Arpillera — Restaurant in Madrid

Ayer celebré mi cumpleaños en Arpillera y fue muy decepcionante. Éramos 8 y consumimos mucha comida y bebida por lo que nuestra cuenta fue bastante alta. Parece que a nuestro camarero le molestó que pidiésemos tanto y tuviéra que hacer muchos viajes porque nos echó la bronca por pedir bebidas, diciendo que nos organizaremos para pedir las rondas todas a la vez por qué no iba a estar viniendo todo el rato a tomar nota. Flipamos. Obviamente no lo hicimos, cada uno tiene su ritmo de beber.

Cada vez que le llamábamos o nos ignoraba o mostraba su fastidio. Después de gastarnos casi 200€ en comida y bebida les pedimos unos platos y cucharas para tomarnos una tarta que llevé y no nos quisieron hacer el favor, al final nos dan cucharillas y tenemos que fabricamos platos con el cartón de la caja de la tarta.

Para rematar llega la hora de pagar, dividimos la cuenta entre 8 y pagamos cada uno nuestra parte. El camarero esta vez no pone pegas. Cuando ya nos estábamos yendo viene corriendo gritando que le falta dinero, toda la terraza mirando. Nosotros diciendo que revise que hemos pagado todos y el sigue insistiendo. Se va a comprobarlo en la.caja y nosotros esperando y no vuelve. Todo el mundo mirándonos. Al final mi chico fue para allá cabreado a ver qué pasaba y el camarero le empezó a decir que no podíamos estar pagando cada uno la cuenta por separado que eso son ganas de enredar... Se pusieron a discutir y el camarero terminó gritando a mi chico "ya está, hemos revisado la cuenta ok??? Esta todo bien okk??? Ya se pueden marchar". Ninguna disculpa. Gritando para que todo el mundo le oiga intentando dejar en evidencia a mi chico. Nos vamos y cuando nos estamos marchando le oigo que le dice a una mesa "estos clientes que les encanta enredar". Sólo lo oí yo por suerte y no dije nada porque íbamos calentitos y no quería más lío.

Esta vez fue un camarero con el pelo teñido de rubio/ blanco con partes moradas.

Fuimos porque la zona está muy guay y la comida no está mal pero ya no volveremos porque es la segunda vez que nos la lian.

La anterior vez estuvimos comiendo, uno de mis amigos se tenía que marchar y fue y pagó unos 50€ (que era la mitad de lo que habíamos consumido). No nos dijo nada porque quería que fuese sorpresa. La sorpresa nos.la.llevamos cuando nosotros pagamos la cuenta completa y al irnos nos dice este amigo que había puesto ese dinero... Asiq nos estafaron por la cara 50€.

La comida está, buena, el sitio es genial pero el personal es nefasto, lento...

Cuando a la propiedad le importa poco el cliente y descuida los detalles, las reseñas bajan de 4, van ya por 3,7 y seguirán en picado. Reservamos en Bomarea. Nos cambian la reserva, sin contactar, al otro chiringo, Arpillera (hay que aparcar a 5 min andando). Chiringo VACÍO con 3 camareros y un cocinero. Pedimos brunch.

1. NO TIENEN BEBIDAS CALIENTES. Como es para copas, no dan café por política, pero el hecho es que en la carta aparece café e infusiones incluidas. A cambio, nos traen un zumo de naranja natural, de unos 10cl, y con un hielo para ocupar. Microscópico.
2. Los huevos benedict, descritos como pochados, los traen a la plancha. Los huevos revueltos, son una cutretortilla francesa de brick a la plancha.aunque en la carta aparece ensalada, no aparece por el plato. Las patatas, abundantes y malas.
3. El combo de fruta, yogur y fruta, semiindustrial, no como la bollería, industrial del todo y barata. Para compensar, nos ofrecieron “cócteles” (tb microscópicos) u otra bebida, pero a 12 grados apetecía algo caliente.
4. Los pancakes tardaron sólo una hora

Todo esto, UNA HORA Y MEDIA. Velocidad de la luz en el Halcón milenario. Eso sí, todos los camareros (y seguramente el cocinero) dejaron contestados sus whatsapp puntualmente. He decidido poner dos estrellas, no una, porque el plato no estaba incomible; sino, al menos,...

Posiblemente una de las mejores terrazas de Madrid. Disfrutar del parque, de un paseo y de un atardecer es un fórmula que pocos lugares pueden ofrecer. UN espacio abierto, amplio, junto a un pequeño lago artificial en medios de una zona verde. UN sitio donde estar con los amigos y tomar una buena copa, caña o refresco. La comida no la probé, pero volveré. UN espacio que veo muy para familias. La hora mágica es la de las 20H, si este verano no acudes a esta terraza de Vicálvaro es que no has aprovechado la época estival en Madrid. SI tengo que apuntar algún problema es el aparcamiento, pero esto tiene su magia también porque así es una zona fuera de humos. Sin duda es un lugar estupendo para disfrutar de las noches frescas de verano. Lo que invito a todos a acudir allí a tomar algo. Por desgracia no me dio tiempo a pedir nada de la carta, no pude echar un vistazo, pero me da la impresión que es más comida de tapas y comida rápida que va mu8y acorde con una zona más de familias. De todas maneras lo que llama la atención de este sitio no muy conocido, es poder disfrutar de esos atardeceres…una de las mejores terrazas de Madrid, no te la pierdas! Le pongo la 4 estrella por el sitio, me faltaría evaluar la comida, pero hasta donde he disfrutado...