Restaurante El Horno de Miguel — Restaurant in Toledo

04-05/07/2024 - Esta es probablemente la reseña con mayor lujo de detalles que jamás he hecho, pero realmente creo que la experiencia se lo merece y es que hay pocos lugares en los que nos hayan hecho sentir tan bien como en 'Restaurante El Horno de Miguel'.

¿Por qué acabamos comiendo en 'Restaurante El Horno de Miguel'?

En nuestro viaje de ida a Toledo estábamos buscando un sitio para comer y como sabíamos que llegaríamos cerca de las 15:30h pensamos en buscar algún sitio cerca del apartamento.

Además, por la hora a la que teníamos previsto llegar, creímos conveniente llamar para ver si con suerte podíamos reservar para 2 adultos y 1 niño pequeño de 3 años.

Así que nos pusimos manos a la obra y usando la función de buscar de Google Maps tratamos de localizar opciones.

La verdad es que en las cercanías (100 m) del Puente de San Martín había diversas opciones, pero además de las fotografías de los platos, que ya solo con verlas se nos hizo la boca agua, nos llamó la atención la relativamente intensa actividad del que decía ser el propietario del restaurante, interactuando con los comentarios de prácticamente todos sus comensales que se habían tomado el tiempo para realizar una crítica y darles así respuesta. Esto es algo que para mí denota interés en saber la opinión de los que al final son quienes sustentan tu negocio y un indicio, por mi experiencia, de que muy probablemente sea un sitio a visitar.

Llegada, recepción y comida

Pues bien, una vez allí nos encontramos con un local bastante acogedor y con diversos espacios (uno en la entrada con taburetes y mesas altas entendemos que para picar algo y 2 espacios interiores separados y con unas pocas mesas, 8 en total sino recuerdo mal), bonita decoración en paredes y techos, muy limpio todo por cierto, incluidos los lavabos, algo que aunque a muchas personas les puede sonar raro, no siempre nos encontramos cuando salimos fuera a comer y yendo con un bebé de 3 años que insiste en querer sentarse solo en la taza del wc es algo de agradecer.

Nos recibe un chico joven que se presenta como Miguel y nos deja las cartas para echar un vistazo. Mientras las revisamos, un camarero nos trae unos aperitivos de morcilla (deliciosos) y nos preparan una degustación de 3 preparaciones de aceite (exquisito) acompañado con "pan de verdad" (está expresión le hizo mucha gracia a Miguel, pero es que habiendo vivido toda la vida en una "gran ciudad" y yendo al "pueblo" a veranear se creo que se aprendre a valorar el auténtico pan y no la mxxxxx que vende en muchas panaderías).

Volviendo a la carta y, en cuanto a contenido, la verdad es que había, en mi opinión, la justa y variada posibilidad de elección, todo me apetecía, pero había que elegir. Así como Chicote tiene predilección por las croquetas, a mí me pierde el pulpo a la Gallega, así que aún estando "tan lejos" del mar y confiando en que se abastecerían de Mercamadrid (cosa que luego me confirmaron), lo pedí y vaya que si estaba bueno, no me tuve que arrepentir de mí elección. De segundo compartimos un 'Cuarto de Cordero Lechal de Aranda Asado al Horno de Leña', impresionante, sabroso y jugoso, justo en su punto. De postres, me pedí la 'Tarta de la Abuela', otra exquisitez.

En todo momento el personal estuvo pendiente de que no nos faltase de nada, profesionalidad y a su vez la calidez humana de alguien que te quiere hacer sentir como en casa. Lo consiguen.

Volvimos a comer al día siguiente y nuevamente tuvimos una experiencia inolvidable que bien merecía del "esfuerzo" de hacérselo llegar a otras personas.

Por cierto, cuando voy fuera a comer siempre acabo comprobando de que hay platos que se hacen mejor que otros.

Sin embargo, en el 'Restaurante El Horno de Miguel' tuve la impresión de que no habría ni un solo de los platos que no me pudiese gustar, lastima que tuviésemos que partir.

Muchas gracias a Miguel, a su esposa y al camarero, a los que no tuve la delicadeza de preguntarles el nombre, así como a todo el personal de cocina.

Sin lugar a dudas volveremos en nuestra próxima...

I recently dined at Restaurante El Horno de Miguel, and it was an extraordinary experience. As we waited, we were served house bread with a spicy local olive oil prepared in three different ways, honey, and black salt with a unique egg-like taste. The mini croquettes offered as a small welcome were delightful, each with different meats inside.

We started with the Jamón de Bellota paired perfectly with bread and pan con tomate. For the main course, I had the Marinated Wild Boar Tenderloin with Red Berry Sauce and Baked Potatoes—a perfect balance of flavors. My wife enjoyed the House Croquettes, which were large and delicious, so much so that we took some back and had them for breakfast. The Confited Cod with garlic emulsion from Las Pedroñeras was another standout dish—absolutely wow-worthy.

Everything was cooked in a wood oven, which added a delightful smoky essence to each bite. The service was unbelievably great, with the staff being attentive and friendly throughout our meal. While it isn't the cheapest place, the quality, service, and portion sizes make it worth...

Reseña de “El Horno de Miguel” 🌉🔥🐷

Ubicado estratégicamente frente al majestuoso puente de Toledo, “El Horno de Miguel” es una joya gastronómica que sorprende desde el primer momento. Inicialmente, su tamaño reducido y discreto exterior nos hizo bajar las expectativas, pero bastaron unos minutos para darnos cuenta de que este lugar tiene alma y carácter. ✨

Un anfitrión de lujo y un horno legendario 🧑‍🍳🔥

El restaurante hace honor a su nombre. Miguel, el dueño, es un anfitrión excepcional. Su carisma y pasión se reflejan en cada detalle, pero, sobre todo, en el lechón horneado, que es una verdadera obra maestra. 🐷🍴 La piel crujiente, la carne jugosa y el toque perfecto de especias lo convierten en un plato que merece ovaciones. Pocas veces he probado algo que combine tan bien la técnica tradicional con el arte de la simplicidad.

Platos que cuentan historias 🍷🍖🍳🦐

Otro imprescindible fue el “Pan, entrantes y el vino con jamón de bellota” (sí, el nombre ya es cautivador), que resultó ser un maridaje perfecto de sabores: un jamón de calidad impecable acompañado de un vino que parecía haber sido elegido con precisión matemática. La experiencia fue elevada aún más con unos huevos rotos con gambas que desbordaban sabor y frescura. 🍤🥚 La combinación de texturas y sabores en este plato demuestra que Miguel no solo tiene un horno legendario, sino también un paladar de oro.

Ambiente íntimo, atención inigualable 💬👨‍🍳🍽️

Aunque pequeño en tamaño, “El Horno de Miguel” se siente cálido y acogedor, casi como estar en casa. Los meseros, con una atención impecable, lograron que cada momento fuera especial. Uno de ellos, Stephano, nos deleitó con su conversación, añadiendo una dosis de encanto que hizo que nuestra velada fuera aún más memorable. 🗣️✨

Conclusión 🏆

Si estás en Toledo, no puedes dejar de visitar este lugar. El Horno de Miguel es un claro ejemplo de cómo la grandeza no depende del tamaño, sino del corazón y la pasión que se pone en cada detalle. 🔥👏 Desde el lechón hasta los huevos rotos, y pasando por la atención personalizada, es un restaurante que te invita a quedarte y disfrutar la vida, un bocado a la vez.

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