Foster's Hollywood — Restaurant in Majadahonda

Edito un año después y le pongo una sola estrella al servicio. Llego a comer sola y voy con algo de prisa, solo quiero una hamburguesa y una cerveza sin alcohol. Al tomarme orden de la cerveza me dice si tostada o normal y le contesto que la más fría que tenga, que esté muy fría. Me dice que todas están muy frías. Viene otra camarera y me trae la cerveza, toco la botella y está caliente de no haber pasado nunca por una nevera. Le digo que la cerveza está caliente y me dice que sí, que es que acaban de llegar y no han estado en la cámara. Le digo que vale pero que la cerveza no se bebe caliente y que le había dicho a la compañera que me trajera una muy fría. Entonces le pregunto si hay más opciones de cerveza que estén frías y me dice que sin alcohol no. Decido que prefiero comer en el Fridays de al lado ya que no estoy pidiendo nada del otro mundo, le digo que cancelen el pedido que me voy (había pedido hacía cinco minutos y lo primero que traen es la bebida). Me levanto y en la entrada se juntan la camarera que me trajo la cerveza, la que me tomó la orden, y otra camarera. La que me tomó la orden (la que decía que todas estaban frías), me pregunta que que ocurre y le digo que lo siento pero no quiero comer con cerveza caliente. Se me quedan las tres mirando como flipando como si esto fuera una cosa extrañísima que alguien no quiera comer con cerveza caliente. No sé qué ha pasado con los camareros de antes, de toda la vida, que entendían al cliente, te buscaban una solución o si no la había, por lo menos te pedían disculpas y por supuesto entendían que en un establecimiento tú no le puedes traer una cerveza caliente a alguien y menos si expresamente la ha pedido muy fría. Es un síntoma de no haber dado nunca un curso de hostelería. Que una de ellas estuviera pez, pues vale, puede pasar, pero ¿las tres? La empresa pasa totalmente de dar formación o de pagar a camareros de verdad. No...

Suelo ir a Fryday's porque siendo de un estilo parecido me gusta más (por ejemplo en Fryday's ofrecen ensalada coleslaw con las costillas y estos solo patatas o arroz con frijoles), pero lo que fue un desastre fue el servicio, no es que no fueran amables, pero si exasperantemente lentos y en una cosa tremendamente incompetentes. Y fueron lentos porque no sé qué estaban haciendo tant@s camarer@s, más que suficientes en un local no demasiado lleno, para tardar tantísimo en tomarnos nota, en traer las cosas y en cobrarnos al final. Además cuando trajeron el entrante a compartir no nos pusieron platos a cada uno, que en una tasca lo puedo entender, pero no en un local así. Pero lo peor, yo creo que ilegal, es que aunque en la carta ponía free refill en los refrescos, cuando pedimos relleno nos dijeron que hoy no podía ser porque se había roto la máquina "pero estás bebidas sí nos las has servido" "si, son solo los refill los que no podemos, porque se ha roto la máquina" "pues no nos avisasteis cuando pedimos y, bueno, como comprenderás no es culpa mía que no tengáis nada previsto para una situación como esta, ¿Y pagando nos podéis traer otra vez bebidas?" "Sí, pagando sí ", así que nos cobraron dos bebidas por persona y se quedaron tan anchos... Independientemente de que no tuvieran recambio de la máquina esa podrían haber ido a un supermercado o una gasolinera y comprar varias botellas de 2 litros, que a lo mejor le salía 20 céntimos el vaso y así no enfadaban a los clientes... No era cosa de montar el pollo porque para qué pero vamos espero que al menos esta crítica sirva para algo... tanto aplicación de fosterianos y tal y luego se comportan así con...

CALIDAD DE SERVICIO PÉSIMA

He ido en varias ocasiones a este local para cenar y todas las veces, TODAS me trajeron vasos rotos. Detalle que deja mucho que desear por su parte, ya que la primera vez pensé que podía ser un despiste pero a la segunda y a la tercera ya fue el remate. ¡Un vaso roto es un peligro!

La zona de la terraza es muy insegura. ¡Ojo! no dejéis los bolsos ni hacia una esquina o mochilas porque se pueden robar con mucha facilidad, ya que además la puerta de salida se encuentra muy cerca. Uno de esos días hasta se fueron sin pagar de una de las mesas que estaba delante nuestro comiendo. Por lo que la seguridad brilla por su ausencia.

En tercer lugar, NUNCA puedes comer caliente.....algún plato siempre llega más tarde, templado o casi frío. Se conocen que los hacen y cuando salen se recalientan algo. Se nota perfectamente cuando un plato acaba de elaborarse y más cuando llevan salsas de por medio.

En cuanto a la atención de los camareros: Correcta dentro de lo que cabe, si no fuera por una de ellas, que cuando fue el tercer vaso roto, en vez de pedirme disculpas se pone a ponerme excusas. Es muy fácil revisar los vasos antes de que salgan para un servicio...Podéis mirar las fotos adjuntas, en una de ellas se ve CLARAMENTE que está roto. A pesar de ello lo traen igual... Y añado que se equivocan al traer el pedido.

No recomiendo el local. Muchos detalles que hacen que tu cena o comida pierda su calidad...