Los camareros muy atentos, amables y rápidos en servir, pero si te va atender el encargado de ponerte en mesa y no te conoce, cuidado! Estuve esperando una mesa baja, solo había mesas altas o barriles, no había personal esperando y me ofrecieron sentarme en barril hasta que hubiese mesa baja disponible. Le fue comunicado al encargado de quien coloca las mesas, pero como no era un comensal conocido y ya estaba en barril sentado, ignoro mi petición inicial. Al serle reiterado por 3 veces que había solicitado que tipo de mesa y ya dirigirme directamente al encargado, me vino con aires de grandeza de si quería realmente una mesa. Es cuando me sentí que me estaba tomando el pelo, porque no frecuento su restaurante. Todo se hubiese solucionado que no me hubiese tomado el pelo, ofreciéndome el barril para ocupar los espacios que tenía vacíos y que creyese que me iba a conformar con estar sentado en barril. Como comensal, tengo las cosas claras donde me quiero sentar y ser tratado como yo trato a las personas. Después de ello, solicite hoja de reclamaciones y quejas, me hacen entrega de un libro de visitas de inspectores, abierto por la hoja que debía de escribir y negándome que no podía ver el libro para comprobar que tipo de libro me ofrecían. No deben de intentar engañar al cliente, en los libros lo pone en la portada que tipo de libro es. Cuando les explique que tipo de libros eran, expresaron ignorancia y haberse confundido. Falta de profesionalidad, por parte de los dueños o encargados.