Porta da Aira — Restaurant in Ourense

This was not the experience I was expecting. I asked for huevos rotos con lomillo to go, the waitress was very nice, I asked her if I could please have the yolk made well cooked and the steak medium. She was nice and placed the order, however the waiter that was also there met with them while she was placing the order, they were looking my way and laughing, and this is the food I got. I by the way broke the yoke when I got to the hotel to see if maybe it was hard under, even though I knew better since you could clearly see it was runny. The steak, well the picture tells that story. And the place did not look too busy at all, not that that should be an excuse to make someone bad food. I didn’t pay with stones, or half of the cost, I was a normal paying customer, I should’ve been treated as such. I saw other places come out as I was waiting, and they looked perfectly fine. To the owner: you’re welcome...

Fuimos, a cenar cuatro amigas, teníamos mesa reservada para las 9, el camarero vino enseguida a ver lo que queríamos comer casi no nos da tiempo a ver bien la carta. Cuando pedimos la consumición nos sirvieron enseguida, todo hasta ahora bien, el caso es que en cuanto empezamos a comer el camarero y una camarera pasaban todo el rato si habíamos comido la ensalada se llevaba la bandeja el caso es que el acoso fue tan grande que llegamos para cenar a las 9 y a las 10 ya habíamos acabado, comimos una ensalada de entrante, " vinieron dos veces a preguntar si estaba todo bien, el segundo unos huevos rotos con entrecot, otra vez pasaron dos veces para preguntar si todo iba bien. En cuanto vieron que la bandeja estaba vacía se llevaron la bandeja y nos preguntaron si tomábamos postre, dijimos que si, nos traen el postre según iba acabando una le llevaban el plato como aún eran las diez porque habíamos comido a toda velocidad.....decidimos quedar allí un rato porque además llovía y ta el acoso era descarado viniendo a preguntar si estaba todo bien y si pedíamos la cuenta, total que cuando nos cansamos pedimos la cuenta y el camarero la saca del bolsillo del delantal. Desde luego nunca vamos a ir a cenar porque todas las prisas eran porque después tenían la mesa reservada y les convenía que dejásemos la mesa cuanto antes para meter a otros. Nos pareció una vergüenza, cuando vasca cenar vas con calma y relajada no para que te hagan engullir la cena. Si volvemos será para tomar unos pinchos que los hacen muy ricos pero eso ya lo tienes que comer...

Este lugar merece las cinco estrellas por muchos motivos. El primero, porque inicia su andadura de la mano y directrices de uno de los mejores, sino el mejor, tabernero de la calle de los vinos. El Sr. Hipólito. Desde ese enfoque sabio, calidad de producto , precio razonable y señorío en el trato, quiénes ahora regentan el local ofrecen:

Reforma y diseño, bonito.

Probablemente la mejor cristalería, sin duda . Las copas de vino son imbatibles.

Vinos selectos y de amplia gama, Ribera y Rioja , Godello y Albarino.

Tapas y raciones muy atractivas , entre ellas destacar los quesos,gallegos y cremosos, el jamón ibérico, los ahumados y revueltos .

Un lugar excepcional.

Tiene una pequeña parte exterior con mesitas y taburete alto. Pena de más...