Maya Benicàssim — Restaurant in Benicàssim / Benicasim

50€ x comensal, por un un buffett de comida del que apenas hemos podido probar nada mi mujer yo , incluido el jamón de 5 jotas que se podría haber hecho un consomé y fideos con los huesos sobrantes, así habriamos comido algo caliente los famelicos participantes. Las parrillas echaban mucho fuego en plan Masterchef televisivo , pero la carne salía más cruda que la integridad de la organizacion del evento. Carmen Lomana :la invitada superstar , que ademas nos espetó en nuestra cara a los comensales , que íbamos muy casual, traducido del lenguaje pijo del Barrio de Salamanca: paletos con ropa de mercadillo. El sushi lo habrían traído de Islandia en trineos, porque brillaba por su ausencia. Porque si los emolumentos de la insigne invitada a pagar por la organización y los del imitador de Julio Iglesias casposo y con gafas de aviador además con traje de panadero panameño con 5 canciones escasas , hacen que los demás mortales pasemos más hambre que el perro de un lazarillo de la ONCE, no es de recibo, y se os podría condenar por el Tribunal Europeo de Derechos del Hombre. Por último, los precios abusivos de los cubalibres y bebidas espirituosas y la actitud desafiante de los barman por requerirle mi persona una dosis extra de alcohol ( en especial el de la barra de en medio al lado del puesto de brasas, un Tom Cruise moreno coctelero con falta de educacion con los clentes, sin identificar ya que se negó a darme su nombre para interpelarle directamente en estas letras) por lo que en cualquier otra sala de fiesta sería. un cubata corriente y moliente, 10 € se suma al sobre coste a la entrada y dieta menguante del Castillo. No seáis locos , no vayáis es un atraco a mano armada, no se si por hermanos Dalton pero si a los derechos de los consumidores. Con lo que os cobran, deberías tener acciones o criptomonedas en la empresa. Juro y prjuro que no volveré a pisar ese local de...

El restaurante está muy bien. Al llegar te atiende una chica muy amable y te guían hasta tu mesa. Como llegamos pronto nos tomamos una copa en una zona con sofás. La carta no es muy extensa pero lo suficiente como para que haya de todo. La calidad de los ingredientes en general es buena y las cantidades correctas. A destacar la salsa que nos pusieron con los calamares, estaba deliciosa. El local está muy bien decorado, tuvimos música en directo de 10 y una temperatura agradable. Habría que mejorar un par de cosillas según mi experiencia, pero puede que hayan sido errores puntuales, no puedo generalizar. Se olvidaron de nuestro segundo entrante y estuvimos esperándolo más de media hora. Cuando sacaron los principales lo reclamamos y nos lo trajeron frío, se les había olvidado servirlo. La ternera de los tacos ha sido, con diferencia, lo peor de la cena (esto fue lo que se quedó tanto tiempo sin sacar). No la recomiendo para nada. Otro detalle fue que pedimos una botella de vino blanco y nos la trajeron correctamente con su cubitera pero no nos sirvieron ni la primera copa. Lo entendería si el local estuviera lleno de gente o hubiera poco personal para atender las mesas, pero no fue así. Había como 6 camareros para más o menos mitad del local y estaban casi todos el rato de pie con los brazos cruzados esperando. Eso sí, cuando los llamabas te atendían perfectamente, amables y profesionales. Por eso me extraña esos dos fallitos que tuvieron con nosotros. Por lo demás pasamos una noche estupenda. Ah! Los cócteles también buenísimos, pedí un margarita y estaba muy bien. No sé si volveremos pero si lo hacemos tenemos claro que nos echaremos espray anti mosquitos en las...

Fuimos a cenar reservando el mismo día. Compramos los tickets de 45€ que incluyen cena, espectáculo (en este caso concierto de Jarana y después DJ) y una copa. La decoración es muy bonita, y el ambiente también. Llegamos sobre las 21h, y el concierto empezaba a las 23h (que luego fueron 23:30h), pero la mayoría de mesas seguían cenando. Para empezar, tomamos chupitos de tequila (detalle de la casa). El menú consistía en: Guacamole tradicional en molcajete con totopos de maíz (14,50€): simple pero bueno. Ceviche tropical de ají amarillo sobre chips de plátano (17,50€): me pareció brutal la combinación de sabores. Gambas cristal del sur (16€): muy sabrosas aunque un poco saladas. Pulpo a la brasa (24€): buena ración y bastante picante. Costillas a la brasa (no consta en carta): demasiado pasadas de fuego. Postre: brownie con helado, barquillo y mucho chocolate (no consta en carta). Cuando nos sacaron el pulpo, teníamos los dos platos anteriores en mesa. Pedimos que esperaran un poco para el siguiente y fueron muy atentos, sirviendo cuando terminamos.

Nos hubiera gustado saber a qué hora era la cena y cuál era el menú. Para la primera, llamamos y para la segunda, preguntamos allí. La bebida va a parte. Creemos que con la consumición, se debería poder pedir dos aguas, no solo una.

Disfrutamos mucho de la experiencia, y nos lo pasamos genial tanto en el concierto como en la fiesta de después. Fue un bonito final de las vacaciones....