Jaizkibel - Restaurante en Jaca 🍽️ — Restaurant in Jaca

No nos han podido tratar peor. Una lástima , siendo de Jaca como soy que te traten así en un bar de toda la vida. Sirven en terraza a todo el mundo excepto a nosotros. Limpian la mesa porque se lo pedimos. Pregunto qué raciones buenas hay y el camarero me manda a visitar la carta por QR. La pagina no carga (culpa de mi móvil dicen). Pregunto pues qué raciones hay interesantes y tal. Callada por respuesta. Acabo cogiendo tapas de barra por coger algo. Hago CINCO viajes barra-terraza porque literalmente me dicen “esto tienes que sacártelo tú eh!”, pero al resto de clientes de terraza sí les sirven. Croquetas frías, sin preguntar si se calientan. Salmuera sin pan, se le pide. Me cobran mal, y de primeras no me dan el ticket, al pedirlo veo que solo es un euro de más. El camarero se disculpa pero sigue en sus trece y encima quedamos de raritos nosotros. Mientras a us compañeras camareras siguen sacando raciones a la terraza, sin parar. Yo quería unas raciones en condiciones y al final, nada. Quizá no les gusten los niños (que no han...

Ojo celiacos! Soy celiaca y hace unos días cené en este restaurante. Entre las opciones de la carta había huevos estrellados con jamón, chistorra o boletus. Cual fue mi sorpresa al comprobar que entre la lista de alergenos de este plato aparecía el gluten (ni el huevo, ni los embutidos ni las setas llevan gluten). Pensé que era un error y pregunté al camarero. Me dijo que están fritos en el aceite en el que fríen “todo”. Le pregunté si podían freírmelos con un poquito de aceite limpio y me contestó que era IMPOSIBLE. Cuando les trajeron sus platos a mis acompañantes ya me di cuenta que el aceite que emplean lo reutilizan muchas veces al comprobar que las patatas fritas estaban llenas de porquería negra de la...

Hacia algún tiempo que no iba y tenia muy buenos recuerdos, sobre todo por su cocina, pero no creo que vuelva. 12€ por una hamburguesa con patatas fritas, congeladas, de guarnición y 3€ por una caña me parece excesivo. Una hamburguesa, una caña y un postre, servidos con mantel y servilletas de papel, te cuestan lo mismo que un menú con entrante, dos platos, postre, vino de calidad muy aceptable y un detalle final, servidos con mantel y servilletas de algodón y con cambio de cubiertos entre platos en un buen restaurante cercano. Le pongo tres estrellas porque la comida sigue siendo aceptable, aunque con raciones algo escasas por el precio. Lo dicho...