Restaurant la Perleta Valenciana — Restaurant in Valencia

Tengo 2 opiniones sobre "la perleta valenciana", por un lado ... la comida estaba buena, no tengo queja alguna.

Por otro lado ... contar mi experiencia... hace unas 3 semanas reservé mesa para 4 a través de la app de el tenedor. El día antes de ir me puse en contacto con esta aplicación para que me confirmaran la reserva y así fue, reserva confirmada con un 30% dto. en la carta excepto bebidas.

Al día siguiente fuimos a comer (o sea hoy 28/07/19 ) y al traernos la cuenta veo que no se nos ha aplicado el descuento. Me acerco a la barra y me atiende una chica y un señor que creo recordar se llama Emilio y es el jefe según me comenta un camarero. Tanto la chica como este señor me dicen que hace una semana que no trabajan con "el tenedor" por lo que el dto. no se me va a aplicar. Les digo que a mí nadie me ha avisado de esto y que si hemos ido es justamente por ese descuento. Si se me hubiera avisado yo ya puedo decidir si sigo yendo o voy a otro sitio.

El señor me dice de malos modos que de ninguna manera se me va a aplicar el descuento, que no trabajan ya con el tenedor y punto!!. No quiere ni oírme hablar. Además me dicen que yo llamé ayer por tlf. al restaurante para reservar mesa y no por la aplicación. Les digo que no, que yo no he llamado al restaurante para reservar nada. A lo que me insisten que sí, que si no... ¿cómo sabían ellos que queríamos arroz a banda? Les digo que el arroz lo comenté en el apartado notas para el restaurante que hay en la app y además cuando hemos entrado al restaurante un camarero nos había preguntado que clase de arroz queríamos para ir preparándolo.

El señor sigue hablándome con malos modos diciéndome que no se me va a aplicar ningún descuento. Os podéis imaginar mi cara! La chica me hace enseñarle la confirmación de la reserva, a pesar de enseñarla pone en duda que eso pueda ser verdad. Me dice que de ser cierto los del tenedor deberían haberme anulado la reserva. Sea como sea, a mí nadie me había avisado de esto y pienso que la última que tiene la culpa soy yo.

Me pongo en contacto con el tenedor a través del chat y me vuelven a confirmar que efectivamente sí que tengo la reserva y el descuento, que no tienen ningún problema de hablar con ellos, de hecho insisten en hablar con el restaurante.

Mientras yo hablo por el chat, la chica llama a su hermana por si ella sabe algo referente a esta reserva (que tan en duda ponen), la hermana parece ser que le confirma que la reserva se hizo a través de la app y que me apliquen el dto.

Finalmente se me hace el descuento, pero sólo porque la chica ha intentado averiguar si es cierto o no aunque todo lo que yo decía se pusiera en duda. Si hubiera sido por él me habría dejado con la palabra en la boca y que nos den, así de claro. Una situación de lo más desagradable !

Por cierto, señor jefe, por mucho que usted insista los sepionets no son una sepia grande de ración por mucho que quiera tener razón, sepionets son sepias muy pequeñas y se ponen varias en un plato. Los chopitos, no son sepias pequeñitas, los chopitos son calamarcitos pequeños. Que en el palmar se llame sepionet a una sepia grande ... eso es otra cosa.

El camarero que nos atendió en la mesa, muy simpático y atento. Pero, no volveremos.

Tengo varias fotos de los platos pero obviamente no...

Local de Paellas muy buenas en la isla más típica de la Albufera. Y además todo muy rico.

A principios de julio los arrozales que circundan a la isla de El Palmar tienen un verde intenso y vibrante. Si además el día acompaña, la paleta de colores (verdes y azules) te invitan a navegar por la Albufera y descubrir su fauna y su flora. La clave es pedir paella, del tipo que sea. Si en algún sitio del mundo se ha hecho un arte de cocinar paellas, nada como la isla de El Palmar. En la parte exterior del casco urbano, “La perleta Valenciana” se reivindica como local 100% tradicional de lo valenciano. El local es más grande de lo que parece por fuera, pero nosotros no pasamos de la terraza que invitaba a contemplar los colores.

