Baviera — Restaurant in Autonomous City of Buenos Aires

The food (carne de cerveza negra) was excellent, if not a little sweet for my taste. The service was attentive and courteous. The atmosphere was a respite from the local, and the beer was good. What stands out, however, is the management and wait staffs ability to be pragmatic in the circumstances. Let it serve as warning to foreigners that though the sign says they accept debit or cash only, they must charge extra if you aren’t local- even if a Visa card. It’s not their fault, just be aware. My thanks to the management’s understanding, and respect to the wait staff because I usually tip the extra 10% when I’m not...

As a guest at Baviera, I had the pleasure of trying the salchichas with chukrut and kartofelnsalat, and overall I must say that it was a delightful dish. The chukrut was perfectly tangy and provided a nice contrast to the warm and savory sausages. The kartofelnsalat was also a nice addition, with the potatoes providing a subtle sweetness that complemented the other flavors nicely. While the sausages weren't 100 per cent to my personal taste, I could still appreciate the quality of the ingredients and the care that went into...

Si no tenés muchas ganas de leerme, te lo resumo: lindo lugar al que volvería ir, con un menú acotado y algunas cositas a mejorar.

Ahora sí, la versión extendida:

Invité a mi novia a cenar dado que ella ya conocía el lugar y, dentro de la zona, es lo que más se parece a un bar alemán. La oferta de gastronomía alemana es basta y suficiente como para que no tengas que moverte mucho (si sos del barrio) a buscar otras opciones como tal.

En particular, pedimos aros de cebolla y papas fritas de entrada con una jarra de cerveza (Warsteiner) por $13.000.- (U$D 11,30) y un plato de Goulash con Spätzle para cada uno por el total de $21.000.- (U$D 18,30) con un par de cervezas más ($4.200 o U$D 3,65 cada una), acumulando un total de $42.400 (U$D 36,87) para dos personas, lo cual nos pareció un precio más que razonable.

No pedimos postre, pero seguro deberían estar buenísimos porque así lo estuvo nuestro plato principal. El goulash era una cosa increíble y en combinación con el Spätzle, el cual era una nube, fue uno de los platos más rico que comí de gastronomía alemana por ese precio.

El lugar nos pareció barato y más allá de tener una atención lenta, los platos llegaban rápidos y súper caliente, por lo que le damos una mejor calificación por eso.

El chasco de la noche: sobrecitos de algo parecido a queso rallado para ponerle al plato, lo cual nos pareció un poco un punto a mejorar.

Por todo lo demás, Baviera volverá a vernos las caras. Uso...