Taberna La Bodeguica Miguel del Rei — Restaurant in Almeria

Tras entrar en el interior del bar, estando la puerta abierta y las luces encendidas, y en la terraza una pareja sentada en una mesa, el Camarero que estaba en la barra, tras saludarle y pedirle que me quería sentar en una mesa del interior, nos responde que "abrimos a la ocho", y continua secando los vasos. Entonces miro mi reloj y resulta que son las ocho menos CUATRO minutos. Espero que la hora de cierre por la noche también la lleve con tanta exactitud, pues los ruidos de la terraza y del bar a ciertas horas molestan demasiado en las viviendas. La profesionalidad de este Sr. Camarero deja mucho que desear. Lo bueno que en el vecindario hay otros bares mucho mejores que este. No volveré a poner los pies en el hasta que no cambie de dueño....

Realmente no nos ha gustado nada. Precio caro, por una botella de agua que pedimos para la niña, pequeña de 0.50 l, cobran 3.00€ entonces cuanto vale la de 1 litro? El pincho estaba frío y no sabía a nada. Y el montadito de lomo era como de jamón York , vamos que nos tomamos eso y nos fuimos rápido. Dentro no tenían puesto el aire acondicionado, por lo que a pesar del calor sofocante, se estaba mejor en las mesas de fuera y las mesas estaban como pegajosas. No muy limpias. Con esto no quiero hacer pensar que es criticar por criticar, realmente es lo que ha sido, la atención del camarero ha estado bien pero no volveremos a ir ya que la calidad en general no nos ha gustado nada para el...

Uno de los peores sitios sin duda donde he comido en mi vida. Una ración de 14 euros de verduras plancha que llevaba 4 trozos y chamuscados. Por otro lado , si estás embarazada es mejor que no vayas puesto que no te dan ninguna facilidad para quitar ningún ingrediente que no puedas comer. El flamenquín un poco siniestro , bien frito por fuera y bien crudo por dentro. Y por último , un serranito ("tapa especial") que curiosamente en ese bar se llama así, a un montadito minúsculo de jamón , queso y una salchicha cruda que sabía fatal. Al camarero le importaba un verdadero pepino nuestras quejas , sugerencias y peticiones. Me fui a mi casa sin comer. Un sitio terrorífico y obviamente cero...