Restaurante Pekín&yoisho — Restaurant in Cáceres

Este restaurante, que nos ofrece una mezcla de las gastronomías china y japonesa, se encuentra ubicado fuera del centro histórico, ocupando un local inmenso, con una carta igual de amplia. Cuenta también con un menú del día a 15,95 €, que incluye tres platos, bebida y postre, disponible de martes a jueves solo para el almuerzo. El local, como he comentado, es grandísimo, limpio, moderno, con las mesas a buena distancia, y además de con camareros tradicionales, cuenta con varios robots que sirven los platos. Nosotros optamos por takoyaki, sushi tempurizado de pez mantequilla, aguacate y Philadelphia y sushi con queso fundido. Con dos cervezas chinas, una botella de agua y dos flanes de té verde, la cuenta sumó 48 € para dos comensales. Todo perfecto, comida muy buena, magnífica atención y detalles de la casa, tanto al inicio de la comida como a su fin, obsequiándonos con galletas...

Si te gusta el sushi, no te recomiendo que pidas aquí. La verdad es que es el peor que comido nunca, peor que el de supermercado malo (arroz muy pasado y como hecho una masa... puag. Nos lo comimos con MUCHO esfuerzo). El arroz con pollo teriyaki llegó frío, la carne se sentía seca o pasada, arroz como pastoso. No sé, nada apetecible. Lo curioso (y por eso le pongo tres estrellas) es que los platos típicos de restaurante chino (arroz tres delicias, ternera con curry), llegaron calientes, la carne era tierna, el arroz suelto y fino... Todo rico. Nos comimos la comida china y dejamos la japonesa (total, ya estaba fría). Llegamos a la conclusión de que tienen dos cocinas, porque todo era demasiado diferente. En resumen: parte Pekín, muy bien. Parte...

La primera vez que fuimos nos encantó, buen precio y el sushi buenísimo. Sin embargo, la segunda visita (ayer al mediodía) no fue tan grata. El arroz estaba duro, cómo si no hubiera sido preparado en el mismo día. La textura del salmón y del atún eran un tanto extrañas. El pez mantequilla estaba tan frío que hasta dolían los dientes al masticar. Para terminar, preguntamos si era posible que nos trajeran tres unidades de Daifuku (pues la foto de la carta mostraba dos y éramos tres comensales) la respuesta negativa puede llegar a comprenderse pero creo que el tono no fue adecuado; sinceramente podrían haber dado otra opción o poner una tercera unidad y cobrarla. O quizás soy yo muy rara y pido demasiado. En fin, no tenemos pensamiento de volver...