An experience that goes far beyond simply going out for dinner: this restaurant is a true sensory journey straight to the heart of Italy. The service is impeccable, attentive without ever being intrusive, with staff who seem to anticipate your wishes before you even express them.
The food is extraordinary: every dish tells a story of passion, tradition, and quality. From the pasta that tastes as if it were crafted by an Italian grandmother with centuries of culinary wisdom, to the mains that burst with authenticity and genuine flavors, all the way to the desserts that make you forget every diet—you’ll find that every bite is pure poetry.
This is not just dinner; it’s a full immersion into the culture and soul of Italy. Close your eyes and you’ll feel as if you’re in Rome, Florence, or Naples: every taste is a one-way ticket to a small corner of Italian paradise. A place you’ll never forget—and above all, one where you can’t...
Read moreDesgraciadamente mi reseña es muy negativa hacia este restaurante que escogimos con mucho cariño. El entorno es agradable, la decoración muy buena, tranquilo y ubicado en un buen barrio. Hemos ido 14 personas para realizar uno de nuestros encuentros y pasar un buen rato. Al entrar, el servicio prestado por tres camareros jóvenes ha sido bueno pero ya a la hora de comer han empezado los problemas. Tras 45 minutos sin que nos sirvieran nada de lo pedido estábamos ya nerviosos por la tardanza en empezar a traer los platos solicitados. He de decir que nos pusieron por gentileza de la empresa, unas olivas y varios panes, que junto con los vinos pedidos (negro y blanco muy corrientes) fueron el sustento hasta recibir lo solicitado. Tras las quejas han ido reaccionando atropelladamente, mezclando indistintamente primeros o segundos platos y dejar a algunos comensales sin serviles ningún plato. Tras la espera de 1 y media han traído la lubina que casualmente fue pedida por la mitad de los comensales y que resultó bastante mal. Un pequeño trozo de lubina con acompañamiento de caponata que tras probar de quedaba en el plato que por cierto, costaba 32 euros y que para nada lo valía. Aún así, han habido compañeros que no le habían servido nada todavía y tras nuestras quejas por su falta, se disculpaban continuamente diciendo que estaban haciendolo aún y que tan pronto los tuvieran los traían. Pero tras más de dos horas y que las cosas seguían sin atendernos en la totalidad de lo solicitado, hemos optado por pedir la cuenta y marcharnos. El personal, en vez de aceptar responsabilidades, nos han ofrecido como disculpas los postres gratis o una copa de cava, a lo que lógicamente, no hemos aceptado porque no podían comprar nuestro enojo por la poca profesionalidad especialmente en la cocina. En resumen, no es recomendable la elección de este restaurante por lo menos para celebrar una comida con 14 comensales porque en vez de pasar un buen rato acompañados de una buena comida, hemos pasado dos horas pendientes de unos platos que algunos ni han llegado y pagando por ello lo que no valía. Nos ha salido la no comida por 37 euros cada uno sin postres. Además he de decir que éramos los únicos comensales del restaurante. Si llega a haber alguien más, seguro que aún...
Read moreWe had a weekday, date-night dinner and were surprised to find that we were the only patrons over our 1.5h visit. This fact was exacerbated by very low volume of music playing. With that said, the waiter was attentive and the local bottle of white wine he recommended was truly lovely. The octopus carpaccio really should be replaced with a more tasty, chewable seafood - there's a good reason nobody else serves that dish. Further, I'd like to see a more traditional bruschetta. We will come back after some time and try again - I see a lot potential with...
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