Kidôm — Restaurant in Castelló de la Plana

A la atención de la gerente del local:

Este fin de semana volvimos con nuestro hijo de 6 años, con autismo, a este lugar en el que la primera visita, hace 11 meses y gracias a su trabajador de nombre Álex, pasó uno de los momentos más divertidos y emocionantes que le recordamos, en el circuito de tirolinas. Esta vez, mismo día y misma hora, domingo a mediodía, nos encontramos con la zona de tirolinas cerrada. Después de hablar con el personal, pudimos hacerlo con una mujer que se presentó como la gerente del local.

Después de decir y repetir que no tienen por qué abrir todas las zonas, se podría abrir un debate si esto es publicidad engañosa, ya que en ningún sitio pone que las actividades pueden estar abiertas o no dentro del horario de apertura al público.

Su argumentación fue que a la tarde tenían una comunión y que reservaba a todo el personal para entonces. Creo que un gerente debe tener cubiertos con unos mínimos, todos los servicios que su local publicita. Pero no lo sé, no soy gerente. Lo que si soy es Asperger y le puedo garantizar que una persona con autismo, en un local con más de 150 niños (o menús ya preparados en las mesas) gritando, cantando, con música, ruidos fuertes, gente moviéndose alrededor constantemente, etc... no lo va a pasar bien y dudo que pueda aguantar mucho tiempo. Por eso vamos con él en los momentos que menos gente pueda haber.

Me dijo que lo que les interesa es abrir la zona de tirolinas porque es la que más dinero genera y es comprensible, pero no me utilice la palabra "inclusivo" solo porque está de moda y queda muy guay pronunciarlo. Inclusión no es dejar entrar, inclusión es dar la bienvenida. Mi hijo se quedó sin poder divertirse en las tirolinas, aún habiéndolo anticipado, porque sí, se tiene que anticipar las cosas a las personas con TEA, estuvo todo el rato usando la zona de multi actividades sin la supervisión de ningún monitor, y supongo que aunque hacía 26 grados este domingo, el aire acondicionado también se reservaba para la tarde, porque 150 niños tienen más derechos que 1 solo. Los niños con autismo, también sudan. 5 personas había trabajando en ese momento, y desde los toboganes, se podían oír las risas en la barra de la cafetería.

Esperamos que nuestra a visita no les haya incomodado mucho en la preparación de lo que de verdad importaba, que eran los niños de la tarde.

A veces, tener un poco de humildad y un: lo siento, no teníamos previsto que viniera gente esta mañana y no tengo monitores, demuestra mucho más, que el invertir más tiempo en buscar excusas y repetir que no se hacen responsables de absolutamente nada, que en encontrar soluciones. Buenas tardes.

He descrito una situación literalmente como sucedió, otra cosa es que no tengan ningún interés en aceptar una crítica, puesto que, como era de esperar, no hay ni una sola disculpa en todo su escrito.

Si conocer la identidad de quien escribe, puesto que no se ha identificado, me atrevo a asegurar que tengo más formación y conocimientos en temas de autismo y de integración, de lo que puede tener usted. Así que limitar a menospreciar mi reseña con un: sin fundamento; es bastante descriptivo de como se toman las opiniones cuando no son de su agrado.

He colaborado junto a colegios y asociaciones por la integración de los niños con TEA, estoy a su disposición si necesita asesoramiento en crear ese espacio de inclusión, en el que aseguran poner tanto empeño.

Mientras tanto, puede seguir buscando excusas y no asumir ni respetar las opiniones en las que no le ensalcen.

Sigo pensando que un poco de humildad y reconocer errores, ayuda a crecer y abrir más puertas que la imposición de una opinión y menosprecio a quien no opina...

Ayer fuimos a Kidom por segunda vez a pasar el día con los nenes, y pasamos un día inolvidable. Desde el primer momento el personal nos atendió súper bien, el sitio es muy bonito, la zona de juegos es increíble, y no dá sensación de agobio ni ruido aunque haya mucha gente, además se come muy muy bien, incluso ofrecen opciones sin gluten perfectas, cosa que es difícil para mi en muchos restaurantes, y más en sitios de ocio. Quiero destacar la atención de los monitores, especialmente Álex. A mi hijo de 12 años ,al subir al circuito que lleva hasta la tirolina, le entró mucho miedo nada mas empezar y no fue capaz de avanzar, así que bajó muy triste y frustrado, porque nunca era capaz de superar su miedo a pesar de intentarlo,y estaba muy decepcionado con él mismo. Cuándo el monitor Álex se dió cuenta habló con el y le animó a volverlo a intentar y estuvo con él en todo momento, le acompañó y le explicó todo con paciencia hasta que lo consiguió. Le ayudó muchísimo a superar un miedo que tenía desde hacia tiempo ,que le impedia divertirse en sitios así, y luego fué capaz de volver a subir él sólo y ya no le dá miedo! No os puedo explicar lo que significa ese gesto del monitor para nosotros y el cambio que puede suponer en la vida de un niño. Tanto Álex cómo su compañero Iván, fueron muy atentos y amables con los niños en todo momento, se nota que les gusta su trabajo y les apasiona estar con los pekes. Ellos y el resto de monitores, destacar también la atención del chico que estaba en la cafetería. Personas así tan dedicadas a su trabajo y que tratan a los niños con paciencia y los animan a superarse, son las que marcan la diferencia en un sitio como estos, por eso, a pesar de que vivimos en Valencia y nos pilla un poco lejos, volveremos siempre que podamos porque no hay nada en esta zona que iguale este...

For small toddler missing stuff like balls for softplay.. my daughter was keeping saying it was boring as they didn't have balls ( small ) like usually soft play has. They área for bigger kids it was more worth it as it was full or activities for them . But for the little ones for what they had that it wasn't to much over price I paid 26 euros for 3 kids. Two of them 2 year old and one 4 years old. For not many stuff for them to play with just a few big block, and like a labyrinth...