Al Alba Parrilla-Resto — Restaurant in Municipio de Villa La Angostura

Really impressed with the quality of the starter bread and mozzarella sticks. Maybe the best mozzarella sticks I’ve ever had. Was very excited for the main course and was extremely dissatisfied. The quality of the meat was nice, and the cooking seemed well done, but it was void of any flavor. After adding an aggressive amount of salt myself, it was starting to taste just okay. While literally everything else was tasty the meat was an utter disappointment. Maybe this place isn’t the best for meat and should have gotten another way? I wouldn’t recommend for...

En el centro de VLA (galería Mamuschka) está Al Alba, un lugar cálido, que se caracteriza por la extraordinaria comida y la excepcional atención. Para empezar, te reciben con un pan casero calentito (con sal marina y merken arriba), acompañado de berenjenas en escabeche y un alioli (eso ya te deja sin palabras). Las entradas son todas soberbias: aceitunas rellenas (fritas), empanadas con un masa indescriptible, buñuelitos de acelga (que te hacen recordar a los que hacían las abuelas), bastoncitos de muzzarella y varias cosas más. Tiene buenísimas opciones de parilla (especialmente entraña, ojo de bife y un corte especial, además de chorizos, chinchilines y provolotas soñadas). También alternativas de pastas caseras. Uno tanpoco puede perderse el goulash con spaetzle ni el guiso de lentejas que vienen servidos dentro un pan casero que es una locura. Además, tienen pizzas de masa madre! Los postres son uno mejor que otro (flan, creme bruleé, mousse de chocolate) pero la estrella es el volcán de chocolate con helado de avellanenas (hace poco también incorporaron un flan de coco que te vuela la cabeza). El café es igualmente bueno y la variedad de tragos, cervezas y vinos es genial. El lugar es súper limpio, bien musicalizado y acogedor. El equipo es un engranaje perfecto: los dueños están presentes todo el tiempo y eso hace un resultado infalible. Los mozos súper atentos, asesoran bien, amables,...

No es una parrilla! El lugar es lindo, se lo ve cálido pero la atención es pésima. Llegamos y no quedaba claro si teníamos mesa disponible o no. Nos quedamos esperando hasta que un mozo nos hizo señas (porque supuestamente tenían que llamar a los de la reserva anterior para confirmar si venían. Algo nunca visto. Se supone que pasada la tolerancia de 15 min, se asume que la reserva se cae) Finalmente nos atienden. Nos traen un pan casero que era sal con pan y con una salsa picante (menos mal que pedí agua). Luego una provoleta que estuvo muy rica (pero nuevamente con pimienta por arriba). Más tarde (luego de una larga espera) nos traen la carne. Lo curioso del lugar es que cuando llegamos la parrilla estaba vacía. Si, así como leen: la carne te la hacen vuelta y vuelta en el momento. Rarísimo. Resultado: carne arrebatada: quemada por fuera y cruda por dentro. Pedimos entraña (que de cocción estaba bien) y el vacío (quemado por fuera y vivo por dentro). El vacío pedimos que lo pongan un poco más y volvió más quemado por fuera e igual de crudo por dentro. La ensalada de rucula estaba excelente. Los precios son caros para lo que ofrecen. Le hicimos el comentario de la comida a la moza y casi no nos dejó hablar. De mala manera nos dijo “listo, descuenten el corte que estuvo mal”. Si bien tuvieron la deferencia, la atención de la moza era burlesca y en ningún momento nos pidió disculpas....