Biblioteca Regional Joaquín Leguina — Attraction in Madrid

Sera una biblioteca para consultar únicamente pero aun así, me parece una vergüenza de biblioteca. Le pongo una estrella porque no se puede poner menos.

He estado varias veces y lo que ves allí cuando estas en la única sala de consulta que tienen es : gente durmiendo y viendo películas en Internet a todo volumen, gente haciendo fotos a libros cuando te obligan a hacer fotocopias, gente arrancando hojas de los libros y de las revistas que tienen allí y mucha gente leyendo el periódico para echar el rato. Esto lo ve el personal de sala y no dice nada, parece que les da igual o vergüenza hacer su trabajo.

Las medidas Covid son un poco extrañas ya que hay personal de sala que te apunta en una hoja y te obliga a sentarte en un sitio específico y otras veces donde tu quieras. Aun así hay veces que te sientas en los sitios que te dicen y no están limpios ya que te encuentras la goma de borrar ( por ejemplo) de la persona que ha estado anteriormente.

Según las normas que te indican en el tablón que tienes a la entrada. Puedes ir con un pequeño cuaderno o varias hojas. Pues a la hora de la verdad se pasan las normas por el forro y no te dejan subir nada. Entonces que te expliquen como vas a trabajar con lo que consultes allí. O se piensan que somos maquinas y podemos retener todo la información que consultemos.

Y para terminar hablar del personal de sala de por la mañana. Me parece muy bien que tengan que comunicarse por teléfono con otros compañeros pero no hace falta gritar como hacen o que pase el personal de limpieza y se pongan hablar allí como si fuese un patio de colegio. Que si existen las normas para los que están dentro de estar en silencio pues para el resto también. Podemos hablar también de la educación que tienen algunas personas que trabajan allí, porque no es normal que te vayas a sentar en un sitio y te griten con mala educación que ese no es el sitio que te han dicho.

En resumen. Ganaría mas esa biblioteca cambiando de personal y abriéndose alguna sala para estudio. Y claro que se cumpliesen las...

Al igual que una opinión anterior, que no había leído hasta decidir publicar mi decepción con un espacio público que se administre de esta manera, me sorprendió lo expulsivo de la biblioteca. Necesitaba estudiar unas horas en medio de un viaje, la biblioteca vacía en agosto, me dicen que si no consulto materiales no puedo entrar (lo cual es ridículo por lo fácil de saltar la condición), salgo impactada por el absurdo, a buscar un lugar exterior para poder estudiar con mi ordenador, encuentro una galería techada muy amplia y me siento en el suelo con mi mochila y ordenador. No tardan en salir, entiendo que dos funcionarias, a decirme que no podía estar ahí, les pregunto que por qué (entiendo que las bibliotecas son espacios públicos y que respetando reglas de silencio, no había inconveniente (salvo para la refinada vista de las funcionarias, poco acostumbradas evidentemente a que la bilioteca esté abarrotada de estudiantes), les explico que sus propias reglas no me dejan entrar a estudiar a la biblioteca, algo absurdo, me dicen que es un "lugar de paso" (recuerdo contexto: agosto 11hs, 36º, nadie en la biblioteca). les digo que no obstruyo paso a nadie, no solo por lo grande del espacio, sino porque "no pasa nadie", pero en sus canónes debía no tener pinta de escaparate la imagen. Me invitan a sentarme en unos bancos de lata al rayo del sol, mi nivel de respeto por la humanidad impide contestarles probablemente como era procedente, a las autonombradas reinas de la biblioteca. me retiro una plaza a estudiar, no sin antes reflexionar con otro trabajador sobre el absurdo de expulsar a una persona que necesita unas horas un espacio para estudiar, con una biblioteca vacía en pleno agosto. Diría que es un símbolo más de la decadencia de los bienes...

Mala experiencia: Como la Complutense nos ha dejado sin bibliotecas este agosto (deben de estar muy cansados, los pobres, desde marzo sin dar palo al agua), pues hay que buscarse la vida. En mi caso, avanzar en mi tesis doctoral, así que allá que voy a la Joaquín Leguina:

-Llego y me advierten de que no es una biblioteca pública (la pagarán ellos solos, no sé, o Repsol que está al lado). -Necesito, dicen, el carnet de las bibliotecas públicas de Madrid (vale, contradictorio, pero me lo pueden hacer allí mismo). -Subo a la primera planta, la única que se puede usar (el edificio es enorme), hay dos bibliotecarias allí guardando el castillo y nadie más (un lugar totalmente desaprovechado, habrán salido todos escaldaos como yo). -Toda la obsesión de la bibliotecaria de la primera planta es si vengo o no a consultar sus fondos porque es una biblioteca "de consulta" y no "de estudio" (se creerá que está en la biblioteca del Palacio de Liria o algo así). -Le digo que vengo a hacer mi tesis y que consultaré algo si lo necesito. Pero ella insiste en los fondos, que si vengo a ver internet no, que si vengo a ver internet no... fondos, tarjetita, fondos. -Supongo que la única manera de quedarse allí será haciendo el paripé (llevaos ya de casa una referencia de un libro de sus fondos para poder estar allí) o discutir con la bibliotecaria.

En fin, no me han tratado tan mal ni en los tiempos en que la Biblioteca Nacional te exigía una carta de un catedrático con sello del departamento para poder entrar.

A favor: -Edificio espectacular y bien comunicado, con cafetería y todo, no han reparado en gastos -La recepcionista de la...