Can Moyas — Restaurant in Castelldefels

Este mensaje es para pedir disculpas sobre el servicio de comida de Jueves Santo.

Va dirigido al propietario del Restaurante Can Moyas, a su encargado y al camarero que nos atendió.

Sr. Can Moyas me disculpo por comer de menú. Lamento no estar a la altura de sus principios como restaurador. El "Menú de arroz" para 2 personas 30€ p/p, es evidente que no encaja con su cliente habitual. Lo siento. No volverá a suceder. Evitaré volver a incomodar les con mi presencia. Eso sí, puede estar satisfecho por tener tan bien adoctrinados a sus empleados. Tanto el camarero primero como el encargado después, clavaron la misma respuesta: "están comiendo de menú" cuando se les hizo una crítica por un postre infame a base de nata de spray y que aspiraba a un mil hojas.

Insisto, fui un ignorante que desconocía que al pedir de "menú" (75€ de gasto dos personas) me impedía poder ejercer de cliente ("de tercera para usted") criticando algo que no era adecuado. Nos hemos sentido incomodos, decepcionados y ofendidos con el broche final al cambiarnos el postre (por un tiramisú) dejando el plato deslizándose por la mesa comentado en tono desafiante "a ver si este es de su agrado señora".

Ahora va la crítica sobre el cambio que ha tenido el menú de arroz en unos meses. Quiero decir que ya había comido en su establecimiento a la carta y de menu anteriormente.

Subida del precio en un 10%. De 27 a 30€ por persona. Ahora sin bebidas (antes entraban dos copas de vino por persona) y al coger una botella incremento total del 25%. Ticket final 75€ que pagamos, antes eran menos de 60.

El arroz entre semana puede ser al gusto (individual) y así lo indica el menú. Ayer no pudimos probar dos arroces, pero la sorpresa fue al salir a la terraza a tomar el café, al ver a una pareja que iba a la carta que si tenían dos paellas independientes. Otro gran detalle clasista.

Sobre la paella Can Moyas que la había comido en carta y en menú anteriormente, esta vez estaba sin sabor, sin presencia de la picada especial, con una cantidad excesiva de pimiento verde y con la alcachofa reseca sin estar integrada en el arroz (justo ahora que es temporada).

En el pica pica los mejillones la salsa estaba excesivamente líquida y sin el sabor habitual. El pan de cristal blando y sin cocer.

Los postres sin opción de escoger tarta de queso o de chocolate nos ofrecieron la "mil hojas de nata". Dos láminas de hojaldre seco con nata de spray en medio. Una auténtica broma para un restaurante que se las da de querer "un atento servicio para conseguir el máximo bienestar de nuestros clientes" como dice la página web.

Para acabar, todo lo escrito es mi experiencia y sobretodo comparando con sus propias versiones anteriores. Conmigo habéis ido de más a menos. A seguir facturando, yo seguiré con mi...

Voy a relatar la experiencia incómoda y desagradable que hemos vivido en este establecimiento. La propuesta gastronómica dejaba mucho que desear, pero lo que sí fue nefasto, fue la atención por parte del camarero. Al llegar le pregunto si tienen vinos de la zona por copa (me gusta probar los vinos de las zonas que visito) y me contesta que los vinos catalanes solo se venden por botella. Que aquí solo vienen "guiris" y que demandan vinos como verdejo o albariño. Aquí es cuando se deja entrever su falta de profesionalidad, ya que suelta el siguiente comentario, "guiris son todos los que no son catalanes para mi.." y yo que me encanta que la gente tenga conciencia política, le digo, "dejando a un lado tu postura independentista o nacionalista, centrémonos en lo que nos compete". Su actitud era de querer demostrar algo en este sentido, más que atendernos con amabilidad y de forma aséptica. Pedimos dos entrantes, coquinas (tamaño muy pequeño) y boquerones en vinagre (un exceso de ácido que le redujo mucho la jugosidad al pescado); y por último, arroz de presa y gambas. Le comento que, por favor, la presa y las gambas poco hechas (ya que esto en función de cuando lo pongas consigues un punto de cocción u otro). Me dice que a ver porque lo terminan en horno y le digo, pues si no os importa pon las gambas al salir del horno (máximo respeto a un producto como la gamba roja). El peor momento, donde nos ha despreciado y tratado de forma cero profesional, ha sido cuando le decimos que el arroz ha venido sin terminar de cocer y está insulso. Esto va relacionado ya que si no le das fuego suficiente el grano no se sella y no se carameliza con la gracia del sofrito y el fumet. Esto se lo decimos amablemente, ya que somos personas razonables que sabemos que en la cocina se puede errar, ya que es algo muy humano. Relato textualmente lo que nos dice "ya me olía yo esto cuando me dijiste lo del punto de la gamba, ya me lo olía" "hacemos miles de arroces y que casualidad que el vuestro sale mal" "llevo muchos años trabajando aquí y nunca me mandaron un arroz de vuelta" "no te hago otro que te va a salir igual" y un largo etcétera haciendo alarde de su profesionalidad. Aquí es cuando me quita las ganas de comer esta persona y le digo que me traiga la cuenta. Me insiste que pida algo, pidiendo disculpas "entredientes", y bastante nervioso. Por terminar con esto le dijimos que un solomillo al punto y listo. Por añadir, el solomillo no soltaba ni una pizca de jugo y las patatas tenían un deje a aceite muy muy reutilizado muy desagradable. Pero insisto, lo peor ha sido el tratado de...

Such a delicious restaurant and only a block from the beach! Start with the cava sangria. Phenomenal. We then watched the maitre’d cut iberian ham off the loin and serve us 30 pieces! The clams in garlic sauce were exquisite. The ribeye you grill yourself on a hot stone with sea salt. Also ordered the tuna tataki entree which was so fresh. They were even accommodating for vegetarians and made me a black rice vegetarian paella- Actually it was the best rice ive ever had! This city is fantastic. The beaches are amazing and the food...