ROTO Formigal — Restaurant in Sallent de Gállego

Había escuchado buenas opiniones del Roto y tambien malas, ayer tuve la ocasión de poder probar lo que es el restaurante. Qué pena en qué se ha convertido el comedor del Hotel Formigal. Fuimos un grupo de amigos, en total 10 personas. Nos sentaron a la mesa, tuvimos que levantarnos para pedir que nos atendiesen y nos sirvieran algo para beber. De allí al rato vinieron a cogernos la comanda, faltaban bastantes platos y no había nada fuera de carta para poder compensarlo. Pedimos 2 botellas de vino y la comida, que por cierto, tardó un buen rato en llegar. Los risottos que se pidieron estaban buenos y calientes, el resto de la comida estaba fría, por ejemplo las alcachofas a la brasa, pedimos varias raciones y estaban ricas, pero frías. Se le recalcó a la persona que cogió la comanda que 2 personas compartirían ensaladilla, y después las alcachofas, precisamente para que sirviesen primero la ensaladilla y después las alcachofas calientes, lo trajeron todo a la misma vez. Por cierto, las gambas de la ensaladilla, tal cual descongeladas y puestas en el plato, completamente crudas (gamba pelada congelada que se utiliza para diversas guarniciones o rellenos) no habían sido cocinadas de ninguna manera. Cuando nos faltó más vino y queríamos pedirlo, por allí no pasaba ningún camarero. Había 2 para todo el comedor más el chico de la puerta y el de la barra. Entre que terminamos los primeros platos y vineron a recoger la mesa estuvimos esperando más de media hora. Cuando llegan los segundos, más de lo mismo. Pedimos varias raciones de solomillo, había pedidos solomillos poco hechos y al punto, lo mismo les dió preguntar como queríamos la carne porque la sirvieron como mejor les pareció, además la carne estaba dura, (sacada de la punta del solomillo) fría y escasa, creo que mi solomillo pesaría aproximadamente 130 gr. (29€) acompaño fotografía. Los platos de la carne podrían estar templados/calientes para que no pierda temperatura la comida., que en este caso no valdría para nada porque la carne ya estaba fría. Las guarniciones del chuletón, pimientos del piquillo sacados de la lata tal cual. La guarnición del pescado, entre varias, pusieron unas habitas descongeladas y puestas en el plato sin ser cocinadas, como las gambas de la ensaladilla. Cuando llegaron los postres, después de esperar otro buen rato, las raciones escasas, mi tarta de queso por 9€ era como de risa. Acompaño fotografía también. Por cierto, podrá estar muy de moda el no pelar las patatas fritas, pero creo que en el nivel en el que pretende estar el restaurante deberían de pelar las patatas. Yo no me quejo del precio si todo está correcto, pero a estos niveles se echa de menos un aperitivo puesto por la casa, aunque sean unas aceitunas o unas patatas fritas mientras se espera. Los responsables del establecimiento saben que metieron la pata hasta el fondo, que la gente esperó mucho y no fueron capaces de invitar a los cafés ni de ofrecer un chupito para intentar compensar de alguna manera su mal hacer. Tampoco pidieron disculpas y por supuesto ni preguntaron como había ido todo, porque saben que podrían escuchar lo que nadie quiere escuchar cuando está de cara al cliente. Había poco personal para la cantidad de clientes que cogieron para comer. Si no se llega a 80 se da de comer a 40, lo suyo es que funcionen con menos clientes y que estos salgan contentos. Aquí lo único que hicieron fue facturar teniendo el comedor lleno pero sin poder llegar a dar un buen servicio. Además la comida dejó mucho que desear porque estaba fría, escasa y no tenía la calidad suficiente acorde a lo que se cobra. Podría seguir hablando de otros detalles que tampoco nos agradaron, pero para resumir, no volveremos a comer de nuevo al Roto. Por cierto, salimos a 71,20 € por persona, sin haber bebido grandes vinos. (4...

What an awful experience. We stayed for a week in the hotel. A 4 star hotel. But if you can go eat outside the hotel. DO!!! Because we paid to include breakfast and dinner… we had to put up with it for a week!!! But every day, we had an unspeakable situation occur. The food is awful. Even the capers were tasteless. They are very strick with the time. Breakfast is served from 8-10. But at 9:58 they are literally kicking you out of the table, whether you have finished or not what is in your plate. At dinner. If you arrive at 9:30. Good luck finding food! If you have a big group. We were 6. Asked to join tables. (Mind you there was a table set up for 8 in front of us).. and the waiter told us no. Orders from above and replied “what?! You guys can’t be apart for 20 minutos? “🤯 In plain English. The service staff most of them. Not all, were very very rude and uneducated. The food was awful, tasteless and repetitive. Hopefully you will have coffee 😉. We were in a 4 star hotel for a week. First 3 days. No regular black coffee. And they argue with you. Here. The customer is...

Malísima experiencia Fuimos el año pasado y la verdad es que lo pasamos bien, la comida sin más, a precio de estrella michelín pero con menos estrella que un día nublado. El sitio hace como una L, y el año pasado ya nos pusieron en un esquinazo lejos de todo ambiente, este año, sabiéndolo les escribo numerosas veces para que nos ubiquen bien. Perfecto, cuando llegamos, nos ubican en un esquinazo terrible, al lado de la cocina y con un olor a pescado digno de comedor de colegio. Además la mesa está en la entrada, con un frío de narices y totalmente alejado del DJ que ponen hasta el punto de estar escuchando por un lado al DJ y por otro el altavoz con hilo musical encima de nuestra cabeza, con lo que la ensalada de ruido era considerable. Cuando se lo digo al camarero y aquí viene lo espectacular, cuando le digo que les he pedido y escrito que nos pongan en buen sitio etc, viene lo bueno, la respuesta del camarero con estas palabras "Cuánto habéis venido vosotros aquí? 2-3 veces? en la parte principal ponemos a la gente que se gasta 1000-1500€ y vienen mucho" Que ya hay que tenerlos bien puestos para gastarse eso ahí porque ni la comida ni mucho menos la carta de vinos de medio pelo (y creo que se de lo que hablo y el que quiera puede ver mis RRSS) dar para ese ticket a no ser que seáis 20 y ni hecho aposta. Asi que una experiencia horrible, salimos corriendo de allí, garito de postureo puro para cuatro que buscan como dar el cante pasados de vuelta, sin importar la calidad de lo que comen, beben y la atención de cuatro forzudos más preocupados por el reel de instagram que de dar lustre a la hostelería que combine un gran ambiente con una oferta gastronómica aceptable y una atención al cliente homogénea sin importar el histórico de sus clientes, porque desde luego que el futuro, en mi caso, no lo tienen. Nada recomendable en atención y educación y a nivel gastronómico nada reseñable a precios elevadísimos No repetiré bajo...