Maritime Beach Club Altafulla — Restaurant in Altafulla

While waiting for the downpour to pass, we decided to make the most of our time at this café by enjoying some coffee and orange juice. It turned out to be a delightful experience! The coffee was rich and aromatic, providing a comforting warmth on that rainy day. The orange juice, on the other hand, was incredibly refreshing, with a burst of citrusy goodness that awakened our senses. The combination of the two beverages helped us create a cozy and invigorating ambiance while sheltering from the rain. The friendly staff and cozy atmosphere added to the overall charm of the café, making it a perfect spot to seek refuge from the weather. If you find yourself caught in a downpour, I highly recommend seeking solace in this café with their delightful coffee and invigorating orange juice – it's the perfect way to turn a rainy day into a...

NADA RECOMENDABLE!!!! Ayer decidimos darle una 2ª oportunidad al Marítim después que cambiaran de gestión hará unos dos años. Qué error/horror y enorme decepción!!! Malo no, malísimo....Un despropósito de arroz insípido, duro, sin gracia y a 19 eurazos el plato!!!! Resumen: Mal servicio, carta pobre, carísimo y arroz pésimo. Escalopas a 16€, en mantel individual y botella de agua de plástico... Precios de restaurante bien con detalles de restaurante de polígono. Después de haber disfrutado durante unos años del placer de comer los mejores arroces, buenos de verdad, de rebañar la paella hasta la última cucharada y con ese buen sabor de boca que te duraba incluso durante el resto del duro año... porque cuando en medio de enero buscabas horizontes felices, pensabas en “verano-Altafulla-arroces del Marítim...” y se te hacía la boca agua... Pues todo eso se acabó cuando cambiaron al antiguo equipo, cocinero y camareros, y desembarcaron los nuevos. Hace dos veranos ya nos llevamos el primer gran choffff cuando en nuestro primer día de vacaciones nos dirigimos ilusionados al Marítim en busca de uno de nuestros deseados arroces. Daba igual cuál escogieras, con todos acertabas. Algo había cambiado...no habían manteles blancos en la mesa, ni nos encontramos a los camareros de siempre... mantelillos individuales y xiquets jóvenes de servicio. Raciones minis y arroz paellador en el plato al mismo precio o quizás superior. Han pasado un par de años y quisimos volver a dar una oportunidad a ver si la cosa había mejorado...pues no, la cosa había empeorado y mucho. Fuimos mal atendidos, las tapas de bravas y calamares aunque estaban buenas eran muy escasas para el precio que tenían, las escalopas de los niños, como ya he comentado, nos salieron a precio de entrecot, pero lo que realmente encontramos imperdonable, fue tener el valor de servirnos ese arroz infame... Nos lo dejamos prácticamente todo. Cuando viene el chico a recoger los platos nos pregunta si nos lo preparan para llevar y horrorizados decimos que no. Después de eso decidimos irnos sin tomar ni postre ni café. Y no fue tan fácil dejar atrás esta cutre-experiencia gastronómica...20 minutos de suplicio de espera para que nos trajeran la nada agradable notita de...

ATENCION Y COMIDA IMPRESENTABLE

Fuimos a comer 19 personas. Llegamos antes de la hora para hacer el aperitivo. Nos dijeron que podríamos hacerlo en la mesa. Luego nos dicen que no pueden darnos aperitivo porque están atendiendo mesas. Nos traen patatas de bolsa y aceitunas. A las 3 en punto pedimos las cartas. Sería largo de explicar los platos que no tenían y la tardanza. Pedimos arroces,fideua y algunos entrantes. Aparecen los primeros entrantes a las 15,45. Nos dicen que la culpa es que hemos llegado tarde. Cuando aparece el arroz negro, está crudo. La fideua y el arroz marinera tienen el sofrito quemado. La fideua queda en los platos. Se los decimos y nos dicen que gracias. Los platos de los niños llegan aún más tarde que los nuestros. Pedimos la cuenta pensando que al menos no nos cobraran la fideua, pero no es así. Les indicamos que no ha sido una comida de recibo y nos dicen que como no hemos estudiado hostelería no podemos opinar. La conversación y la falta de respeto suben de tono hasta que finalmente sale una persona dispuesta a repartir puñetazos. Jamás en nuestra vida nos han tratado tan mal. Diciendo que nos fuéramos, que clientes les sobraban. En fin pagamos 470 euros y nos fuimos. Llevamos 15 años yendo a este restaurante. Hemos celebrado allí fiestas y eventos familiares. No volveremos. Un montón de niñatos impresentables y mal educados. Por cierto. Había 2 personas en la mesa que gestionan 3 restaurantes desde hace...