Marisquería Bar La Parada — Restaurant in Vélez-Málaga

La verdad que no sé si volvería a este sitio. Se supone que cuando vas a comer a un sitio marisco, vas a vivir una experiencia y gastarte tu buenos dineros. Llegamos a las 14:10, nos sentamos y nos dieron las cartas hasta las 14:40, había solo dos camareros y todas las mesas estaban esperando. El ruido era tremendo y la atención era mala. Fuimos a probar las quisquillas crudas y ya no le quedaban , desde las 14 que entramos hasta las 15 que nos tomaron la comanda quedaba muy poca cosa y las mesas que entraron después nuestra les pasó lo mismo . La comida estaba buena , pero tardaban tanto en servirte que ya los últimos platos nos sobraron , no es normal sentarte a las 14:10 y que te sirvan el pescado frito a las 16:45. Yo le haría una reflexión al empresario , contratando más camareros , la atención sería mejor y las mesas consumirían más , incluso podrían doblar mesa y ganar más dinero. Mucha gente entraba preguntando y se quedaba en la...

Buena elección. pescados y mariscos frescos* y bien tratados (*la caleta de vélez málaga tiene uno de los mejores puertos pesqueros de la costa española y la Parada se surte de su lonja) Llamativa exposición de vinos y, especialmente licores (la serie completa de Macallan o Lagavulin). El precio de los vinos, quizá sobre la media, podría ajustarse un poco. servicio correcto. el tapeo previo en barra, merece la pena: el hormigón: patata cocida en semipuré, ali-oli y gamba; el caldito de tiburoncillo en meses frescos o el pulpo (tomate, aliño). buena climatización. Las frituras, bien hechas. La plancha, exacta. El tomate natural, bien elegido, sabroso. la cuenta final, razonable (no es "un chiringuito") Se aparca en la explanada de atrás, en la calle pincipal suele...

La verdad que la experiencia no fue nada buena, el pescado frito estaba aceitoso, nos dejaron de pie aún habiendo mesas porque decían que estaban reservadas aunque nadie apareció y en ocasiones algún camarero dijo de sentarnos pero este decía que ya no, y la respuesta a nosotros era que esque las reservas se aguanta la mesa aunque no venga el cliente🙄, también preguntamos por una mesa alta que estaba pagando y nos dijeron que tampoco estaba libre y nadie la ocupó en todo el tiempo que estuvimos, respuesta a esto alguna que otra impertinencia, y el detalle del camarero de la barra era coger todo el alimento de las tapas con un supuesto palillo que al no poder, o caerse, metía los dedos y algunos detalles más. En fin que la experiencia no fue para...