Anoche fui con mi pareja a este restaurante porque en otra ocasión ya fui y comí pescado frito y todo bien, hasta ayer, que pedí tataki de atún que estaba insípido y una ternera que costaba masticar y casi me atraganto literalmente. Por no ser malaje nos la comimos pero la sorpresa fue que luego se lo comenté al camarero y le dio bastante igual. La otra vez que fui escuché en la mesa de al lado que la carne estaba dura ( ya se comieron el plato) y en ese caso no se la cobraron y se disculparon mil veces ( yo pensaba que era cosa de los clientes porque el pescado que comimos estaba bastante bien pero anoche descubrí que los clientes tenían razón). A nosotros bien que nos cobraron los casi 15€ que costaba el plato ¿Por qué a nosotros otro trato? Además en el resto de la cena igual... me sentía fuera de lugar porque a otras mesas ( por ser clientes conocidos) los trataban diferente. Ni siquiera nos ofrecieron un chupito por la disculpa y la cuenta tardaron muchísimo en traerla. Además un camarero en especial tenía la mascarilla todo el tiempo bajada. Esperemos que no pase nada porque yo tengo una enfermedad crónica y como se detecte un caso de Covid allí es cuando vamos a tener un problema serio. No volveremos ni lo recomendaremos jamás.