Joseba Añorga Taberna — Restaurant in Almeria

Stunning lunch! Managed to get an early table here today despite them being fully booked (must reserve a table next time). We went to their old restaurant 10 years ago and the food remains as good as we remember it. We ate from their classic pintxos menu: steak tartare, sea bass sashimi, foie, mak foie and red mullet in tempura all highly recommended and Michelin star worthy. We finished off with a basque style cheesecake. Food is on a par with pintxos bars in San Sebastian. Yes it's that good! Service was efficient but not super friendly. 9/10 a must visit in Almería if you love great...

La primera vez que fui me pareció flojo, la segunda me lo ha confirmado.

La comida no está mal, sin ser memorable, el servicio bastante deficiente para pretender ser un sitio premium, el local no tiene una distribución cómoda, en la entrada hace frío en invierno, en el fondo parece que estás encerrado en un sótano.

Al menos el vino tiene un precio razonable. Aunque si pides copas son bastante rácanos llenando por botellas si buscas bien tienen precios correctos.

Hicimos una reserva y la perdieron, tuve que enseñar varias veces el correo de confirmación que ellos habían enviado y me seguían negando tener reserva. Al final después de mucho discutir nos encontró, pero no esperes que se disculpen que la culpa según ellos fue mía, lo más imperdonable era que no tenían ni interés en buscar mi reserva.

Nos puso en la peor mesa teniendo más sitio libre, supongo que por fastidiar un poco más, peor aún la mesa de seis personas al lado, que les pusieron unas mesas y sillas de camping porque querían aprovechar el día metiendo más comidas. No solo estaban incomodos y es un desprecio tener una mesa peor, es que afeaban todo el local.

Los pinchos no están mal, pero son un truco para cobrar caro por poca comida, puedes pedir tres y no llegas a 20€, te vas comiendo escaso pero pasas un rato. Son caros para un pincho y escasos para un primero, pero ayudan a que la cuenta no se dispare.

Pedimos una chuleta de cerdo que se podía comer pero no es un plato top ni mucho menos, la carta intenta ser original (o te lo parece si no has ido nunca a Euskadi, porque esto allí es un local común y corriente) pero eso por si solo no me...

Vamos a ver: valoro a este restaurante en la medida en que quiere ser de alta gama. Me gusta esa ambición. Para serlo, en la carta ofrecen lo típico de un restaurante que no quiere ser una casa de comidas. El dueño es vasco y la tendencia es vasca. Peeeero: Lo malo: creo que el dueño no cocina. Lo vimos irse. El resultado es que, por segunda vez, nos han llegado cosas si bien no frías, tampoco calientes. La vez anterior fue bacalao (o cocochas) al pil pil. No se puede servir pil pil medio frío. Lo siento. En una tasca, puede. Pero en un sitio con ínfulas no. Hoy ha sido papada de cerdo. Templada. No. No puede ser. Mi carne (un supuesto angus)…. Nada de especial. Ningún sabor especial. Un tanto duro y lo que me pareció un mal corte: las fibras no iban perpendiculares al corte, sino en un ángulo de 45 grados. Como consecuencia de ello: a mascar. 28€ y era una carne ni fú ni fá. Cosas buenas: su idea de comer por tapas es buena. De hecho, hemos comido dos personas por 50€, que es muy poco para lo que hay hoy en día. Cosa a mejorar: los platos más apetecibles: judías de Tolosa o guisos vascos… son por encargo. Una pena: debería apostar por esa cocina y tenerla disponible. Le pongo sólo tres estrellas como restaurante fino. Pero en su liga, merece sólo una o dos. Hay que trabajar más esa cocina. Ojalá lo haga. En realidad le falta poco para ser...