De entrada me gustaría apostillar que mi calificación debería constar como 4,5 estrellas, sin entrar en los promedios derivados de las estrellas otorgadas en los diferentes apartados. Me gustó el ambiente en cuanto a una decoración suficientemente al día, por los colores, detalles y mobiliario elegido, en una atmósfera tranquila que invita al diálogo en un tono bajo, y un diseño de interiores imaginativo, como el acceso - disimulado tras una vidriera-celosía - a la zona de servicios ( un ejemplo ), suficientemente dotados de los elementos de higiene necesarios ( yo aún prefiero secarme las manos con unas toallitas de papel que con un secador eléctrico, va en gustos, lo sé ). El servicio es atento, diligente y con una sonrisa permanente, que entiendo más genuina que artificial o . Comenzamos con una ensaladilla rusa con tartar de atún, a la que este último le confería una gracia especial pues por el resto abrumaba su sencillez, si bien la mahonesa que la envolvía tenía la textura y el sabor adecuados. Quizás con el salmón desaparecía la sensación de ser un tanto minimalista en lo que a la variedad de componentes se refiere, ausentes más allá de lo básico. Continuamos con un magret de pato con guiso de morcilla y manzana, plato generoso, con el punto adecuado y un fileteado un poco más grueso del habitualmente servido en otros establecimientos. Bien afinado, mix conseguido, sabores complementarios y singulares a la vez. Nada que objetar, pues muchos podrían haberse saciado con la degustación de este único plato. Acertados también los huevos, en plural, en aceite de trufa y con langostinos, 4 piezas de buen tamaño y sabrosos, acompañados de una nada escatimada ración de jamón ibérico pasado por la sartén, sin asomo de pasarse con el aceite ; como "lecho", unas patatas panadera, las justas. El pan gallego servido naturalmente "visitó" las yemas de los huevos, que con un poco de "puntilla" hubieran alcanzado el sobresaliente. El local nos sirvió - sin cargo adicional - un agua mineral sin gas km. 0, presentada en una botella de esmerado diseño y serigrafiada expresamente para el restaurante. Acompañamos todo ello con vermouth rojo Peregrino, de uva Godello y variedades de plantas y flores autóctonas. Un producto con personalidad propia en el competitivo mundo de los aperitivos, cuyo disfrute extendimos hasta el final de la comida. Rematamos con un cortado y un espresso de Siboney, una marca que no defrauda y que satisface nuestro gusto como cafeteros, y en particular el mío, pues solo tomo espresso o ristretto. Suficientemente satisfechos, no hubo lugar, por esta vez, para el postre. Solo añadir que este recomendable restaurante forma parte del Hotel Plaza, ubicado en el entorno de la plaza de 4 Caminos. Cómo comentario adicional señalar que se ofrece un menú del día con un par de opciones para el primer y segundo plato, y a un precio muy competitivo, señal de ello fue el verlo servido en varias mesas, estando el comedor ocupado en un porcentaje alto a pesar de no escatimar...
Read moreLo que mal empieza, mal acaba.
El lugar es bastante moderno con una decoración elegante a pesar de tener espejos enfrentados a un detector de humo.
El problema tuvo que ser nuestro porque cuando nos sentamos nos dieron una carta de los diferentes platos que tienen pero no del menú degustación. Cuando vimos que en otras mesas que se sentaron después que nosotros, el camarero les atendió rapidísimo porque en teoría ya habían reservado el menú degustación, nosotros preguntamos por ese menú y el camarero sorprendido nos trajo la otra carta que tenía el menú degustación incluido. Por eso entiendo que fue culpa nuestra el no haber especificado que queríamos ver todas las opciones del restaurante. Finalmente cogimos platos sueltos ya que el menú degustación no era de nuestro agrado aunque vista la experiencia igual habríamos acertado y habríamos pagado menos.
El agua que en la cuenta la cobran a 2€ cada 70cl, es del grifo y así lo pone la botella donde te la sirven. Me parece fenomenal que esté microfiltrada por un filtro estilo BRITA pero no deja de ser agua del grifo…
La ensalada de salmón estaba insípida y carecía de aliño. El osobuco de atún (filete cortado de la cola del atún con espina central incluida) imagino que no supimos comerlo porque nos lo presentaron con tenedor y cuchara para servirlo y solo para cortar la piel del atún casi necesito una radial. Los postres tardaron demasiado en servirlos y tampoco eran nada del otro mundo.
No todo fue una mala experiencia porque los mejillones y el risotto estaban muy ricos.
En resumen, tardamos 2h en cenar regular y el servicio fue muy mejorable.
Utilizaré el agua como metáfora, ya que utilizan una botella muy bonita para venderla diciéndote que es microfiltrada, pero no deja de ser agua de la red local (del grifo). Te intentan vender que se trata aparentemente de un restaurante top pero la realidad es que es uno más de la red local a un precio desacorde a lo...
Read moreOs copio el email que os ha mandando Alejandra que fue quien hizo la reserva de la que jamás disfrutamos ya que después de dos semanas teniendo una reserva echa, dos días antes nos llaman (viernes 1/8) y nos dicen que resulta que la que cogió la reserva era nueva y oh vaya ! No hay servicio de comidas un domingo …la única solución que se nos dio es “disculpas “ …no una reasignación otro día o incluso de noche …NADA ! O sabiendo que has cometido un error avisar antes…no 2 días antes y sobre todo sin darnos una solución me parece bochornoso…
Estimado equipo de Esencia: Nos ponemos en contacto con ustedes en relación con una reserva que habíamos realizado hace ya casi dos semanas en su restaurante, especializada en menú sin gluten, y que representaba un regalo muy especial para una amiga. Nuestra sorpresa —e indignación— ha sido mayúscula cuando, a tan solo dos días de la fecha prevista, hemos recibido una llamada por parte de una trabajadora que, alegando ser nueva, nos ha comunicado que los domingos no se sirve comida, motivo por el cual nuestra reserva quedaba cancelada.
Nos parece inaceptable que esta información no se haya verificado antes y que nadie del equipo se haya percatado hasta el último momento. Más aún, lo único que se nos ha ofrecido ha sido una disculpa sin ninguna alternativa o solución por parte del restaurante. Esta falta de previsión y profesionalidad nos ha dejado completamente descolocados, sobre todo tratándose de un establecimiento de la categoría que ustedes representan.
Esperamos que situaciones como esta no se repitan en el futuro y que tomen las medidas necesarias para que la gestión de reservas sea, como mínimo, coherente con las...
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