Restaurante Asador La Bellota — Restaurant in Logroño

Una nochevieja decepcionante. Fuimos un grupo de 10 personas a cenar la noche de fin de año y la cena no pudo ir peor. El servicio estaba descontrolado, tardaron casi una hora en servirnos el segundo entrante del menú. Al poco rato de sentarnos el local empezó a llenarse de humo de las brasas de la cocina, avisamos varias veces a los camareros por si podían abrir las ventanas o encender algún tipo de sistema de extracción y al final conseguimos que encendieran los extractores que los tenían apagados, notando una cierta mejoría aunque nuestra mesa estaba al lado de la cocina y tenían la puerta abierta. Los platos principales fueron un despropósito, los platos de entrecot estaban duros, mal cocinados y sin salsa roquefort como ponía en el menú (al comentarlo nos dijo que se les había terminado), los dos platos de merluza llegaron fríos de la nevera, pedimos si podían calentarla y volvió a salir semi-fría y los tres platos de cabrito que nos sacaron eran todo hueso, sin apenas carne, además de estar crudos.

Nos tomamos las uvas al poco de tener el plato principal encima de la mesa porque se las pedímos con antelación viendo venir que no nos daría tiempo ya que casi eran las 00h. La tarta que se supone entraba con el menú resultó ser un helado y no tarta. Educadamente, una vez acabada la cena, se lo comentamos todo a los camareros y el dueño del local no se disculpó en ningún momento y nos lo echó en cara de malos modos. Algunos se fueron antes porque no habían cenado nada. El resto nos fuimos casi sin tomar cafés porque no se acercaron ni a preguntar.

Entiendo las circunstancias y sé que es un día complicado y el servicio/cocina puede ir más lento de lo normal o puede haber cualquier imprevisto, pero el dueño ni se preocupó en disculparse en ningún momento o descontarnos algo del precio del menú que pagamos, un total de...

Mala experiencia para pasar la Noche Vieja. El sitio que nos pusieron parecía que era la despensa, supongo que por el poco sitio que había en general. Además poca iluminación. La comida escasa, por ejemplo los gambones, sólo dos por persona. Parte del primer plato no llegaba y se estaba acercando las 0 horas, viendo que si llegaba a los de al lado. Se habían olvidado de nuestra mesa?. El segundo plato salió a todo correr junto con las uvas. Segundo plato frío, se quedó carne dura, incomible. Las uvas improvisamos con la mesa de al lado ya que no había forma de ver en ningún sitio las campanadas. El postre no fue tarta e improvisaron creo yo con un poco de helado y chocolate por encima. Se les olvidó el cava. Lo reclamamos y lo trajeron. Una chica de al lado de nuestra mesa se fue, no le traían el segundo plato. Nosotros también reclamamos porque ha dos personas tampoco se lo traían. Se intentó arreglar algo trayendo nuevos platos de segundo, pero parecían recalentados con la misma ensalada de complemento que nos trajeron de primer plato. Cuando menos mejor con unas patatas. En fin...mucha improvisación, descontrol, escased de personal, los pobres camareros no daban abasto. No dudo que sea un buen restaurante, que lo es, con la gente que suele haber, pero anoche fue un desatre a nivel general. Espero que mejore porque yo sí que tengo buenas referencias de...

Fuimos a cenar para la Nochevieja y la experiencia dejó bastante que desear. Aunque no dudo que en un día normal puedas disfrutar de una buena comida por 20€, en una noche como esta, pagar 60€ fue justillo, especialmente por el trato recibido. Entendemos que el aumento de precio está justificado por la fecha, y en cuanto a la comida, diré que fue aceptable considerando la ocasión.

Servicio: El menú indicaba que incluía café y chupito (adjunto foto), pero al terminar la cena nos dijeron que los cafés eran en la barra y pagando aparte, y ni siquiera nos ofrecieron el chupito. Pagamos y aceptamos, pero a las 12:30 decidimos pedir una copa y nos respondieron que no servían más porque querían cerrar. Comprendo que trabajar en Nochevieja no sea agradable, pero si cobras tres veces el precio habitual, no puedes permitirte echar a los clientes antes de tiempo, especialmente cuando ni siquiera se ha abierto la discoteca.

Nos dio la sensación de que abrieron el bar únicamente para cenar con amigos y familia, aceptando nuestras reservas para costearse la celebración de Año Nuevo.

En resumen, no repetiremos. Insisto en que seguramente en un día normal sea un lugar donde se coma bien y a buen precio, pero nuestra experiencia en Nochevieja fue bastante...