PELIGRO, zona de carteristas. Estuvimos el pasado día 24 de Diciembre tomando algo con unos amigos. La comida simplemente decente. Cuando salimos del local se me olvidó el bolso con la cartera y el móvil. Fuimos los últimos en irnos de la sala, y cuando volví a los 10 min los camareros dicen no haberlo visto tras haber recogido la mesa. Todo muy sospechoso, ya que el móvil (que era un Apple) lo tiraron a un contenedor de basura cercano al local y lo pude recuperar usando el servicio de localización. El bolso y la cartera no he conseguido recuperarlos. Desaconsejó totalmente ir por el riesgo que veo supone.
ACTUALIZO: la barra del local está alejada y sin visibilidad de la mesa en la que estábamos sentados, por otra parte tampoco está en una zona de paso natural para clientes y comenzasteis a recoger en cuanto nos marchamos porque era ya la hora de cierre de la cocina. De todas formas en ningún momento he acusado a ningún empleado. Estoy de acuerdo que fue un error no llamar a la policía, creo que esos casos podríais ayudar vosotros...
Read moreEsta es la tercera vez que visito este restaurante. Hace años nos dejó buen recuerdo de sus comidas en la antigua hubicación. Lamentablemente ahora no puedo valorar bien por los motivos que expongo. De lo que solicite en la carta no tenían o según la camarera era muy grande. Bonito no hay y rodaballo muy grande😳. Finalmente tube que tomar “ tres cabezas de merluza “ cocochas”. A mi esposa le sirvieron un centollo que lo compro en Carrefour de mejor calidad considerando que estamos comiendo en el puerto pesquero de Santander. No se el tiempo que llevaba cocinado pero la preparación pésima , las patas secas. El postre un” mouse de limos” que no pudimos terminar por su sabor exagerado a queso. Lo consultamos con la camarera y nos respondió que era Leche con nata y zumo de limón pero su textura era de leche condensada no de mouse. Nos comento que el cocinero era el mismo de toda la vida cosa que no pongo en duda pero hoy este establecimiento...
Read moreHace años que no habíamos a este restaurante, puesto que hemos acudido más a Casa José que es del mismo dueño y no está tan masificado. Antaño ofrecía un producto muy bien elaborado y muy fresco. Competía en calidad con El Marucho, cuando éste estaba regentado por la hija del fundador, Emma y cuidaban la calidad con productos del cantábrico. El Vivero ya no es lo que era, la calidad ha caído bastante y la elaboración es mala. Cierto es que determinados restaurantes de la zona han abaratado costes, comprando marisco de otros caladeros (marruecos, irlanda, etc) a menos coste e inferior calidad. Lo que ocurre es no lo dicen cuando lo preguntas, pero sí se nota en el paladar. Los mariscos que sirven son así insaboros, caros y malos. La elaboración no es digna de mención tampoco. Los postres que declaran como caseros, son bastante malos. Por contra y pese a ser un restaurante un comedor muy grande, el servicio...
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