Nuestra experiencia en Casa Limón fue lamentable y bochornosa ante todos nuestros invitados, además de sentirnos engañados en todos los sentidos, tanto en la organización previamente acordada, respecto al menú, cantidades… Destacando que todo ello quedó por escrito, lo cual no sirvió para nada. Tomamos la equivocada decisión de celebrar el bautizo en este lugar y los motivos fueron los siguientes: 1-Contratamos el cocktail de bienvenida con jamón, queso y bebidas para 55 invitados, habiéndose fijado las cantidades vía email. Pues bien, puedo asegurar que salieron TRES platos ridículos de jamón y de queso de escasa calidad para un total de 55 invitados. No servían bebidas, eran los propios invitados quienes tenían que ir a buscar a los camareros y encima recordar la petición porque no atendían. Cuando educadamente mi marido y yo preguntamos el por qué no salían el resto de platos acordados, nos dijeron que el tiempo del aperitivo ya había terminado. Lamentable respuesta, para no dar explicación alguna. 2- Al pasar al salón para continuar con el almuerzo, no tenían preparado el listado de los invitados que iban en cada mesa, el cual yo había dejado preparado semanas previas, tanto vía email como impreso entregándolo en persona dos días antes del evento. De modo que mis invitados no sabían dónde tenían que sentarse. Hablé con Manuela, “encargada” de la organización de eventos de Casa Limón y otros restaurantes de la cadena, pidiéndole que por favor pusiera en la entrada el seating plan y su respuesta fue que tenía mucho trabajo que atender. Una respuesta de lo menos profesional. Así que tuve que coger mi móvil, ver el listado que tenía guardado en el email que les hice llegar y entre mi marido y yo empezar a sentar a nuestros invitados. 3- Ya en el salón, los entrantes empezaron a servirse cuando los invitados llevaban 45 minutos sentados, y destacar que no se sirvió el menú de los NIÑOS hasta casi una hora y media después de entrar en el salón. Pregunté a una de las camareras de la barra y con muy mal genio me respondió que ya lo servirían cuando pudieran. 4- Los camareros no sabían dónde ubicar los platos aptos para embrazadas e intolerantes, lo cual también dejé indicado en el listado de mesas entregado a Manuela tanto vía email como en persona. Así que tuve que levantarme para controlar que a los intolerantes y embarazadas les sirvieran su correspondiente plato. Todo un desastre y un auténtico estrés en un día especial para nosotros. Hubo una demora tremenda entre los entrantes y los platos. La organización era tan pésima que a una de las mesas no le sirvieron uno de los entrantes y le empezaron a servir el primer plato, por ello hablé con la camarera de la barra para decirle que a una mesa le faltaba un entrante y su respuesta fue que al invitado le daba igual tomar el primer plato o el entrante. Una respuesta de lo menos profesional, por no hablar del poco respeto y empatía a quienes habíamos depositado confianza. Sentí mucha vergüenza ante mis invitados. Se remató con el postre con una presentación desastrosa, un helado derretido cual sopa. Nos recomendaron ese por aguantar mejor la consistencia, pero volvimos a comprobar que todo lo que nos habían dicho, prometido y acordado presencialmente y vía mail, no coincidió con lo que es día nos ofrecieron. Manuela, con quien estuvimos en contacto todos los meses anteriores, no cumplió en absoluto con lo que habíamos acorado (me reitero, tanto presencialmente como por escrito), la organización brillo por su ausencia, en Casa Limón se respiraba puro caos, nos hicieron trabajar a nosotros sentado a nuestros invitados, estando pendiente de las intolerancias, del orden de servir los platos…. Una celebración se convirtió en una mala experiencia, con el sentimiento de haber depositado confianza a quienes desde nuestra perspectiva no son profesionales, ni empáticos, ni respetuosos. Esta es una opinión generalizada de mis invitados, siendo dos de ellos unos futuros novios que querían celebrar allí su boda. Evidentemente vieron la lamentable situación que nos...
Read moreArrrgh! I really want to like this place but the food won't let me...
Ok, fair is fair: it's the nicest place in the area. The house, the yard, the lighting. It's romantic, the waiters are friendly and polite. Everything is perfect to give you a perfect evening with your significant other but then you open the menu and everything goes down to middling at best
It's just not fair. It's such a great set up but the menu selection is short, like ridiculously few choices and not in a cool way in which they surprise you by being specialists in a few courses, oh no. Great quality raw materials spoilt by average or even poor cooking. The wine selection is good and has several unusual choices which is nice but it's all surface-level flash and no substance due to a mismanaged kitchen.
Bottom line: come here on a first date, have a middling dinner with good wine and scenery and never come back. Ah! It's quite expensive as well, so at least your date will know you're doing alright in that regard... Good luck!
PS: now that I think of it, I wouldn't agree with such bland cooking even if prices were cheaper. It's...
Read moreThe place looks really nice, but unfortunately the service is not. Waiting staff are not very attentive, needed to ask number of times for same thing and how difficult is it to bring the dishes for 2 people at the same time? If you sit at the same table you want to eat the food at the same time, not one person nearly finishes their food before the other finally gets theirs. And it’s not like the food is that amazing, however they would not know that because at no stage we have been asked if everything was ok. Well if they did ask I would say this about “Corvina a la sanluqueña sobre parmentier” Fish was overcooked and quite dry, parmentier was very oily and prawns were not cleaned (poo line) Oh and when the bill came we had to point out charge for pica y pan they never bothered to bring us but charged...
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