Día duro de trabajo, ilusión porque vas a ver una peli en casa con tu pareja, decides pedir a domicilio para ahogar las penas en salsa agridulce. No nos andamos con chiquitas: pedimos pan chino, dos rollos de primavera, tallarines con ternera, pollo al limón, cerdo agridulce y pato a la naranja. La casa por la ventana; hipoteco mi casa pero hoy se cena bien. O eso creía. Llega el pedido y cuál niño en día de reyes abrimos la bolsa y los tapers con ilusión. Pan de gambas de sorpresa, quizá lo único bueno de la lamentable hora que hemos pasado cenando. Sacamos el pan chino. Es cierto que al cogerlo ya he notado el peso de un balón medicinal entre mis manos, lo que no esperaba era que al abrirlo fuera de color verde marronáceo por el exterior y blanco copo de nieve por el interior: en definitiva, congelado (adjunto foto). No pasa nada, estamos dispuestos a disfrutar de la velada y nos ponemos un vasito de zumo de naranja para lavar el paladar. Con los rollitos de primavera no podemos fallar, pensamos. Pues para ser de primavera, nos ha llegado el invierno. Diseccionamos el rollito y resulta que todo el interior era col y lechuga. Llegados a este punto decidimos cerrar el capítulo de los entrantes y pasar a los principales. No quiero ser injusto con este infausto local, los tallarines no estaban mal. Es apropiado decir que el único aderezo que llevaba eran unos trozos catedralicios de cebolla y lechuga (en unos tallarines, recuerdo). Aún así, lo mejor de la cena. Continuamos con las carnes. Sé que soy un desconocido de Internet, no me hagáis caso si no queréis, pero os puedo asegurar que soy agradecido allá donde voy. Dicho esto, y no especulo, creo que para conseguir masticar eficientemente el pollo, el pato y el cerdo he tenido que hipertrofiar mis maseteros. Mientras escribo estas líneas que salen de mi corazón y de mi estómago resentido, aún tengo trozos de empanado requemado del cerdo entre los dientes, y el recuerdo del pollo chicloso me impide concentrarme, por no hablar de las verduras multicolor oxidadas que acompañaban dichos platos. Y lo peor de todo, el pato a la naranja. El pato es mi carne favorita, pero (adjunto foto) esto parecía, y no quiero sonar vulgar, un vómito fecaloideo. ¿Desde cuándo una salsa de naranja se ve marrón y no, valga la redundancia, naranja? ¿Desde cuando el pato no se divide en filetes si no que se hace deshilachado? Debe ser un nuevo estilo o, si se me permite, debe ser que simplemente lo han hecho mal En conclusión, me he tenido que comer un flan caducado de hace un mes de mi nevera para que arrastre estos sabores infames de mi acartonada lengua, y he tenido que prometer a mi pareja que mañana iríamos a un estrella michelin para que no me abandone. Gracias por...
Read moreEl restaurante Tiananmen es un verdadero tesoro culinario que ofrece una experiencia gastronómica excepcional en el corazón de la ciudad. Mi experiencia en este restaurante ha sido sumamente gratificante, y puedo decir con certeza que es un lugar que destaca por su calidad y autenticidad en la cocina asiática.
Lo que más sobresale en Tiananmen es, sin lugar a dudas, la calidad de su comida. No sé si he probado platos asiáticos más deliciosos en mi vida. Cada bocado estaba lleno de sabores auténticos y frescura, lo que convirtió la experiencia culinaria en algo realmente excepcional. El restaurante cuenta con un variado menú que permite a los comensales explorar los exquisitos sabores de la cocina asiática en todas sus facetas.
A pesar de que suele haber bastante concurrencia y el espacio en la terraza puede ser limitado, el ambiente en Tiananmen es cálido y acogedor. La ubicación en el corazón de la ciudad le confiere un encanto especial. A pesar de la afluencia de clientes, el personal de Tiananmen se esfuerza por ofrecer un servicio eficiente y amable, lo que demuestra un alto nivel de profesionalismo y atención al cliente.
Es importante destacar que la calidad de la comida es el rasgo distintivo en Tiananmen. Los platos están llenos de autenticidad y frescura, lo que permite a los comensales disfrutar de una experiencia culinaria verdaderamente memorable. A pesar de las variaciones en las opiniones, mi experiencia personal en este restaurante ha sido extremadamente positiva.
En resumen, el restaurante Tiananmen es una parada ideal para los amantes de la comida asiática de alta calidad. La amplia variedad en su menú, el ambiente acogedor y el servicio atento lo convierten en una opción más que recomendable. Si buscas una experiencia culinaria única en el corazón de la ciudad, Tiananmen es definitivamente un lugar que vale la...
Read moreWorst Chinese place in Valencia. The service is really bad. Only one girl running around setting customers, handing to-gos and taking orders. I ordered a vegetarian soup. It had more pork than any other soups. When i showed it the girl, she casually said, sorry. Can't you eat it? The good was bad too. Then an arrogant Chinese guy showed up and wanted to charge me for the soup, because i order it😀😀😀 Avoid this place...
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