Fue mi primera vez en ir a este lugar, al verlo prácticamente vacío a comparación del local de al lado pensé que las cosas ibas a hacer diferentes! Me acerqué a la barra y le dije al camarero que nos íbamos a sentar en una mesa dentro del local, cómo lo vi un poco liado y pensé que seguramente no me escucho bien por tener la mascarilla puesta no le di mucha importancia. Nos sentamos y luego paso por el frente y nos dijo: “ Un momentin” y así fueron como un par de veces más hasta que siguió pasando por el frente de mi mesa varías veces sin preguntar que nos apetecía. Hasta que entraron otros clientes y le atendieron antes de que a nosotros y ya esto sumando más de 15 minutos esperando para que por lo menos nos preguntara que nos apetecía. Me levante y fui a la barra a preguntar a otra camarera (que por cierto muy educada y amable) si atendían en la mesa, ya que, había visto que atendieron a otros clientes antes de que a mí y ella me dijo que si, yo para facilitarle el trabajo le pedí 2 cafés con leche. La camarera se acerca a nuestra mesa e intenta llevarnos unos cafés con leche y aparece el camarero y le dice que esos cafés no son para nosotros que son de otra mesa por tener otro tipo de leche, a la final nos trajeron los cafés y para completar experiencia nos llegan un par de tazas con los bordes rotos... He analizado mucho antes de escribir esta reseña pero mi consejo es que deben organizar el trabajo y si le dices a un cliente que le atiendes en un momento y luego le pasas por el frente varías veces más, dejas mucho de que pensar, ya que en una de esas veces que paso por el frente de mi mesa pudo el camarero habernos preguntado que nos apetecía tomar!!! Local agradable y tranquilo! Tortilla y bizcocho muy buenos!