Muerde la Pasta — Restaurant in Gijón

Cena del sábado 3 de mayo. Acudimos a cenar al local dado que es la novedad de la zona y aunque no llevamos grandes pretensiones porque conocemos otros locales de la marca en otras provincias, la decepción fue mayúscula. Entramos a las 21.45, el local ya de por si deja bastante que desear, ya que da la sensación de que estás atravesado en mitad del pasillo del centro comercial, acompañado de muchísimo ruido, niños corriendo por medio de las mesas y gente empujando para intentar coger algo de comida ya que en cuento lo ponen en las bandejas vuela. La comida no tiene nada de sabor, intentamos probar un poco en general, primero pastas, de las cuales ninguna tenia sabor, completamente insipidas, no llevan salsa sino una especie de nata grasienta para darle consistencia, pero saben todas igual, la unica excepción es la pasta tartufa que se dejaba comer. Las pizzas… sin comentarios, habia 5 variedades y volvemos a lo mismo, masa con una pasta grasienta que simula ser queso, y algun adorno por encima (trozos de jamon york, que no bacon, o una amalgama de burger meat que no carne picada) simulando ser los ingredientes de la pizza que quiere aparentar ser. De segundo, poca cosa un pescado, una carne y pollo tanto rebozado (milanesa) como frito relleno de queso y york. Este ultimo teniendo en cuenta la bajísima calidad de los ingredientes se dejaba comer, y una vez estas sentado y has pagado 18€ por persona por semejante porquería no queda otro remedio que comerlo. El pescado insípido ( era panga, o algún sucedáneo de merluza), de muy baja calidad. La comida encima de mala, no esta dimensionada para la cantidad de gente que deambula por el pasillo, llenando el plato con dos o incluso tres pisos de las mezclas mas surrealistas de comida que he visto nunca en su afán por acaparar comida que en mas de un 50% acaban dejando revuelta en los platos. El tema de la bebida me dejo atónito… quitando los típicos refrescos que puedes encontrar en cualquier cadena de comida rápida, el resto cervezas y vinos de nula calidad, pero lo que mas me llamo la atención es el ver menores pudiendo acceder a alcohol sin ninguna tipo de control o restricción, vimos una mesa que parecía estar allí de botellón mas que cenando. Por ultimo, en el momento de los postres, a eso de las 22.30, cuando aun faltaba mas de una hora de servicio, contemplo atónito que están todas las bandejas vacías, ni un solo trozo de tarta, de la que quiero pensar que alguna vez existió por los restos de migas que observo (adjunto foto). Estuvimos esperando pero a las 23, comenzaron a recoger toda la comida sin reponer postres… nos toco comer una tarrina de helado industrial, de una máquina completamente sucia con la rejilla hasta arriba de restos de helado dejado allí por la gente descuidada. Todo este panorama, amenizado por el personal, comentando por el pinganillo lo que ocurría en las mesas, pero sin poner ningún tipo de solución ni orden. En resumen, no solo es un tipo de restauración que no esta a la altura de la gastronomía que tenemos en asturias, sino que no esta a la altura del resto de locales de la cadena. Espero puedan tomar esta reseña constructiva en valor para reorientar la deriva que esta tomando el restaurante y pulir todos los fallos porque de lo contrario, auguro...

Fuimos el día de la inauguración y tuvimos la inmensa suerte de entrar dentro de los cincuenta primeros, así que nos regalaron la comida. Aún así, si precio está muy bien.

La comida como en los demás restaurantes de la cadena es comida de batalla. Que nadie se espere que comerá delicatessen ni gourmet. Aún así, es muy disfrutable, con mucha variedad de platos, postres y bebidas.

Un punto a su favor, entre otros muchos, es que en su bufete libre se incluyen las bebidas y postres. Deberían aprender los restaurantes asiáticos los cuales te cobran un ojo de la cara por un postre, y medio riñón por una bebida.

El local es de los más pequeños que hemos visitado por otras ciudades, aunque lo que es el comedor es grande ya que han empleado parte del pasillo para colocar mesas y sillas.

Hemos estado en seis MUERDE LA PASTA y todos mantienen una misma estética. Este sin embargo la rompe, dándole un toque más juvenil y alegre con colores muy italianos. A mí personalmente me gusta más la estética original de los demás restaurantes.

Sitio muy recomendable para ir en familia y amigos. Es barato, y aunque sea comida de batalla, es disfrutable (mucho).

Ya era hora de que nos pusieran un MUERDE LA PASTA en Gijón, además en LOS FRESNOS (antiguo PRYCA), ya que creo que es el mejor sitio para ello.

Recomendable para la franquicia que se busquen local en el centro comercial PARQUE PRINCIPADO. Fijo que...

Domingo noche día de buffet libre de pizzas y solo tienen 3 tipos y una focaccia...

A destacar que puedes ponerte como las grecas a pizza.

Pero poca variedad no sé si es por qué solo tienen 4 tipos de pizza o si ponen más no las probamos.

A mejorar las tosta de verduras aún recién salida estaba templada y la verdura fría solo una parte estaba templada.

Otra cosa a mejorar, podían darle algo más de alegría con albahaca o orégano las verduras o darles un salteado para que no tenga tanto sabor a bolsa congelada no mimar un poco más el producto.

La pizza bien lo único unas estaban un pelín duras y otras como semi cruda.

La dulce estaba aunque recién sacada dura no sé si intentan hacer la finísima o algo así pero no es lógico que recién sacada este como si fuese del día anterior es otro punto a mejorar.

Soy cocinero profesional y se que estoy es un restaurante de 4 o 5 categoría pero por lo menos darle un poco más de amor y tiempo a las cosas no todo vale ni pasa nada tardar un minuto más, pero que salga todo bien.

Por el resto hace su cometido, por 6,95 no se puede pedir más, pero deberían mejorar esos aspectos no sé cómo estará la pasta ya que no la e probado aun, habrá que venir otro día y valorar si merece la pena...