Restaurante Riomar — Restaurant in Llanes

Probablemente el sitio menos recomendable de Llanes. Somos de aquí. Un trato inadmisible , maleducado y grosero por parte de los camareros. Hemos pedido por favor un vaso más de sidra, porque éramos cuatro personas y nos dieron uno. Uno de nosotros estaba resfriado. La respuesta de “sólo te toca uno por botella guapo” de la camarera en la barra a la persona que nos acompañaba (veníamos con dos amigos de Galicia que no conocían Llanes) nos dejó atónitos. Si pides un tapón para tirar la sidra te cobran 1€ de “fianza”. Son despóticos y se creen con el poder de hacer lo que les plazca con el trato a la gente. Te sientes como si fueras ganado.. Sus costumbres que no son propias de la zona hacen avergonzarse a los que somos de aquí y ver que traten así a la gente que viene por primera vez (nuestro amigo de Galicia por ejemplo) y se lleven una impresión tan deplorable de un lugar como Llanes que se conoce por su buen trato y acogida a la gente que lo visita. Por lo demás la comida es pésima, aceitosa, 100% freiduría. Nada guisado. Un sitio al que no volveremos porque no es la primera vez, pero lo de hoy ha superado los límites. Como puedo ver en los comentarios, no somos los únicos en recibir este trato vergonzoso. Si esto no se dice públicamente entonces se tolera, por eso es importante que quede constancia...

Muy decepcionante. Llegamos temprano por la mañana a esta zona, está la playa, el bar y un parque infantil con merenderos de madera y de cemento en la naturaleza. El bar estaba cerrado y las sillas de plástico recogidas, algo normal y comprensible por la hora que es. También vimos un cartel que prohíbe consumir comida de fuera en la zona del propio bar, lo cual respetamos. Mientras hacíamos tiempo para su apertura y poder tomar un café allí, nos sentamos en los merenderos de cemento más alejados con nuestra botella de agua pequeña y un sándwich.

Lo inaceptable fue que, estando en esta mesa de cemento en la zona pública del parque, completamente fuera del espacio del bar -y este aún cerrado- apareció el dueño gritando desde lejos para echarnos, sin una explicación clara y en un tono totalmente inapropiado.

La sensación que nos deja es que se pretende adueñar y restringir el uso de un área que pertenece a todos. La falta de educación y la forma agresiva de dirigirse a los visitantes no solo arruinan la experiencia, sino que transmiten una imagen muy negativa del lugar. Por supuesto, no hemos tomado el café. Nos hemos ido a otro bar.

El respeto y la cortesía son gratuitos. Tratar bien a la gente no cuesta nada, y sería un gran paso para que los visitantes se sientan bienvenidos en vez...

What a great place! Although it was a Sunday lunchtime the staff were really friendly (even though my Spanish is awful) and the queue for service moved really quickly. Food was fine, ok not Michelin standard, but for the price, position and service it was a bit of a bargain too be honest. I would recommend it to anyone, just remember it's a beach bar and not pretending to be "The Ritz". 5 stars for the...