Taquería Azteca — Restaurant in Gijón

Voy a intentar estructurar la reseña por puntos y explicar las distintas razones por las que NO volvería a este local. Llevo más de cuatrocientas reseñas y es la primera vez que tengo que poner una así.

Pedimos tres platos veganos y dos de ellos nos los sirvieron con nata; lo comenté amablemente con la camarera y esta, de muy malas formas, me dijo que lo único vegano que pedí fue el burrito. Le aclaré que no, y me dijo inquisitiva: "te pregunté si eras vegana, dijiste que sí, y luego no me dijiste si querías veganos los otros dos platos". Le aclaramos de buenas maneras que se había dejado muy claro y ella siguió en sus trece hablándome muy mal cuando justamente era la única del grupo que quería dejarlo estar y repetía que no pasaba nada. Se fue y apareció la cocinera, que muy amablemente nos ofreció traernos los platos veganos y que el resto se comieran los del error para no tirar comida. Le dije que no pasaba nada, que lo dejábamos así, no queríamos hacer trabajar a nadie de más, pero insistió amable y nos trajeron los platos veganos al poco rato. La camarera nos trató bastante mal el resto de la noche.

Las quesadillas gustaron mucho a mis compañeras y el burrito chingón vegano es el plato vegetal que más recomiendo, estaba muy bueno, aunque algo escaso para su precio.

En general NO FUE UNA EXPERIENCIA AGRADABLE. Éramos un grupo grande y somos conscientes de que en hostelería suele ser molesto y agotador para el personal, pero no es justificación como para recibir ese trato de la camarera por un error humano que, si hubiera hablado sin atacar, no hubiera tenido importancia y hubiéramos comprendido perfectamente.

Desde luego tampoco es la experiencia gastronómica mexicana por excelencia, hay gente con familia mexicana en nuestro grupo que conoce su gastronomía y ha probado sus platos en mil ocasiones y no disfrutaron nada de la cena. El único motivo para volver, la amabilidad de la otra camarera y la cocinera, que fueron muy pacientes, encantadoras y con mucho temple pese a la tensa situación. Darles las gracias a ellas dos de nuevo por aligerar una situación así de tensa y permitirnos acabar la noche de la mejor manera dentro de lo posible.

RESPUESTA:

Dado que no puedo responder a comentarios, o no sé si es posible aclaro aquí: "-Un burrito vegatal puede ser sin queso? -Si, ¿Eres vegana? -Sí, lo quiero vegano y para compartir. Y los tacos veganos ¿de qué son? Vale, pues dos de nopales. ¿Y las tostadas veganas que llevan? Genial, pues una de esas".

No había más aclaración posible.

Y desde luego que la camarera nos trató mal, acusando reiteradamente. Podéis leer mis reseñas, no tengo una sola reseña mala, valoro todo de la forma más objetiva posible y jamás haría algo por pura destrucción o por hacer daño. Cuando le dije de primeras que no pasaba nada y que no era necesario sustituir el plato, me siguió echando en cara que yo pedí mal, ya había dejado el tema y ella seguía... cuando hay siete personas de testigo que dije todo vegano. No puede decir en una respuesta que la camarera se fue alarmada por mi actitud cuando fue ella la que saltó solo por preguntar por la nata muy educadamente. No nos ofreció sustituirlos, me acusó de pedir mal y después de que me apoyara el resto de comensales por las buenas, dijo, de nuevo aclarando que lo habíamos pedido mal, que iba a preguntar, a lo que yo dije que lo dejáramos así, que de verdad que no pasaba nada. Terrible actitud intentar quitarle importancia, ¿no? Solo me había molestado una falsa acusación, respondí amable y en ningún momento pretendía comer gratis, de hecho nuestra factura fue de más de 130€.

Pueden señalar mil cosas pero desde luego no mi actitud, que traté de restar hierro, ni tampoco que tengo más claro que el agua lo que pedí porque, como vegana, siempre hay problemas y no me la quiero jugar. Entiendo que haya que apoyar a los empleados pero no si con ello acusas falsamente a un cliente. Me parece una falta gravísima y que sinceramente, no me esperaba. No me hubiera gustado tener que llegar a...

