Il Cortile - Pedro Cabanes — Restaurant in Valencia

Crema de Calabaza al Horno Un entrante que, sin ser nada espectacular, fue con diferencia el mejor de los que degustamos. Una textura cremosa, que no líquida, y un sabor a calabaza correcto

Peor plato de la comida, el Carpaccio de Pez Espada Un carpaccio que venía acompañado de rúcula, alcaparras y una especie de mantequilla. Sin embargo, lo cierto es que ninguno de estos componentes me parecieron que casaran excesivamente bien con un carpaccio que, no se si será algo habitual, ya que era la primera vez que probaba el pez espada, pero que era completamente insípido

Milhojas de Verduras Un milhojas que eran distintas verduras unas encima de otras y entre las mismas había queso de cabra. Los que me conocen saben que no soy excesivamente aficionado del queso de cabra, no obstante, en este caso era bastante suave y estaba aceptable

Mejor plato de la comida, los Tagliolini Carbonara Una carbonara que no es como las habituales (y malas) que conocemos en España con nata, sino que lleva guanciale (panceta/bacon italiano), yema de huevo, parmesano y pimienta negra. La principal diferenciación se encuentra en la yema de huevo y en la melosidad que aporta este ingrediente, si a eso le sumamos que la pasta está al dente y que el guanciale, aunque no es de máxima calidad, tiene partes crujientes, hace que sin lugar a dudas sea la mejor carbonara que me he comido nunca. De manera que no le puedo dar otra puntuación que un..

Pasta Ragú de la Nonna Como puntos positivos me gustaría destacar que la pasta está al dente y que en general se puede comer. No obstante viniendo de la anterior, esta está a años luz y si acudís os recomendaría antes que pidierais la otra.

Pizza di Pistacchio (Campeona España Pizza Autore 2020) Visualmente la estética de la pizza es brutal, parece un cuadro abstracto al que te podrías pasar horas fotografiando. No obstante sí que es cierto que ya se pueden apreciar algunos puntos que, desde mi punto de vista, no son tan positivos; como la escasez de trufa o que el cornicione (borde de la pizza) no está excesivamente elevado (esto ya va a gusto meramente personal, puesto que a mi me gusta un corniccione alto). Ya una vez en boca, lo primero que se puede apreciar es el juego de texturas que se genera con los distintos componentes (destacando el crujiente de pistacho), y que es en lo personal lo mejor de la pizza. Sin embargo, tras el primer bocado también se aprecia que la masa, sin ser ni mucho menos una mala masa, sí que me parece mejorable o por lo menos yo considero que he degustado bastante mejores. Por último, la combinación me parece buena, aunque algo pesada y cansada como para comerse una entera (y lo dice una persona que come bastante), sobre todo por el cremoso de requesón, el cual personalmente me enmascaró en cierto modo el resto de sabores y rebajaría un poco la cantidad. No obstante, teniendo la mejor pizza de España 2020 en Valencia os animo a probarla, aunque yo no le pueda dar una puntuación superior a

Tiramisú de Limoncello Un tiramisú que de tiramisú tenía poco o nada, puesto que el bizcocho sabía a limón y este era el sabor que predominaba, sin encontrar un ligero ápice del sabor de tiramisú clásico. No obstante, y pese a que el bizcocho está seco, me gusta la idea y de ahí la puntuación de

Tiramisú Clásico Venía también en tarro, una modalidad de presentación de postres de la que no soy nada aficionado No es un tiramisú nefasto, pero tampoco trasmite nada. Desde mi punto de vista, bien para quitarse el antojo a dulce pero no es un tiramisú que vaya a recordar durante mucho tiempo

Mejor postre, Panacotta con Mermelada de Higos. He de reconocer que no he probado muchas panacottas y que no es un postre que suelo pedir si lo veo en carta (al contrario que los tiramisús). Sin embargo, esta ha sido hasta el momento la mejor panacotta que he degustado nunca. Aunque también es verdad que pese a que la mermelada de higos está buena, considero que le sobra

Si queréis saber la puntuación de cada plato y la valoración final, os animo a que os paséis por mi blog de...

