Sanitas Residencia y Centro de Día La Moraleja — Attraction in Alcobendas

En primer lugar debo decir que nadie es perfecto y como en todo lugar en el que trabajan personas se cometen errores, pero en este caso no por falta de interés o dejadez. Quiero compartir aquí mi experiencia ya que mi madre ha vivido en esta residencia casi 10 años, por lo que sé de lo que hablo cuando afirmo que no es un asilo de ancianos, es un hogar donde mi madre ha sido cuidada y tratada con profesionalidad y sobre todo con cariño y cercanía. Tengo que agradecer el trato personalizado, las atenciones recibidas, porque según nuestra experiencia en esta residencia no tratan números, tratan seres humanos y los cuidan como tal. Les motivan y les tienen entretenidos, reciben atención médica personalizada y un trato humano y cercano por parte de todos y cada uno de los integrantes del equipo, no quiero nombrar a nadie por no dejarme en el tintero a ninguno de ellos porque desde el servicio de lavandería, limpieza, auxiliares, enfermería, doctores, recepción, asistentes sociales, todos y cada uno de los trabajadores de esta residencia son excelentes y quiero aprovechar para agradecer su esfuerzo, porque aunque es cierto que tienen mucho trabajo y hay veces que van deprisa,nunca he visto falta de implicación por su parte, muy al contrario, se dejan la piel para atender tanto a los residentes como a los familiares. Yo he vivido dos direcciones distintas, la anterior dirección hizo que los años que estuvo al frente de la misma, fuese sin duda la mejor residencia que he conocido y conozco varias. Es una pena que desde que tuvo que haber un cambio en la dirección, con la nueva directora se ha notado un empeoramiento drástico de los servicios, del funcionamiento y de todo el engranaje en general. Quiero decir que en esta ocasión no puedo sino sentir enormemente que con los excelentes profesionales que hay trabajando allí, esta mujer haya hecho con su gestión que la calidad decaiga notablemente, sin embargo los trabajadores suplen la mala gestión con ganas y profesionalidad que hace que recomiende esta residencia a todo aquel que esté pensando en un lugar donde cuiden de sus personas queridas como tuve que hacer yo con mi madre, pues no me quedó más remedio y animarles a que confíen en que serán tratados casi como en casa pues todo el cariño que le han dado a mi madre durante tanto tiempo ha hecho que incluso llegase a considerarla su casa. Gracias a todos de parte de mi madre y de mi parte pues siempre estaré en deuda con todos vosotros por cuidar de mi madre hasta el final sin desfallecer, mi aplauso desde el balcón también iba por...

Yo realmente no tengo buena experiencia. Mi padre entró el 1 de enero del 2020 a dicha residencia porque en diciembre se cayó en su casa que vivia con mi madre y se rompió la cadera. Le operaron y todo salió bien lo unico que no empezaba a andar por miedo o por lo que fuese. Decidimos darle clases de fisioterapia individual 17,50 € media hora porque nos dijeron que le vendria muy bien para empezar a andar y marcharnos a casa que era lo que todos queriamos. En el trascurso de tres meses que estuvo en la residencia estuvo ingresado en el hospital 2 semanas en diferentes meses por el tema de infeccion de orina, les comente que esa semana que no habia estado alli me la tendrian que descontar pues no ha comido ni nada alli, me dijeron que ni hablar. Mi padre empezó en la planta 2 y como pasaba algunas malas noches por el dolor , no sé si esq alli todos duermen placidamente ,bueno pues me dijeron que como molestaba a su compañero de habitación le iban a bajar a la planta 1 a otra habitación , por no montar follon y pensando que todo esto iba a ser pasajero accedimos a que lo cambiaran. Siempre se me quejaba del trato de una persona que los cambiaba de noche o de dia por el trato recibido , nunca me quiso decir quien era yo creo que por miedo. Cierran residencia tema covid el 8 de marzo ultimo dia que le veo desde entonces llamar y llamar y recibir ninguna contestación hasta pidiendolo por favor y cuando me llamaban para decirme algo siempre estaba bien tranquilo dormido esque no quiere comer, esas fueron sus contestaciones. El 19 de marzo le aislaron y el dia 31 de marzo me llamó la medica que necesitaba oxigeno el dia 1 de abril me llama la funeraria a las 7.15 de la mañana , q que podian hacer por mi. Me llamó la funeraria antes que la residencia, es alucinante. Muchas personas ingresadas y falta de personal, la misma persona que le estaba dando de comer a alguna persona se levantaba a llevar a otra al baño, eso visto por mi . No han echo nada por ellos , los han dejado morir y eso no es humano. Cuando fui a recojer las cosas de mi padre la asistenta social social mucho jiji mucho jaja me dijo que me llamaria la doctora para informarme de lo sucedido, a fecha de hoy 20/08/20 no me ha llamado nadie. Tendriamos que contactar entre los...

La Residencia está en un lugar privilegiado. Da acceso a un parque y es una zona limpia y silenciosa. La atención es buena. Los trabajadores, son cordiales y atentos con los residentes. Mis padres vivieron allí sus últimos 8 años de vida y mi tía, lleva viviendo 12 años y dice que es la mejor decisión que ha tomado. Buenas habitaciones, comida apropiada, amplios espacios.

Buenas noches. Lo anterior lo escribí hace dos años, pero en este tiempo la Residencia ha sufrido demasiados cambios en la gestión administrativa y las cosas ya no son como eran. El lugar sigue siendo el mismo, pero la atención ha dejado de ser buena, dada la escasez de personas que la atienden y no dan más de si. Enfermeras y auxiliares son amables y diligentes, pero dos personas no pueden encargarse de los residentes de toda una planta. Mi tía que va para 14 años allí residiendo, si pudiese opinar, ya no diría que es la mejor decisión de su vida, pues a su deterioro físico, se une la falta de atención apropiada. Nos contaron que a sus 98 años, se saltaba la barandilla de la cama y se arrastraba por el suelo hasta llegar a un mueble donde agarrarse y levantarse. Consecuencia, le quitaron las patas a la cama y los muebles de la habitación. La ropa como ya no se la puede lavar ella y con la pandemia no pudimos entrar a recogerla nosotros, la lavaron en máquinas a 90 grados; blusas de seda, jeseys de cachemir y faldas y jerseys de lana, que ya no le valen ni a una niña pequeña. Ahora le echan a lavar la ropa que utiliza cada día, en esas máquinas, esté sucia o no, pero usada de un sólo día. Nosotros, cuando podemos, vamos a buscarle ropa, y se la lavamos a mano en casa, pero ese tipo de ropa, y no la ropa interior o medias que nos ponen en la bolsa de traernos a casa. Eso demuestra ir por las habitaciones, que no están lo limpias que estaban antes, muy deprisa porque tienen que atender y limpiar muchas habitaciones, muy pocas personas. En fin, que se ha deteriorado mucho la atención a los mayores. Siento rectificar mi opinión de hace dos años, porque el personal pone todo su esmero en tratar a los mayores, pero la gestión ha caído en...