KantarEs Piano & Guitarra — Restaurant in Querétaro

El ambiente es bueno; sin embargo, la experiencia con el servicio terminó haciendo que la experiencia fuera mucho peor. No sé si el problema fue haber ido en un grupo grande o aparentemente ser estudiantes, pero creo que no es recomendable si tu grupo cumple esas características.

El grupo llegó temprano, aún no estaba muy lleno el lugar y el karaoke no estaba operando, por lo que aprovechamos para pedir comida y bebidas en lo que esperábamos.

Tras la primera ronda de canciones, varios pedimos vasos de agua y al parecer esto fue un error porque los meseros dijeron al DJ que NO pusiera nuestras canciones porque no estábamos consumiendo; adicionalmente los meseros dejaron de poner atención a nuestra mesa y aunque tratábamos de hacer señas para poder pedir más comida y bebidas, no nos hacían caso.

Esto se volvió muy frustrante porque: Cuando estábamos consumiendo visiblemente, el karaoke no estaba disponible. En cuanto dejamos de consumir visiblemente, nos sacaron de la lista de canciones sin avisar, solo dejándonos confundidos sobre por qué las canciones que ya habíamos pedido no pasaban. Hubo un periodo prolongado en el que no tomaban nuestra orden y como no podíamos ordenar tampoco nos dejaban cantar. Aún después de haber ordenado más comida, se tardaron en informar al DJ que ya podía volver a tomar nuestras canciones.

Al final, sin aún habernos dejado cantar a pesar de que ya habíamos pedido más cosas, nos pidieron comprimir el grupo a una sola mesa en vez de dos para acomodar a más personas, a lo que mejor decidimos ya pedir la cuenta e irnos; no sin que antes el mesero tuviera un error en sus cálculos y nos dijera que nos faltaban $600, haciendo que los últimos minutos fueran bastante incómodos; a pesar de que el pago en realidad sí estaba completo.

Quizás las expectativas de consumo eran mucho más altas, pero yo pagué más de $300 en mi consumo y solo me permitieron cantar una canción en toda la noche. La dinámica de la lista de canciones era por mesa entonces es posible que yendo en un grupo más pequeño hubiese mejorado la experiencia, pero supongo que aún así deben estar consumiendo constantemente si esperan...

Lástima de ambiente... un gran lugar para cantar, desafiante si estás cansado de competir con parientes de la chimoltrufia, aquí hay una gran asistencia que por lo regular son cantantes experimentados, que te harán disfrutar de una noche de buenos cantantes, una gran bohemia. Sin embargo. Los tragos son pésimos y el costo por ellos demasiado pretencioso, no saben servir un daiquirí, ya no digamos unas medias de seda o una jarra de clericot. Su servicio de barra es espeluznante, la atención del propietario es selectiva y preferente de acuerdo al consumo o cantidad de personas que te acompañen, lo cual es de pésimo gusto para las personas que asistimos en pareja, la cocina por lo regular te dirá que no tienen algo de lo que tienes en mente ordenar, así que baja cualquier expectativa para degustar algo rico. Este lugar no figura ni figurará en mis recomendaciones hasta que justifique los precios de sus tragos con una calidad a la altura de las expectativas, una mejora al nivel del servicio proporcionado por los meseros...( cabe destacar que por ser un lugar sumamente pequeño pretenden que una o dos meseras pueden con todas las mesas. Lo cual es falso) y una reforma total al sistema de turnos para cantar, hasta entonces sólo tiene una estrella y mis pésimas recomendaciones...

La primera vez me gustó mucho el ambiente. En ésta segunda ocasión me decepcionó mucho. Cambiaron a la persona que pone las canciones y literal muy antipática, te da miedo pedir las canciones porque no es nada amable. Creo que no les interesa captar clientes nuevos para que sean frecuentes, ya que solo se enfocan en los clientes frecuentes que piden bebiditas y nosotros pedimos botella. Todas mis canciones me las bajaron de volumen y a sus amigos se las sonorizaban padre. Creo que esto no es un concurso, solo vamos a cantar para divertirnos. Si cantamos bien o mal nos deben dar el mismo nivel de servicio que a los amigos de las personas que atienden. Me parecía un buen lugar para ir a divertirme, pero ya no regresaré por la mala y preferencia que tienen solo para los cuates. Me imagino que por eso estaba vacío, a difrñerencia de la...