Portofino — Restaurant in Mogán

Lamento que tenga nombre italiano, porque no tiene ni una pizca de italiano, pero al fin y al cabo es todo canario, o casi... Antes, los camareros eran buenos y la gente amable. Hasta el mes pasado, mi marido y yo siempre íbamos allí precisamente por el servicio. Pero ayer nos atendió la dueña, una mujer asiática que antes solo preparaba café y trabajaba en la caja... ¡y ahí debería quedarse! Soy ex camarera y vengo de una familia de restauradores. Ahora, mi marido y yo tenemos dos establecimientos en el norte de la isla. No los voy a nombrar porque soy una persona decente, pero tenía que escribir esta reseña porque es una falta de profesionalidad total, pero sobre todo, es una grosería y una insensibilidad decirle a una madre: «¡Cállate, niña!». La verdad es que... Mi marido, mis dos hijos y un par de amigos nos sentamos. ¡HABÍA MUCHA POCA GENTE COMPARADA CON OTRAS OCASIONES! Cuando se acerca y me pregunta qué estoy comiendo (¡lo cual ya es de mal gusto!), le respondo: «¡Una chuleta para los pequeños!».

Y ella pregunta insistentemente por los demás, ¡y luego, y luego, y luego! Muy rápidamente y con mucha ansiedad y agitación, que empieza a contagiarme a mí y a los demás comensales, ¡y también a mis hijos! Que empiezan a llorar. Su actitud ya me molesta, pero como soy profesional, entiendo que algo puede haber pasado y que tal vez tenga algún problema... así que con mucha calma le digo que vuelva más tarde para el resto. Cuando regresa, al poco rato, empieza a preguntar insistentemente: «¿Hola? ¿Listos? ¿Listos?». Mi marido y nuestros amigos le contestan... pero ella estaba demasiado nerviosa, no sé qué le pasaba... pero bueno, empezó a decir cosas que no entendía porque no era mi idioma... Cuando le pido información sobre un sándwich para entender qué llevaba, me dice:

: ¡Como en la foto! ¡Como en la foto!

(¡Qué horror!) Al final, empezó a mirar fijamente a mi hija... quien, alterada por su actitud tan poco profesional, se puso a llorar hasta que la mujer china en cuestión, que, repito, se supone que es la dueña, me dijo que la callara.

No pude soportarlo más. Entiendo que tenga sus problemas, pero en su trabajo, atendiendo a clientes habituales y, sobre todo, a una niña de dos años, no puede comportarse así ni decir ciertas cosas. Me fui y no volveré a verlo jamás. Me dan pena los demás empleados, a quienes no vi ese día... ¡solo uno que nos saludó fue realmente amable e incluso cambió de actitud al vernos...

Offers a fantastic mix of great food and an unbeatable view. The restaurant has a Mediterranean-inspired menu with fresh seafood, pasta, and well-seasoned dishes. The terrace is perfect for lunch or dinner, with stunning views of the beach and the ocean. The staff is friendly and attentive, and the atmosphere is relaxed but still feels like a special place. Portions are generous, and the wine list complements the menu nicely. Prices are a little higher than the average beachside spots, but the quality and setting make it worthwhile. Perfect if you're after a nice meal with a view, away from the crowded areas. Highly recommend for a laid-back yet enjoyable...

Siamo rimasti estremamente soddisfatti della nostra esperienza al Portofino, che ci ha offerto un servizio eccezionale nonostante fossimo arrivati a ridosso dell'orario di chiusura.

Fin dal momento in cui siamo entrati, siamo stati accolti con un sorriso caloroso dalla proprietaria del ristorante, che si è dimostrata estremamente attenta alle nostre esigenze. Il suo servizio impeccabile, nonostante l'orario tardivo, è stato notevole e ha contribuito a creare un'atmosfera accogliente e piacevole durante tutta la cena.

La paella che abbiamo ordinato al Ristorante Portofino è stata semplicemente deliziosa. Era ben preparata, con un mix di riso perfettamente cotto, gustoso e pieno di pesce fresco. Ogni boccone era un'esplosione di sapori, confermando l'abilità culinaria dello chef e l'attenzione per la qualità degli ingredienti utilizzati. È stato un piacere gustare ogni singolo morso di questa prelibatezza.

Abbiamo anche ordinato una caraffa di sangria, che è stata la scelta perfetta per accompagnare il nostro pasto. La sangria era fresca, fruttata e ben bilanciata, offrendo un'esperienza di bevuta molto piacevole. È stata una piacevole sorpresa scoprire che il ristorante offriva anche un'offerta del giorno, che ci ha permesso di goderci una cena deliziosa a un prezzo molto conveniente. Il fatto che il nostro conto finale fosse di soli 29,90 euro è stata un'ulteriore piacevole sorpresa che ha aggiunto valore alla nostra esperienza culinaria.

La proprietaria ha dimostrato una passione evidente per il suo lavoro e un'attenzione particolare per il servizio clienti, nonostante l'orario tardivo.

Non posso fare altro che raccomandare il Ristorante Portofino a chiunque sia in cerca di un'ottima cucina spagnola a Gran Canaria. Sia per il servizio impeccabile che per il cibo delizioso. Sono grato alla proprietaria per aver reso la nostra serata così piacevole e sono sicuro che tornerò sicuramente per godermi ancora una volta questa meravigliosa esperienza...