach and need a quick stop then it is ok, but I would not plan to stay and enjoy the view because of the...

La comida un desastre tardaron más de 40 min en traernos 2 ensaladas, tuvimos que preguntar si las estaban haciendo ya que veíamos qué otras personas que se sentaron después ya les estaban trayendo los platos. Pedimos una caesar con pollo, el condimento un asco la ensalada era un masacote, el condimento no era caesar parecía una mezcla de manteca y queso crema, el pollo estaba seco y apelmazado. La otra ensalada era de langostinos y la trajeron mal, trajeron una caesar con langostinos, la tuvieron que cambiar por lo que esperamos otros 10 minutos. Cuando trajeron la ensalada era común y corriente, la cebolla muy gruesa, la Palta casi ni existía y tenía 6 o 7 langostinos que parecían crudos. La atención deja bastante qué desear, si bien cuando llegas te traen la bebida y un pan con un dip bastante rápido la comida tarda demasiado y cuando preguntas lejos de pedir disculpas, te contestan como si te estuvieran haciendo el favor.Para tomar pedimos una limonada qué estaba demasiado ácida, pero bien fría lo que sumaba un poco y la hacía más pasable. Lo mejor fue el pan que traen al principio con el dip. Por esta experiencia nos cobraron $8900. El lugar está bastante bien conservado aunque podrían restaurar /pintar las mesas y sillas. Otra contra es que podes comer afuera pero no te abren las sombrillas por lo tanto comes expuesto al sol y al viento ya que tampoco hay nada que te repare, nosotros elegimos comer adentro contra una de las ventanas. Solo quien no conoce otra cosa podría ir a comer ahí. Es una pena porque tiene historia pero el lugar es un desastre. No lo recomendaría ni volvería a ir, muy caro para la...

El Torreón del Monje es un lugar clásico de Mar del Plata La atención suele ser correcta, aunque en ocasiones puede demorar, especialmente en épocas de alta concurrencia. La comida es buena, aunque algunos pueden encontrar que la relación precio-calidad no es la mejor.

La vista es uno de los puntos fuertes del Torreón. Desde el subsuelo, podes disfrutar de una panorámica de la ciudad y la costa, y el atardecer es simplemente increíble. Recomiendo mucho este lugar para ver el horizonte y el mar.

El menú es bastante variado y la calidad de la comida es generalmente alta. Las rabas son espectaculares y la pesca del día, como la corvina, es deliciosa. Además, te sirven tostadas grandes con una salsa untable muy rica en lugar de la clásica panera. Los precios son acordes al lugar y definitivamente vale la pena volver.

El ambiente es encantador y el servicio suele ser muy bueno, aunque en algunas ocasiones puede ser un poco lento. Los baños están siempre limpios y el lugar es muy acogedor. Sería genial si pudieran mejorar la ventilación del salón en días de mucho calor.

El jugo de naranja y zanahoria es puro y refrescante, y los postres como el budín de pan son deliciosos. El avocado toast es uno de los mejores que he probado. Aunque no es económico, tienen buenos combos para el desayuno y reintegros con Santander, lo que hace que algunas opciones sean más accesibles.

El parador también es una excelente opción, con una piscina de diferentes profundidades y actividades para niños y adultos. La carpa es amplia y cómoda, y el cambiador siempre está impecable. La comida del parador es típica de un bar de playa, buena, pero no...