Esta valoración es de la casa no del hotel.
Todo en buen estado de mantenimiento general, muy limpio y ordenado. La distribución de la casa, debido a la configuración del terreno y su antigüedad, resulta un poco incómoda con escaleras / escalones (no aptas para niños) y alturas de techo / puertas que juegan malas pasadas si mides más de 170 cms. Las puertas son de madera y suenan mucho al abrir y cerrar (con un poco de aceite quizá mejoren). El wifi que supongo estará en el hotel (en la casa no ví ningún equipo), llegaba muy débil y fue imposible conectar desde cualquier parte de la casa.
Las habitaciones no son muy grandes pero confortables (revisar tamaño almohadas). Los aseos nuevos (arreglar manguera ducha aseo inferior) y completos. La cocina pequeña pero muy equipada tanto de electrodomésticos como de menaje (faltan unas tijeras). La barbacoa grande, con utensilios y mucha leña la salida de humo no tira bien). Los sillones y sofá del salón incómodos. El salón cueva, lo mejor de la casa, pero cuidado con la cabeza en la parte baja. Y la terraza da mucha vida pero ese muro ciego que tapa todas las vistas, es una pena.
Con lo que cuesta subir y sin acceso en vehículo, merece más la pena quedarse en el río donde tienes los aparcamientos, los restaurantes, la alameda y las vistas del pueblo. Arriba sólo subirás a ver la iglesia y el castillo. La ubicación sería ideal si tuvieras unas vistas completas desde cualquier parte de la casa pero sólo las tienes si te asomas a los balcones de la planta superior o parcialmente, desde el contiguo a la terraza.
Las anfitrionas muy amables pero nos costó contactar con ellas los días previos a la llegada, según nos dijeron, por descanso.
Estuvimos cinco personas y las opininiones son...
Read moreBuenas tardes. Estuvimos con un grupo de amigos durante el pasado fin de semana. Habitaciones sencillas, a pesar de que nuestro baño del la suite superior era obsoleto y el inodoro muy desgastado. Ahora bien, nos ha llamado la atención de que no nos recibieran los dueños, sino una sola persona que debía atender la Recepción, unos 13 desayunos, y probablemente el servicio de habitaciones. Le pedimos a Axel si podía adelantar el desayuno a las 9:00 y sin problema, pero cuando nos presentamos todos puntualmente a esa hora, ninguna mesa montada, y tuvimos que esperar casi 40 mn para que empezara a sacar alguna bandeja. Así que decidimos ayudarla entre todos a llevar los desayunos. Todo ello servido sin platito (se lo pedimos el 2º día), untando la tostada encima de una papel de rollo de cocina (se había quedado sin servilleta al parecer), encima de la mesa al que no nos habían puesto ni siguiera un pequeño mantel individual. Luego se olvidaba de lo que le habíamos pedido, los cafés, los segundos cafés, la fruta (que de hecho solo nos ofreció el primer día). Una chica inexperta, desorganizada y despistada, a la que los propietarios habían dejado sola al frente del negocio durante un fin de semana de alta ocupación. Como colofón, tampoco se le ocurrió -cuando nos acompañó a la habitación- comentarnos que había que dejar el cartelito en la puerta para que nos hiciera la habitación (bastante inusual de hecho). Así que algunos de nosotros nos volvimos a encontrar la habitación tal como lo dejamos por la mañana. En fin, un alojamiento que pretende ir de exquisito por ser solariego, regentado por unos propietarios que carecen de profesionalidad que no supieron estar a la altura durante...
Read moreEnglish below. Este rincón de Alcalá del Júcar ha arrancado con mucha fuerza a pesar de haberlo hecho en tiempos complejos e inciertos (abrieron tras el confinamiento). Cada espacio de la Casa del juez está lleno de encanto, especialmente su terraza desde donde se puede desayunar o tomar al atardecer un vino de la Mancha con unas vistas preciosas. Si he de decir algo negativo es que la habitación cueva está muy cerca de la zona de desayuno y se oye a los madrugadores. Cosas positivas: todo lo demás, sobre todo la atención de los dueños y el recepcionista, Lucas, que ha sido excepcionalmente atento y amable. - This little spot in Alcala del Jucar has started with strength despite of having opened right after the ending of the locking down (Covid-19). Every corner in the house has its charm, especially the terrace with amazing views to enjoy breakfast or a local wine while seeing sunset. The only negative point I found was that the cave room is too close to the breakfast rooms so you can hear any noise from the early birds. Other than that, everything else was perfect. I want to remark Lucas, the receptionist. Charming, very nice and taking care of the guests...
Read more