Acompáñenme en esta triste historia.

Nos enteramos que il cortile había abierto un nuevo restaurante cerca de casa. Conocíamos la franquicia y nos gustaban sus platos. Allá que fuimos con unos amigos. El metre, a su vez gerente, de peculiares maneras y con cierta gracia nos atendió con alguna que otra broma que pudiera amenizar la velada. Esta cena fue bien. A partir de aquí la historia se tuerce. Las 3 veces siguientes que intentamos ir no nos dan mesa, el restaurante literalmente vacío. Nos extrañó la primera vez, y la segunda, pero la tercera ya preguntamos y su argumento fue que tenían muchos pedidos a domicilio. Lamentable abrir un restaurante para terminar enviando comida a casa no? Y rechazar clientes con el local vacío, feo, muy feo. Pero no es eso lo peor. Ahora mismo estoy en el restaurante, teníamos mesa reservada y hemos llegado 15 minutos antes. El “agradable” señor nos dice que nos deja sentarnos pero que no nos va a atender hasta que sea la hora. Ok, gracias por dejarme respirar. De verdad, alucinante. Entre tanto, vemos como a las pocas mesas ocupadas en algún momento les dice que no les queda algun plato y que pidan otra cosa. Y claro, esto también nos toca a nosotros, y tenemos que pedir algo que no nos apetecía realmente. Seguramente nuestro plato lo han enviado al vecino del 4ºA. Para apuntillar todo, tras pedir dos platos principales nos dice su camarera de parte de el “maestro” (pobre muchacha lo que tiene que aguantar) que como son dos platos principales y no hay entrante que nos diga que los platos van a tardar. Exactamente desde nuestra hora de reserva los platos han tardado 35min, 50 min desde que nos sentamos a disfrutar del espectáculo. Ni unas tristes aceitunas se ha dignado a poner en la mesa. Tremendo. El local helado, la gente le pide que quite o baje el aire a lo que responde que lo puede bajar un poco, pero solo durante 5 min, oh señor, gracias. Juro no volver y os animo a hacer lo...

No recomiendo. El servicio es nefasto:

El camarero es un insolente que se cree gracioso y se entromete en las conversaciones de sus clientes. Nos pone en el compromiso de reír sus "bromas" cuando en realidad está interrumpiendo conversaciones privadas (punto criticado en otras reseñas). De muy mala educación, también, que cuestione la bebida que pedimos (agua), hasta el punto de comentarlo con sus compañeros de forma indiscreta.

Nos metió prisa para pedir, ya que uno de los comensales llegaba algo más tarde, con la excusa de que no se le juntaran las reservas. El local estaba prácticamente vacío, con solo 4 mesas ocupadas entre sala y terraza. Permaneció así el resto de la noche.

Me sirvieron mi plato sin lascas de parmesano. Se lo hago saber al camarero y menosprecia mi observación, diciendo que la receta es así. Le indico que según la carta, esa pasta lleva lascas de parmesano. Lo comprueba y se lleva el plato. Al poco tiempo, me lo devuelve junto con un pequeño bol con QUESO EN POLVO, similar al que se compra en supermercados.

Un camarero de verdad: Primero: debería conocer de memoria los ingredientes de cada elaboración. Segundo: debería conocer si en cocina se han quedado sin un ingrediente. Tercero: debería informar al cliente en caso de que prefiera una alternativa. Cuarto: vuelve a servir el plato junto con una disculpa por el inconveniente, no con otra broma de mal gusto (me devolvió el plato de nuevo sin queso y, segundos después, hizo el amago de darme el queso, retiró el bol cuando lo iba a agarrar, y ya después me lo entregó).

De nada por esta clase introductoria de protocolo en...