El Chispial — Restaurant in Vitoria-Gasteiz

Excellent, excellent, excellent - that's all I can say about this place. First, upon entering, it's beautifully decorated. Service was very fast in getting us to our table and serving us overall. The menu was around $25 per person, a bit higher than your usual $16 or so, but the cooking quality is easily worth it. They started us with a light cucumber appetizer on the house - super tasty with some crunched nuts and a light Modena vinegar dressing that was slightly acidic and citric... delightful. We then moved on to our 1st course, for which I ordered pisto. Nicely cooked veggies with a poached egg on top - personally I like my egg a teensy bit more done, but it was perfectly fine for what the dish was. For our 2nd course we had chicken and sardines among the 4 of us - I particularly enjoyed my sardines, really flavorful (just remember that with good kitchens, they won't remove the inner spine, so either you take it our yourself or, if you're like me, you just eat it all - it's calcium, baby!). For dessert my friends got the browny and I got the plum pudding, which was amazing, among the better puddings I've had - really more of a flan than anything. A couple of my friends had water and another friend and I shared a bottle of white wine, nicely paired with the meal and included in the menu. Coffee was also well prepared. Our waiter was great, super nice, informative, and attentive, just the right balance of all three qualities. I left the place very, very satisfied with the place, and on my next visit to the city of Gazteiz I will for sure com back to this restaurant. Absolutely worth your...

Ayer cenamos en este restaurante mi pareja y yo. La atención, tanto de la camarera como del cocinero, fue correcta. Sin embargo, la relación calidad-precio nos dejó completamente decepcionados.

De entrada, empezamos mal con el pan. Solo nos ofrecieron un pan muy tostado sin opción de uno menos duro, así que pasé toda la comida sin pan… y eso para mí ya es un punto que no me gustó.

El primer plato fue salmón con guacamole y mango. Sin embargo eran unos tacos muy gordos en los que ni el guacamole ni el mango se notaban; la sensación era como meterse un taco gordísimo de salmón en la boca. Me resultó tan pesado que no fui capaz de comer más de tres de los cinco tacos que servían.

Después pedimos croquetas, correctas pero sin más, nada destacable.

El plato “estrella” se supone que iba a ser la ventresca. Nos cobraron 42 euros...y estaba rica, pero nada espectacular por ese precio. Además la sorpresa desagradable llegó cuando encontré un trozo de plástico en el plato, aparentemente de un tapón. Lo comunicamos, nos pidieron disculpas, pero poco más; sinceramente, con lo que cuesta ese plato, esperábamos otro tipo de reacción.

Lo ultimo fue el solomillo con foie y salsa de Oporto que ciertamente fue lo único bueno de la noche. Sabroso y con una salsa casera espectacular. Pero con unos champiñones de guarnición que no pegaban en absoluto.

Y para rematar, pedimos solo un postre para repartir: un coulant de chocolate negro con fresa en el que el chocolate no se encontraba en ninguna parte; desde la presentación hasta el sabor decepcionante. Soy apasionada de los postres...y me fui sin comerlo. Se lo comió mi pareja.

En resumen: cené sin una pizca de pan, terminé empachada de salmón, me encontré un trozo de plástico en la ventresca y el postre me decepcionó por completo. Pagamos 129 € en total, lo cual me parece un precio completamente desproporcionado para un menú tan normalito. Creo que sobra decir que ni lo aconsejamos ni...

Reservamos para comer para una celebración de compañeros del trabajo siendo 22 personas en total. Fue muy de agradecer la capacidad de organización que tuvieron, dado que todos los platos salieron en el momento que tenían que salir y ninguno estaba frío. Además, estuvieron pendientes de cualquier necesidad que tuviésemos en todo momento, especialmente en lo relacionado con la bebida o con el pan.

En mi caso particular, dadas mis intolerancias alimentarias (Gluten, Lácteos y Huevo) (de las cuales ya habíamos avisado en el momento de hacer la reserva), adaptaron mi menú degustación de entre semana. Cabe destacar especialmente el que en uno de los platos había un rebozado pero tuvieron la delicadeza de hacerlo sin huevo y sin harina de trigo para evitar todos los alérgenos. Además de esto, mis platos me los daba directamente la jefa de sala en lugar del resto de los camareros para tener un mayor control sobre mis platos.

A todo lo anterior, sumar que el local tiene una decoración muy original y que a mí personalmente me gustó mucho.

En definitiva fue una experiencia muy grata, me sentí muy bien atendido y espero repetir en un...