Restaurante El Parador Playa — Restaurant in Benalmádena

I wanted to share with you an unforgettable dining experience I recently had at one of the best seafood restaurants I've ever been to. The moment I stepped into the establishment, I knew I was in for a treat. Not only was the food exceptional, but we also had the privilege of meeting the owner/ Head chef , which added a personal touch to our visit.

Now, let's talk about the food. From the moment we perused the menu, we could tell that this place was a seafood lover's paradise. The variety of options was impressive, ranging from traditional Mediterranean dishes to innovative creations that showcased the chef's culinary skills.

We started with a platter of fresh oysters, beautifully presented and bursting with flavor. Each bite was like a taste of the ocean. Next, we indulged in succulent sardines, perfectly seasoned. We had lobster, red shrimps , so much more. The highlight of the evening was undoubtedly the fish. It was cooked to perfection, flaky and moist, with a delicate infusion of herbs and a hint of citrus. The combination of flavors was simply divine. Apparently they are fully booked during the weekend must book in advance. Parking is available in the to terrace. Little hiding gem in...

Lovely restaurant in a hill overlooking the sea. Waitstaff is friendly and professional. Pro-tip: make reservations for the weekends. They will be very busy. The Sardjnes are delicious and we’ll prepared. This is the kind of restaurant where you really need to dive into the menu. They usually have something for everyone. The Rose is delicious. Pro-tip: ask to look at the ice chest with the fresh fish - meet the chef and discuss your options. You will find some amazing possibly off menu choices. There are expensive and very special enormous caribineros - maybe 14 inches long. Very tasty. The baby lobster were amazing too - they put on quit a show - preparing the baby lobster sashimi, frying the tender legs and infusing chery into the carcass. It’s a real treat and delightful to watch. The atmosphere is bright sunny with a cool breeze through open doors (in March). Overall a great restaurant - but not every dish is for everyone. Also, the menu is in a local Spanish dialect. Translating with google can be done but looking at the fish...

No conocía este restaurante y llegué al mismo por recomendaciones.

Restaurante en plena Costa del Sol, en Benalmádena Costa, aprovechando las instalaciones de un hotel, con unas vistas inigualables que te trasladan a otro mundo de relax y disfrute.

En el último mes he ido dos veces así que comienzo la reseña por el final: repetiría y sobre todo porque he encontrado un plato que me traslada a mi infancia: el gazpachuelo. No es un plato turístico ni conocido ya que fuera de las fronteras malagueñas no es muy conocido, de su exquisitez.

Alhambra, que nunca puede faltar la buena cerveza, y para acompañar al pescado, un vino blanco semidulce, Anahí.

Para comenzar unos espetos de sardinas, de los buenos, carnosos y con un sabor intenso.

Para continuar con los entrantes una ensaladilla que te hipnotiza, hay que pedirla porque lo contrario sería un pecado, no es una ensaladilla al uso sino que se trata de una mezcla entre ensaladilla y pulpo a la gallega, con un pulpo muy muy tierno y un sabor indescriptible, es obligatorio.

El salmorejo de mango, una delicia para el paladar, algo distinto a lo que estamos acostumbrado con un sabor suave a la vez que innovador, gusta y eso te hace comer más y más.

Conchas finas, típico plato de la Costa malagueña, frescas con sal y pimienta y a la plancha, esto ya depende del gusto de cada uno, lo importante y elemento común: frescas. Hay que probarlas y conocer así la cultura gastronómica malagueña.

Y cómo no, el gazpachuelo, un plato muy desconocido a base de patata cocida, mahonesa casera y gambas (en este caso ya que se puede cocinar con pan, albóndigas, etc) con huevo cocido. Impresionante, pero claro, para aquellos que amamos esta comida típica de Málaga y sus pueblos…

También probamos alguna fritura, boquerones y calamares, bien el empanado y la fritura, no había exceso de aceite y estaba el producto muy fresco.

Como novedad de carta nos ofrecieron un lomo de atún marinado, yo que soy amante del atún no me gusta cuando se le resta el sabor por lo que no lo pediría nuevamente a pesar de que la calidad del atún y la forma de hacerlo (muy crudo por dentro) eran buenas.

De postre la tarta de coco muy buena (aunque la piña fresca al curry no le pega para nada al plato, no hacen buena combinación desde mi punto de vista) y el flan de chocolate blanco impresionante, ahí si repito.

La atención muy buena, Palomo un crack, atento y buenas recomendaciones. El lugar tiene parking y la calidad precio es buena, todo fresco.

Uno de los lugares que, en Málaga, pasan a ser de mis favoritos para disfrutar de Costa y...