El Tendederu — Restaurant in Llanes

Experiencia surrealista: Queríamos desayunar, ya sentados en una mesa. Viene el camarero (¿o dueño?) y básicamente nos echa con las palabras "no puedo atenderles hasta las 11:00". Eran las 10:30, y el local medio vacío. Igual sirven aquí desayunos tan especiales que costaría un esfuerzo sobrehumano servir un par de cafés adicionales. Nos quedamos sin saberlo.

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Jajaja, contesta ahora el propietario que simplemente avisaba de "un tiempo de espera". Casi tendríamos que dar las gracias por un aviso tan cortés. No, perdón. Ni siquiera nos preguntó lo que queríamos para juzgar si esto iba a tardar mucho o no. Este señor llegó y dijo literalmente que no nos podía atender al menos hasta las 11:00, cuando eran exactamente las 10:29 (¡miré el reloj!). Esto no es un tiempo razonable de espera. Es darnos a entender que no nos quiere como clientes. Y leyendo otras reseñas no parece un caso aislado. Es su derecho como propietario organizar el trabajo como le venga en ganas, faltaba más, pero no nos cuente historias. Le recomiendo poner claramente un cartel que diga que sólo atenderá si le da la gana y si no le causa demasiado estrés servir a unos pocos...

Me hubiera gustado saber qué tal se come o tapea en este lugar, pero nos quedamos con las ganas; y es que a las  22:20 de un jueves 3 de septiembre con bastante  ambiente  en la localidad, si la persona que atiende las mesas de la terraza nos dice a las  dos personas que eramos, cuando le preguntamos  por una mesa en aquel momento libre,  que ya no atendía a nadie más...que la última mesa que iba a servir era una de cuatro personas que en aquel momento comenzaban a ojear la carta..., no se, él sabrá, es su decisión y su negocio. No voy a entrar a valorar si la contestación recibida nos pareció más o menos amable por que ya es algo subjetivo, simplemente fue breve y correcta, sin más. En fin, hay más peces en el mar y así fue, minutos después en otro lugar, pero eso es...

De las peores experiencias gastronómicas. Fue todo un despropósito. Desde que pedimos nada fue bien. Pedimos dos tostadas con jamón y tomate y un cruasán a la plancha (lo trajeron tal cual y tuvimos que pedir que lo partieran a la mitad y lo tostaran). Dos veces tuvimos que devolver las tostadas. La primera vez las trajeron vacías, con dos paquetes, uno de matequilla y otro de mermelada… decimos que no es lo que hemos pedido y ni se disculpan. Nos traen de nuevo las tostadas con una sola loncha de jamón (adjunto foto) y ya me levanto y pregunto a la chica que si es así como sirven las tostadas de jamón y tomate. Me responde “No”, se las lleva sin disculparse, le añade otra loncha y el aceite y al volverlas a traer tampoco se disculpa. No he...