Restaurante La Bisagra — Restaurant in Medio Cudeyo

Fuimos a este mesón ya que teníamos que ir al pueblo y porque vimos la mayoría de comentarios buenos hacia el lugar. Una vez allí el camarero fue muy amable,una vez en la mesa;un comedor pequeño con mesas muy pegadas pero bueno,el menú era muy simple y entre ello pedimos alubias rojas(sólo sabían a ajo frito),macarrones con tomate,llevaban chorizo y beicon(sabían muy raros y la verdad no nos gustaron nada y eso que es un plato sencillo,de segundo pedimos lomo a la plancha con papas(estaban tiesos y nada buena la calidad),huevos con beicón porque no había nada más y de postre tarrina de helado(sin más) y tarta de limón(muy mala,empalagosa parecía un vómito,con base de sobao empapado y se notaba llena de trozos de gelatina que no habían batido bien,fue algo decepcionante esperaba algo mucho mejor y por ese precio ahí lugares con menús estupendos...

Para empezar no hacen reserva así que entras por orden al comedor, el cual al dueño le da la gana. Una hora esperando allí para que metiera a otro par que iban detrás nuestro. A lo cual solo te responde que tengas paciencia, me fastidio yo con la paciencia si estás metiendo a la gente a tu convenir .Una desorganización total. Lo siguiente y la gota que ha colmado el vaso, le hemos pedido una simple ración de mejillones para esperar al comer el cual me ha contestado que no que estaba la cocina muy ocupada. Cuál ha sido mi sorpresa? Que 5min detrás mío se lo han pedido unos "conocidos suyos" y se los ha servido. Una falta de educación y respeto hacia el cliente muy grave. He llegado a pensar que nos estaba vacilando el dueño. Muy mal no lo recomiendo para absolutamente nada, ni si quiera para tomar un triste vino. HORRIBLE. Jamás volvería....

Hemos comido aquí hoy, para hacer tiempo antes de llegar al spa. Si te gusta la comida casera de calidad, es tu sitio, a medio día no hay carta. 4 platos de primero, 4 de segundo, y un montón de postres caseros, las raciones muy abundantes (me han puesto para mí una fuente de garbanzos con gambas que con eso comía dos días), y no entra café o bebidas que no sean vino, agua o casera. Hay reseñas con muy mala leche, hay que esperar un poquito, porque es un restaurante pequeño con su propia clientela, el personal es muy amable y atento, y la comida de calidad. Si el menú si vienes de fuera cuesta 15 y a los habituales 11, no es tener cara es que un obrero que va todos los días no lo va a pagar a ese precio, pero lo vale. Me alegro de no haber hecho caso y haber comido allí, sin duda será parada obligatoria cuando vengamos...