Restaurante Brutal — Restaurant in Puerto Real

Es la segunda vez que vengo, en esta ocasión éramos 7 px cenando, pedimos 6 hamburguesas y 1 plato de pasta, las hamburguesas vinieron con 30 minutos de retraso, del plato de pasta mejor ni hablamos porque vino 50 minutos tarde después de reclamarlo 2 veces. La primera le preguntamos a uno de los camareros que en ningún momento nos ha mirado mientras estaba escribiendo en la PDA, literalmente nos ha preguntado: “¿Qué plato de pasta?” , después de responderle: “Los fagottini” sin mirar a la mesa todavía se marchó y tardaron otros 10 minutos después de reclamarlo por 2 vez a otra camarera, que trajo el plato a la mesa dejándolo de mala manera “excusándose” con un: “perdón es que la pasta tarda un poco más”. A todo esto añadir que tardaron 20 min en traerme una cerveza que rechacé porque ya me había terminado la hamburguesa fría después de estar en la mesa casi 1h hasta que llegó el plato de pasta. Al pedir la cuenta nos cobraron el “servicio en mesa” el cual preguntamos a qué se debía este concepto y nos dijeron que correspondía con el pan y servicio de los camareros, nos lo retiraron al comentarles que no había llegado pan a la mesa, quitándonos el ticket casi de la mano e imprimiendo de nuevo el recibo. Entiendo como trabajadora que he sido de diferentes locales de hostelería que una mesa de 7px puede ser “complicada de servir” cuando son pedidos muy diferentes, pero en esta mesa teníamos 6 hamburguesas (3 de las 6 eran la misma) y 1 plato de pasta. Nada ha llegado como lo habíamos pedido y todo demasiado tarde. Muy mejorable el trato del personal hacia los comensales. Una verdadera pena porque esto repercute en lo rica que esta la comida. No adjunto fotos de la comida porque con la desilusión del momento y las hamburguesas frías no hemos...

Un cordial saludo. La entrada y el recibimiento, correctos; pero acto seguido, una chica con gafitas (la describo así porque no tenía identificación, ni yo tenía por qué...), pues ella decide donde debíamos sentarnos (excepto a un cliente que, trabajando con su portátil, tenía un escasa consumisión); motivo: porque solo iba a trabajar con la mitad del salón. Por supuesto consumimos algo, pero poco, para marcharnos rápidamente y buscar otro sitio donde poder comer a gusto. Aunque el sitio no está mal ambientado y decorado, tiene una parte del local como si fuera un almacén; y la comida, cuestión fundamental, tampoco está mal y, además, es un tanto innovadora, parece dirigida a un público estrictamente Joven. Y eso lo considero un craso error para un pueblo dormitorio y "envejecido" como Puerto Real, donde quizá, la población joven, en su mayoría estudiantes, no tiene un poder adquisitivo comparable al de una población mayor, que ha optado por no salir mucho, en las noches puertorealeñas, y menos, para no estar a gusto en unos de los pocos sitios abiertos esa noche. No voy a detenerme en las políticas, del o la encargada, sobre cuanta personas pueden consumir en una parte del salón o no; eso es cosas de los propietarios o propietarias; pero muchos ya nos hemos cansado de que, salir a pasar una noche agradable y para estar a gusto, se convierta en una noche con malas decisiones de "muy desagradable gusto". Pido disculpas a quien deba, por tener que ejercer mi derecho a la crítica; pero mi intención e interés, no son los de molestar o enfadar, son para que el sitio los corrija y mejore. Discúlpenme y Gracias por...

Siempre que he ido a este restaurante me han tratado muy bien. Pero una noche fui a cenar con mi pareja, nos sentamos en una mesa en la que no ponía el letrero de estar reservada. El camarero vino nos dijo que queríamos beber y nos puso la cesta con el pan y los picos. Mientras miramos la carta para pedir la cena nos pregunta una camarera que quién nos había sentado en esa mesa, por lo visto todas las mesas estaban reservadas pero no tenían bastantes letreros y no la pudieron poner en todas. A ver la confusión nos levantamos para irnos y comentamos que ya habíamos pedidos las bebidas, a eso que se acerca el camarero primero con muy mala educación diciendo que él no va a los restaurantes y se sientas en las mesas sin preguntar. Yo respondí que nos habíamos sentado porque no tenía el letreros de reservados como otras. A eso que nos enseña una pizarra que estaba en la puerta que todas las mesas estaban reservadas. Nosotros no habíamos visto ese letrero. Comenzamos a decirle que habíamos ido más veces y siempre nos habíamos sentado en mesas que no estaba reservado y que no sabíamos sus normas que éramos de Puerto Real . Este camarero nos contestó que el era de la isla, cosa que no venia a cuento. Note como si se estaba burlado. También nos dijo que lo que teníamos que hacer es poner una hoja de reclamaciones. Para mí fue vergonzoso como nos trató el camarero por un simple error. De vergüenza y el restaurante lleno de gente. No iremos más. No lo...