Bastante lamentable el servicio. La comida en general no fue mala, salvo alguna excepción. Teníamos una reserva desde hace semanas y fuimos a comer 10 personas. Primer detalle negativo sobre el servicio, fue que nuestra mesa aún no estaba ni montada del todo, le faltaban 5 sillas. Segundo detalle del mal servicio fue que tardaron muchísimo en tomarnos nota. Preguntamos si un plato tenía lácteos, y el camarero no supo decirnos, y cuando nos lo trae, nos dicen que lo tiene, por lo que tuvimos que pedir otra cosa. Unos pedimos un menú de 21€ que tenían en sábado, y otros a la carta. El menú de 21 euros un poco justo, y de los 3 segundos, ya no tenían uno de los platos y pedimos algo que ellos decían que era secreto ibérico, y si eso era secreto, yo soy la Madre Teresa de Calcuta. Reseco, duro, incomible. La guarnición era lo que lo salvaba. Más desastres del servicio. Pedimos el primer plato del menú y vino rápido, pero entre el primer plato y el segundo, trajeron a los otros 6 comensales sus entrantes y sus segundos. Las judías con setas y gamba, venían frías, pero prefería comerlas así viendo el panorama. Eso si, pedimos un provolone de entrante, y vino después de los segundos platos. Varias veces trajeron una ensaladilla rusa, que no habíamos pedido. Y al final estaba metida en la cuenta, aunque ellos mismos nos dijeron que lo descontáramos de la cuenta final. Pedimos dos consomés, pues uno vino primero, y el otro vino al final. De los que no comieron de menú, primero trajeron los segundos, con unos huevos rotos y tartar primero, y uno de los consomés. Al rato vino una hamburguesa, pero la segunda no era la pedida, y la tuvimos que echar atrás. Al rato trajeron la hamburguesa, y reclamamos el provolone y entonces lo trajeron, cuando estaban servidos ya todos los segundos. Y lo último fue el segundo consomé. Y mientras, los del menú, esperando nuestro segundo plato. Al final, tras ponerme serio y decirle unas palabras al camarero, llegaron esos segundos. Luego pedimos los postres, que estaban buenos, lo único que vino en tiempo y forma. El restaurante en si no tiene mala pinta, aunque el problema es que tienen más mesas de las que pueden atender de forma correcta. Y no se puede servir de forma tan errática. Platos equivocados, segundos antes que primeros, encima el camarero tiene la desfachatez de comentar que la culpa es nuestra por cambiar platos, cuando sólo cambiamos uno y fue porque nos trajo la crema de calabaza que contenía nata, y desde el primer momento le dijimos que si contenía lácteo no la queríamos, y nos la trae diciendo que contiene nata. En fin, un desastre, y todo muy lamentable. No volveré y le diré a quien me lo recomendó, que al menos en nuestro caso no nos atendieron, ni en tiempo, ni en forma. El camarero sólo fue amable tras tener yo unas duras...
Read moreHoy domingo hemos ido a comer junto con la familia, es la segunda vez que voy y la verdad que salgo encantada, con la barriga llena 🤣 hoy he de decir que tuvieron un detalle que me gustó mucho! Soy un poco delicada con la carne y la verdad que cruda no me gusta, soy de las que le gusta bastante hecha. El caso que pedí hamburguesa se va uno y la primera vez vino cruda, le pregunte si me la podían pasar y sin problema, la segunda vez estaba algo más hecha pero para mi gusto seguía cruda(el fallo fue mio de no decirle que me gusta muy hecha) había un chico por ahí que creo que es el dueño y se dio cuenta y vino el camarero más jovencito para preguntarme si estaba todo bien y ya le comenté que me gusta bastante hecha pero que no se preocupara y sus palabras fueron: yo estoy aquí para que tu comas bien... Esas palabras me gustaron mucho porque demuestra que se preocupan bastante por los clientes aún no teniendo ellos el fallo y en este caso teniéndolo yo por no comunicarlo. Soy una persona que si veo que hay bastante trabajo no quiero molestar pero gracias a que se dieron cuenta me comí la hamburguesa tal como me gusta. Volveré y lo recomiendo a todo el mundo....
Read moreDecidimos ir a cenar allí ya que nos hemos mudado cerca y aparentemente el sitio desde fuera tenía buena pinta. Pues nada que ver. La comida pésima y cara. Los platos servidos al momento y fríos (vamos, que estaban preparados desde hacía tiempo y casi ni recalentados). La ensalada de salmón con un triste trozo de salmón ahumado, totalmente seco por el tiempo que llevaba preparado. Los huevos rotos con una especie de patatas de bolsa durísimas, que ahí se quedaron. La brocheta de lomo de vaca fría y seca (cuando se supone que su especialidad es la carne asada, y te la cobran a 17€) y ni los postres se salvaron...el arroz con leche era una masa de arroz hecho papilla con 2 kilos de azúcar y la tarta de queso sólo tenía el sabor del dulce de leche que le pusieron por encima. Todo esto más 2 cañas y 2 Aquarius por el módico precio de casi 90 euros. Un llenatripas carísimo. Cierto es que era un día festivo en Torrejón, pero es que el restaurante no estaba ni a la mitad de su ocupación. En fin, una pena porque la terraza es agradable, pero no volveremos más. Por ese precio en Torrejón hay bastantes...
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