Pastelería CalaMillor - Sanchinarro — Restaurant in Madrid

Mi respuesta a quien me ha contestado, que creo no ser el dueño. El dueño nunca contestaría así.

Presado señor,

Es lastimable que un establecimiento no accepte criticas de sus clientes. En Brasil estamos acostumbrados a tener pan mismo en panaderías pequeñas, de barrio. Siempre hay pan francés. Pan es harina, agua, levadura, sal y azúcar. Los ingredientes son baratos. En el domingo, además de no haber ningún pan, tampoco habían opciones saladas. Sólo algunos postres. Es la tercera vez que voy y no lo hay. Su pastelería seguro se gaba de su posición porque es una de las unicas acá. Ojalá asi se quede, sin un competidor para que se vean forzados a optimizar producción y mejor tratar el cliente. Así me han contestado: que quieren cerca “los clientes que les gusten”. Es decir que nos invitan a acceptar que no se mejore el servicio. Y eso, mi señor, es inperdonable. Una opción para reservar pan no es un diferencial, sinó un atestado de su ineficácia. Hay mucho que mejorar, a empezar pela falta de profesionalismo en un barrio nobre como Sanchinarro. Los dulces necesitan revisión: el bizcocho de chocolate está seco. Los entremets están con mucha gelatina. No hay una Tarta de Santiago. La crema sabe artificial. No hay postres de otras nacionalidades. No veo una tarte tatin, una tarte aux citrón. Yo he trabajado como jefe de panadería por más de 2 años, creando recetas y enseñando la gente, todo com mucha humildad. Pero vamos. De que adelanta arreglar un vaso si está roto?

Esta pastelería en Sanchinarro es referencia. Está siempre llena. Los productos son razonables. El problema aquí es que probablemente los dueños no están muy presentes. La demanda aquí pide por más asistentes y una patisserie de mejor calidad. Hoy es domingo y no hay pan. Lo que salva aqui es la localizacion y los atendientes de latino america, siempre simpaticos. Si Cala-Millor no evoluye, los clientes de Sanchinarro se van a Mama Framboise y otros, que tienen...

SALIMOS SIN DESAYUNAR!! 10h de la mañana y mostrador vacío, les faltan casi todos los desayunos que tienen anunciados en las minipizarras... después de 40 minutos esperando por 2 cafés y 2 croissants que ya estaban rellenos y resecos hemos preguntado si tardaban mucho y la respuesta... SIN RESPUESTA. Obviamente nos hemos ido al 100 montaditos que está justo al lado que encima tiene terraza. Un horror de sitio.. no volveremos.

Tras ver la respuesta vuelvo a escribir porque denota que se quieren seguir engañando... Lo primero, deberían respetar lo que les dice la gente aunque no sea de su agrado, ya que yo he CONTADO MI EXPERIENCIA no he tenido que mirar ninguna grabación. Me parece extraño que contesten de esa manera ya que habréis podido comprobar que esa mañana no fuimos los únicos que se levantaron y se fueron sin haber sido atendidos. Alomejor en vez de tener personal mirando cámaras deberían tenerlos atendiendo el negocio. Lo de faltar variedad me hace gracia... la chica que nos atendió nos dijo literalmente que no miráramos las pizarras ya que sólo había croissant y barrita con tomate (sin jamón porque tampoco había), cosa bastante lamentable teniendo en cuenta que eran las 10h de la mañana y que es un lugar donde se sirven desayunos. Y para terminar, la no respuesta a un cliente que pregunta educadamente cuánto tarda su café no es darle la razón, es quedar como un maleducado.

La verdad que no suelo hacer comentarios negativos y mucho menos volver a contestar pero viendo que la grosería es lo único que se sirve en este establecimiento tenía que hacerlo para que los que se planteen ir a desayunar no lo hagan (no soy la única que opina esto, ya tenéis comentarios similares). Seguiré yendo a los 100 montaditos o a cualquier lugar donde me...

Fui hace poco a desayunar, y la experiencia fue bastante negativa. Nada más llegar al querer pedir me dice el camarero que no tienen cocina, le indicamos que no hay problema y que nos de la carta, a lo que nos comenta que no tienen carta, que el leerá la comida y yo decida. Le indico que quiero saber qué pago por el plato y incluye. A lo que me dice que vaya preguntando. Obviamente empezamos mal, imprimir un menú no requiere esfuerzo, pero aquí tenía que elegir con la presión del camarero mirándome e indicando que tenía prisa.

Le pido una tostada de tomate con queso, y me comenta que si quiero la tostada con el queso derretido. Le indico 3 veces que no, que quiero todo aparte y yo me la preparo para ponerme el aceite y el tomate a mi gusto. Sorpresa, la tostada viene montada con el queso por encima.

Se lo comento a mi acompañante, a lo que una camarera pone la oreja y me pregunta que qué me pasa? (Con estas palabras). Le comento la situación y me dice que la cambia. Obviamente le digo que no hace falta, que no hay que tirar la comida pero que obviamente no era lo que había pedido.

A la hora de pagar, y después de intentarlo varias veces con la tarjeta y que me apareciese cobrado, me dice que eso pasa mucho, que no les funciona el datáfono y que no me lo cobrarán al final en el banco, aunque el cargo aparezca.

Para terminar, la joven nos pregunta por nuestra experiencia a lo que le indico, que no ha sido la mejor y que no creo que volvamos. Esta persona procede a contestarme: “¡ah bueno! Es que yo creo que eres un poco malcriada. “

Solo por dejar patente el mal servicio que dan. No puse una hoja de reclamaciones por no montar un espectáculo. Obviamente no pienso volver, y espero que cada vez menos gente lo haga. Hay mejores sitios en Sanchinarro...