Complices gastrobar — Restaurant in Gandia

Food was terrible. I have visited a lot of places, but this is the far worst I have ever been. I don't usually write reviews, but it was so terrible that you need to do yourself a favor and never go there.

Most of the food is very raw and it is not made well. I had stomachache and almost throw up an hour after.

In the place is hot, the air conditioning is bad and the waiter was so sweaty that when he comes by your table you wouldn't want to eat.

To go...

Comenzamos hablando del menú, nosotros fuimos domingo, con un menú de 13 euros aproximadamente, la verdad que un precio muy competidor en el sector. Para el precio del menú, tienen un menú muy variado con carne, pescado, vegetales, para todos los gustos, y la comida muy bien elaborada con unos postres caseros muy buenos, por esa parte todo perfecto. Todo está envuelto en un ambiente aunque un poco sobrio muy elegante. Ahora bien el servicio aunque estaba muy educado, correcto y atento (este ultimo factor es muy importante a la hora de ir a un restaurante, dado a que aunque la comida estuviese muy bien si tiene un servicio malo, lo tira todo por los suelo). Por suerte no es el caso de este restaurante, como bien he dicho antes. La única pega que a lo mejor le pongo es que, el camarero es un poco apresurado y cuando ya estas a punto de acabar el plato, es decir te quedan como dos cucharadas, ya está en la mesa para retirarte los platos no dejándote poder disfrutar del ultimo bocado del plato. Pero este punto es lo de menos. Si estas buscando un restaurante elegante y de un precio muy razonable esté es tu restaurante. Yo la verdad que volveré en algún momento. Yo me hago cómplice del...

Una experiencia gastronómica redonda en New Còmplices Gastrobar

Desde el primer bocado, supimos que estábamos ante algo especial. Los entrantes nos conquistaron: brocheta de botifarra a la brasa jugosa y sabrosa, y un puerro a la brasa con chimichurri que, simple en apariencia, resultó un festival de sabor.

En los principales, el solomillo de cerdo a la brasa con salsa de pimienta fue el protagonista indiscutible. No exagero al decir que es la mejor salsa de pimienta que he probado en mi vida: cremosa, equilibrada y con un toque que la hacía irresistible.

Los postres no se quedaron atrás: tarta de queso casera y torrija con helado (también casero), ambos de esos que hacen que no quieras que se acabe la comida.

Un detalle que nos ganó por completo: nos prepararon un menú especial para una niña de 2 años, muy cuidado y casero, con patatas paja, croquetas de jamón y helado de limón. Todo un gesto que demuestra la atención y cariño con que trabajan.

En definitiva, quedamos más que satisfechos. Trato cercano y familiar, calidad excepcional y, sobre todo, el mejor menú en relación calidad-precio que he disfrutado en muchísimos años: solo 13,50 € más la bebida. Sin...