Restaurante que desvirtúa totalmente lo que siempre ha sido una sidrería Asturiana (salvo por el bullicio). Es caro para lo que ofrece y la atención de los camareros deja mucho que desear. Se ha convertido en el típico sitio “de turisteo” que sobrevive por el lugar en que está ubicado y por foráneos despistados…, de no ser por eso estaría abocado inexorablemente al cierre.
Además, los precios de la carta no incluyen el IVA, lo que hace al importe que figura en la misma (al igual que a los que figuran en el mural de la pared) haya que incluir el IVA, para llegar a costar 4,18€ una botella de agua, o 4,62€ una botella de sidra, vamos, prohibitivo y totalmente alejado de lo es habitual este tipo de lugares.
En nuestro caso, pedimos una ración de pastel de cabracho (16,00€ + IVA), chipirones a la plancha (18,00€ + IVA) y mejillones. Aunque la camarera no nos informó de que no les quedaban los mejillones, a la hora de sevirnos, sin previo aviso y sin posibilidad de cambio, nos trajeron almejas a la marinera, y ante la queja de que no las habíamos pedido (indicando a un camarero de gafas que su compañera no nos había informado de que no había mejillones y que no habíamos pedido almejas) nos las dejó en la mesa, sin hacer caso a nuestra reivindicación y sin capacidad alguna hacer que las retirase, ni mucho menos ofrecemos otro plato en sustitución, lo que hizo que “por no montar el pollo” aceptásemos quedarnos con las almejas, que resultaban ser 10€ + IVA más caras los mejillones. Es decir, que en ausencia de mejillones, el camarero nos “metió” lo que le apeteció en sustitución de los mejillones presuntamente inexistentes, que “casualmente” eran más caras que los mejillones que habíamos pedido.
En definitiva, todo eso hizo que la cena fuese mas cara de lo previsto y que saliésemos del local de mala leche, ya que incluso a la hora de pagar nos dejaron el datáfono sobre la mesa y tras pasar la tarjeta no se dignaron ni en recogerlo, darnos copia del abono, etc…, para eso si, una vez nos disponíamos a salir por la puerta exclamar una de las camareras al citado camerero que nos había servido (bueno, la sidra escanciada cuando se le interpelaba): “¿ oye, esos pagaron?”. Lo cual hizo que saliésemos con peor sabor de boca aún de lo que ya teníamos y que hará que no volvamos nunca más a esa sidrería (y no somos turistas), ni por supuesto recomendemos a nadie más que lo haga, ya que lugares así no son dignos de formar parte de la oferta gastronómica de Gijón, ni de representar la gastronomía de la región ante miles de turistas que visitan la...
Read moreI would highly recommend this restaurant to anyone who wants to experience an authentic Asturian meal. With lots of locals and very loud! We came for lunch. The scallops were the largest and best we have ever eaten. To die for! Then we had the local Asturian dish fabada asturiana, delicious. The Albarino wine was good, but on reflection it would have been much more fun to have the local sidra poured into our glasses from an incredible height. The cheesecake was, to be honest, mediocre, but the service was excellent and the...
Read moreThe staff were very rude to us We asked for a table for two, we were pointed to a table on the terrace and asked for a menu, which the waiter brought. He took a drinks order and on returning we told him what item we wanted and asked if it came with potatoes or did we need to order these separately, he just said 'wait' and walked over to his colleague before proceeding to serve other customers, no one returned. Ten minutes after this we had to ask for the bill for the drinks and leave. I wouldn't recommend this...
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