Restaurante Torremar — Restaurant in Gijón

Hacía muchos años que no habíamos vuelto al restaurante Torremar y ya que estábamos con unos amigos y era la hora de almorzar nos animamos ya que siempre habíamos comido el menú del día y estaba muy bien, cosa que ya no ocurre la comida fue desastrosa mala presentación y las setas a la crema incomestibles, las albóndigas parecían de las congeladas que venden en los supermercados, el cachopo muy quemado seco y difícil de tragar, la menestra tenía más carne que otra cosa que parecía trozos que habían sobrado de otros platos, lo único positivo fueron los postres que la verdad estaban muy ricos, el restaurante está como cuando lo abrieron allá por los años 90 desfasado anticuado y da la sensación de estar hasta sucio, esto fue el martes y el menú estaba a 11 € cosa que en Gijón suelen estar entre 8 50 € o 9 €, la verdad es que pensamos que ya te cobraban 11 € por el menú estaría en mejores condiciones, todo un error por nuestra parte, nos extraño cuándo entramos que queríamos subir al comedor de arriba ya que hay dos y los tenía encerrados ahora...

Lo allí vivido es de un surrealismo tal, que no voy a entrar a explicar los detalles de la conversación que nos invitó a no volver a acercarme al lugar, porque resultaría muy difícil de creer. El dueño tiene una especie de alergia a las buenas formas y la buena educación y le ponen muy nervioso. Se pasa de campechano y de natural (y de carente de educación) La señora cocinera es la que nos servía el menú, salía de la cocina con los platos, mientras él hablaba de su vida en la barra a una clienta visiblemente alcoholizada que le prestaba alguna atención. La barra desierta pero, eso si, completamente cubierta de cristalería sucia que esperaba (durante la hora aproximada que allí estuve) a que alguien la lavara y después colocara. En mi presencia no se lavó un vaso. Eso sí, de la vida del dueño y de la clienta alcohólica, podría contar varios detalles. Hace aproximadamente 15 años entré en ese local por primera vez. La experiencia entonces ya fue nefasta, sin embargo, tras tantos años, decidí que le daría una segunda oportunidad....

El jefe nada más verte si eres turista te aplica la tarifa,te dice que los menús que anuncia en la barra son solo de encargo,y en una mesa al lado de la nuestra se los sirvieron,como fuimos en Domingo 20 euros por cabeza. Los callos con garbanzos son GARBANZOS CON SABOR A CALLOS el vino igual que el agua,solo con color y la paella mixta con cuatro cabezas de gambas(Se ve que se las comen en la cocina). No paso ni por la calle otra vez que...