Exceptional food, great service. Was quite both nightd i ate here, and I am not sure why. The standard is super high. Traditional Spanish food. First night, I had the ham and tomato brunette to start - those sweet tomatoes were to die for. For main, I had the 48-hour slow cooked lamb shoulder, fall off the bone delicious 😋 I went back a few nights later and had the fried prawns , delicious, with fresh bread to dip in the oil. Mains, I tried the slow cooked ribs, again fall of the bone. The staff were super friendly and gave great wine recommendations on both nights. A must if you visit Almuñécar, trust me, you won't regret it if you love great traditional...
Read moreAnd a new "Signature Dish" : "Paletilla de Cordero" : Long-cooked Lamb-shoulder - Fantastic, just fantastic👍 There's a new "Chief" in town ! Former "Deputy" from Francisco 1th., Jose Luis Salas, left with the good atmosphere, the good service - and even better food - to open his own restaurant in Calle Cerveteri 2 (close to Plaza Madrid) - and we finally managed to find him. It's called "El Maño a fuego lento" - The kitchen is perfect, the service even better - and YES, we've got ourself a new favorite restaurant! "senor...
Read moreUn festín de sabor y hospitalidad.
En un mundo donde la prisa muchas veces eclipsa la calidad, encontrar un restaurante que combine generosidad, sabor y un trato cálido es un auténtico lujo. En mi última visita, tuve el placer de descubrir un rincón gastronómico que no solo cuida cada detalle en sus platos, sino que también hace que cada comensal se sienta como en casa.
Desde el primer momento, el equipo del restaurante demuestra que la hospitalidad es una de sus prioridades. El servicio es atento sin ser intrusivo, con un trato cercano que logra el equilibrio perfecto entre profesionalidad y calidez. En todo momento, el personal estuvo pendiente de nuestras necesidades, recomendando platos y maridajes con conocimiento y una sonrisa sincera.
La carta es un despliegue de creatividad y variedad, con opciones para todos los gustos. Cada plato llega a la mesa con una presentación impecable y raciones generosas que invitan a compartir. Probamos una selección de especialidades de la casa, y cada una superó nuestras expectativas: ingredientes frescos, sabores equilibrados y ese toque casero que convierte una comida en una experiencia memorable.
Si algo deja claro este restaurante es que la abundancia y la calidad pueden ir de la mano. Desde entrantes que abren el apetito hasta postres que dejan un recuerdo dulce e inolvidable, la experiencia aquí es una celebración del buen comer.
Un lugar al que sin duda volveré, no solo por su cocina, sino por la sensación de haber encontrado un sitio donde la comida es un acto de generosidad y el cliente, un...
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