No suelo hacer reseñas de sitios, pero en este caso creo que merece la pena. Fuimos un grupo grande de gente a cenar y la noche empezó muy bien. La camarera vino a tomarnos nota y dos de las personas pidieron platos veganos. Importante decir que, cuando estas preguntaron sobre estos platos, la camarera les informó acerca de sus opciones e ingredientes, en ningún momento se habló de opción vegetariana ni nadie pidió algo como tal.

Cuando llegaron las comandas, los platos veganos resultaron venir con nata y las personas se lo hicieron saber a la camarera. En lugar de admitir el error, cambiar los platos y solucionar la noche, decidió que la mejor opción era encararse a la persona en cuestión y mantenerse en sus trece de que había pedido vegetariano delante de las 7 personas que habíamos escuchado claramente cómo se pedían veganos. Poco después salió la cocinera, que fue muy maja, a intentar enmendar el error, pero el mal trago y las malas formas nos las comimos igual.

La comida estaba rica, pero nada del otro mundo. Algunos platos no tenían mucho sabor y faltaban salsas o condimentos que les dieran un poco de vidilla. Las opciones veganas/vegetarianas son las que menos sabor tienen, parecen un poco descuidadas. Las raciones están bien estructuradas y me pareció muy bien que puedas pedir tacos de forma individual, por que si no tienes mucha hambre o no eres de comer mucho, puedes cenar a tu gusto sin forzarte a comer algo que sea demasiado para ti. El local también está muy limpio y, a pesar de haber pedido bastantes cosas, el servicio fue relativamente rápido.

Aun así, el trato que recibimos eclipsa todos los puntos positivos que pudiéramos haberle dado al restaurante. Una cuestión como entender un pedido mal es algo comprensible en hostelería. En ningún momento nuestra intención era poner en un aprieto al personal y entendemos perfectamente que pueda haber confusiones algunas veces, pero encararse e intentar hacer luz de gas a un grupo de 7 personas no es...

Nos atendieron a las 15:00/15:30 y sin haber reservado, eso me pareció un buen gesto que no todos los restaurantes, a media hora de cerrar la cocina, te atienden. Nos dieron poco tiempo para leer la carta y aunque yo tenía una idea de lo que pedir ahora lo pienso mejor y debería haber cambiado algún que otro plato. Probamos los nachos y estaban muy buenos y bien de cantidad. Pedimos también unas enchiladas con salsa de pimientos verdes como recomendación ya que fajitas no les quedaban (culpa nuestra por llegar tarde) y la verdad que no me gustaron mucho, bastante cantidad eso si, las raciones abundantes. Soy muy fan de la comida mejicana y sobre todo de los tacos cochinita pibil y he de decir que estaban bastante regulares, me sigo culpando( y probablemente sea eso) por haber llegado tarde, aún así, me parecía que la carne estaba un poco seca y la verdad que no comí más de dos tacos. (Lo que sobró nos dejaron cogerlo para llevar.) Pedimos también la tarta de queso que había visto por aquí con una pinta espectacular, y fue lo que me hizo la verdad elegir el sitio entre otros mejicanos de Gijón (ya que tanto mi pareja como yo somos aficionados catadores de tartas de queso) y fue un verdadero chasco. Mi pareja no pudo ni comer una cucharada, y yo bueno lo intenté pero tuve que dejarla a la mitad. Tenía un regusto final que no llegué a entender, supongo que será del "ingrediente secreto" del que hablan en la carta. Aún así, fue bastante caro para lo poco que no disfruté. No me gusta dar críticas negativas a menos que pueda aportar algo constructivo y bueno seguro que mi experiencia hubiese sido mejor llegando a una hora más temprana, pero la verdad que me fui con un mal sabor de boca. Las camareras muy majas. Nos...