— Entremos en el tema ¿Qué tal se comer? — Siendo de aquí, puedo decir sin ningún género de duda que muy bien. Conocen su oficio y cocinan bien. — ¿Pero bien bien? — Mi abuela, si me vas a preguntar eso, la hacía con menos aceite. Pero te aseguro, que le habría gustado tanto como a nosotros. — ¿Qué tal el ambiente? — Comimos en terraza disfrutando de las vistas sobre los arrozales. Un canal de riego delimitaba la zona. No hay que olvidar que es una zona agrícola y tiene las cosas normales de un arrozal y de una laguna. En algunos momentos, un espray antimosquitos puede ser una gran idea. — ¿El servicio? — Atento y cercano — ¿El ambiente? — Con los excesos de folclore de las zonas típicas. Valencianismo por todas partes y en todos sitios. — ¿Algo más? — Pedimos algunos entrantes. La ensalada de tomate está increíblemente buena. Pedimos paella de pollo y conejo. Según los puristas, la auténtica. No dejamos un grano (ver las fotos). Ya que estamos, pedimos todo tipo de postres. Nada de compartir. Muy buenos. — ¿Algún pero? — Son locales con fuerte presión turística y local desde hace años. Tienen una aspiración de ticket medio y por un lado o por otros lo consigue. El pan lo cobran a 2 euros. No te lo dicen y cuela. A cambio te regalan el alioli, el tomate rallado y una espectacular ensalada de tomate. Lo dicho, una cosa por otra. — ¿Caro? — Si — ¿Muy caro? — Y muy bueno — ¿Repetirías? — Ya lo he hecho. No defrauda.

La oferta de restauración el El Palmar es grande. Los precios no son baratos. La competencia aprieta. Los turistas y locales se reparten los espacios. Suele ser el sitio ideal para llevar a clientes y amigos de fuera y reencontrarse con el folclore propio sin fusiones. La Perleta Valenciana no defrauda. Quedarás bien. Reserva antes de ir para...

El cartel que indica donde está el sitio ya da pistas de lo que te vas a encontrar, sitio viejo, y descuidado por dentro, terraza al lado del canal bien, todo lo demás...uff... llegamos al l restaurante estaba vacío por dentro, solo dos mesas ocupadas...en la entrada tenían 2 mesitas muy kukys preparadas para 2 cada una y estaban vacías...en una de las terrazas había otra mesa libre para 2 y en la otra terraza no vinos si había hueco o no...al decirles que tenemos reserva nos llevan a nuestra mesa, dentro, en frente del baño y de la salida de la cocina, les decimos que si nos pueden cambiar de mesa, si hay hueco fuera y nos dicen que no, que está todo "lleno", les decimos que si nos pueden sentar en la entrada que era una mesa muy bonita y nos repiten que no se puede, que está todo "completo". El restaurante no se llenó en ningún momento, todas las mesas que le habíamos solicitado vacías y nos fuimos a las 16:00 con lo que no creo que nadie fuese a comer más tarde, bastante desgana por parte del camarero por hacer que estuviéramos más cómodos y a gusto en el sitio. El "camarero" que nos tomo nota, bastante mejorable, aspecto algo sucio a mí forma de ver. Pedimos ensalada Valenciana, arroz del señoret, y un vino blanco Marina Alta, tardaron en servirnos el vino, el "camarero" lo trajo en una cubitera y no era capaz de volver a meterlo dentro de la cubitera así que lo dejo encima de la mesa directamente y sin servirlo. La ensalada buena, grande. El arroz muy rico, algo salado pero muy bueno. En definitiva, la comida bien, el sitio mal, el trato peor, nos fuimos con muy mala sensación, ni el sabor rico de la comida compensó el mal servicio y la mesa horrible que nos asignaron, cuando repito, todas las mesas que les solicitamos estaban vacías y así permanecieron hasta que nos marchamos. No volvería ni loco, para mí la atención es lo primero y ha sido el peor sitio en cuanto a trato en el que he estado...