MONTUVIA RAICES ANCESTRALES — Restaurant in Cumbaya

Every aspect of our evening at Montuvia was wonderful, fun, and delicious. From the moment we walked in - and the chef Valentina invited us over to the counter where there was a big open fire and she explained (in both english and spanish) the food she was cooking.

We sat down and even before our delicious and original cocktails came - the other owner Liz came by our table and offered us a complimentary small drink - and some super delicious appetizers (amuse bouche ) She explained the specials - and items on the menu - and we were on way to the best meal we had in Quito.

The restaurant is new. And is in the beautiful Cumbaya neighborhood on a residential street above the reservoir. The decor is so creative and a large tree grows right in the middle of the restaurant . It is made to feel that you are outside near the beach. These owners are so creative and clearly love what they do - love designing, and welcoming, and feeding and cheering up everyone who walks in the door. Don't miss this exciting and delicious dining experience.

Thank you Montuvia - We...

I had an unforgettable experience at Montuvia, a warm and welcoming newly opened restaurant located in Cumbaya that perfectly captures the essence of Ecuador’s Manabi cuisine.

The food was reasonably priced and was absolutely delicious with each dish containing fresh and tasty ingredients while being cooked to perfection. Each item I ordered of the menu contained rich and complex flavours that I have not experienced before. The seamless blend of citrus and peanut in their jipijapa calarami ceviche better was to die for!

The service was just as impressive as I was greeted by passionate, friendly and attentive servers who were also knowledgeable about the menu and each dish. As for the chefs, they were fast in delivering the items I ordered.

Last but not least is the amazing bar at Montuvia. They have a great selection of amazing drinks, each one as unique and creative as the next. The bartenders were also energetic and served drinks with great precision.

I highly recommend Montuvia to anyone looking to experience a rich and unique culinary experience and...

Una nueva oferta Manaba en la ciudad que intenta exaltar la comida manaba que desafortunadamente no tiene la potencia para sustentar una experiencia agradable. MONTUVIA se posiciona en el sector de Cumbaya con un nuevo concepto open kitchen que prioriza y resalta el uso de un horno Manaba tradicional. Los platos son cocinados y servidos en ollas y platos de barro ende así creando una pseudo atmosfera costeña. MONTUVIA intenta replicar la costa Ecuatoriana con mesas de madera y platos que destacan el uso del refrito, maní, hierbita, etc. Desafortunadamente, MONTUVIA solo logra resaltar la comida manaba mediante sus ingredientes, dejando que desear sobre el excelente mundo gastronómico manabita. Desde entrar a esta cocina libre, no se distinguía ningún olor o cocción que se perciba en el aire algo imposible en una cocina manaba. La situación era reflejada en la cocina en sí, ya que no estaba nada en preparación al inicio del primer turno. Después de que atendieran al pedido los meseros, nuestra mesa se convirtió en un desierto en lo que único que perduraba era el hambre y el paso del tiempo. Las entradas son diminutas, algo parecido a una colación de un niño de parvulario, el sabor de estos era mixto, por un extremo un corviche lleno de sabor con frescura de la salsa verde, por el otro extremo una tortilla de yuca fría con panceta de similar temperatura en la cual solo resaltaba un poco el jous del cerdo. Después de una hora de espera, los platos fuertes llegaron sin ninguna sorpresa, costillas encocadas que solo sabían a un fantasma de coco. Un arroz que desafortunadamente espantaría a cualquier costeño en cantidad y en cocción. Además de patacones más o menos cocinados que son un insulto a la comida manabita. Durante el servicio, los meseros trotaban de mesa en mesa, como si fuera una carrera de realizar todo en muy poco tiempo. Un staff completamente inepto para el calibre de este restaurante, sin mencionar del precio que involucran los platos, el especial de costillas cuesta 25+. El mayor insulto fue ver como la cocina utiliza productos congelados de Mr. Fish de la multinacional Pronaca, cuando el restaurante “apoya” a ingredientes locales. Después de haber cancelado la cuenta, un sentimiento de desagrado lleno la experiencia. En ningun momento me senti como en Manabi, ya que la atencion es fria e impersonal, algo opuesto a la alegria de la costa...