Basílica Nuestra Señora de la Encina — Attraction in Ponferrada

La basílica de la Virgen de la Encina es un templo de estilo renacentista ubicado en pleno casco histórico de Ponferrada y muy cerca del castillo templario. La actual basílica se erigió sobre una antigua iglesia del siglo XII, ya que la primitiva iglesia se había quedado muy pequeña para una villa que había crecido mucho, en población e importancia económica y social. Esta nueva iglesia comenzó a construirse en la segunda mitad del siglo XVI, durando sus obras casi dos siglos. La basílica está dedicada a la advocación de la Virgen de la Encina, un curioso nombre que deriva de una antigua leyenda. Según esta leyenda, en el siglo XIII la orden de los Templarios, recibieron de Fernando II, rey de León, la orden de administrar una encomienda en esta villa, así que comenzaron la construcción de un grandioso castillo sobre las ruinas de una antigua fortaleza romana. Para ello necesitaron una gran cantidad de piedra y también de madera, talando un gran número de árboles. En uno de esos árboles, una encina, encontraron por casualidad una talla en madera de una Virgen, escondida en su interior. Según la leyenda, esta talla había sido traída a El Bierzo por Santo Toribio en el siglo V desde Tierra Santa y, siglos después, ocultada por San Genadio en el siglo IX para evitar los saqueos de las constantes razzias que los musulmanes realizaban por estas tierras. Al desconocer de qué Virgen se tratabay al haber sido encontrada la imagen en el interior de una encina, es por lo que se la empezó a conocer como Virgen de la Encina. Hoy, la Virgen de la Encina es la patrona de Ponferrada y de toda la comarca de El Bierzo. El templo presenta un aspecto exterior macizo y robusto, casi de fortaleza, construida con piedras de canto rodado y sillería. La fachada es sencilla y sobria, sin grandes ornamentos, destacando especialmente la portada lateral y la alta torre campanario. La portada principal, de estilo barroco con elementos clasicistas, está conformada asemejando un gran retablo de piedra. Esta puerta se abre en un lateral del templo, con una doble puerta con arco de medio punto, flanqueada por dos pares de columnas dóricas sobre basamentos que sustentan un friso, ornamentado con rosetas, y un frontón semicircular entrecortado. La portada está rematada por una hornacina con una imagen en piedra de la Virgen y coronada por otro frontón triangular. La torre campanario del siglo XVII, de estilo barroco, se levanta a los pies de la nave central. Tiene planta cuadrada y en su base se abre otra puerta de entrada a la iglesia. La torre tiene en su parte superior una ligera forma piramidal, con dos plantas superiores abalaustradas y con vanos pareados en donde se ubican las campanas. La torre está rematada por una cúpula sobre un tambor octogonal y adornado con pilares embolados. La iglesia tiene planta de cruz latina con una única nave y capillas laterales colocadas entre contrafuertes. De estos contrafuertes, con anchos pilares fasciculados, surgen arcos apuntados que sustentan una bóveda estrellada simple en el transepto. En la cabecera de la nave se abre el presbiterio con un ábside poligonal en el que se encuentra el altar y el retablo mayor. Este retablo es, sin duda, la obra más destacada de la basílica. Se trata de un retablo barroco del siglo XVI que está dedicado a la Virgen de la Encina, cuya imagen se encuentra en un pequeño camarín presidiéndolo. Sobre esta imagen hay un bajorrelieve con la ascensión de la Virgen a los Cielos. Coronando el retablo hay una talla gótica de un Cristo crucificado del siglo XVI. La imagen de la Virgen de la Encina que se encuentra en el retablo es una talla en madera de la Virgen con el Niño de principios del siglo XVI, así que nada tiene que ver con la leyenda sobre la imagen encontrada por los Templarios. La Virgen presenta un color oscuro, lo que le ha dado popularmente el sobrenombre de la 'Morenica'. La entrada a la iglesia es gratuita, y siempre respetando el culto. Está abierta de 9 a 14 y de 16:30 a 20:30 horas. Una iglesia que merece la pena visitar con...

a iglesia de Nuestra Señora de la Encina, llamada Nuestra Señora de la Plaza hasta el siglo XVII, se levanta sobre el solar de la antigua iglesia de Santa María (S. XII). Este edificio medieval disponía de cinco altares y un campanario con cuatro campanas. Sometida a continuas críticas por su tamaño y arquitectura, finalmente se decide la construcción de una nueva iglesia que daría lugar a la actual basílica de La Encina. Las obras comenzarían en 1573 y finalizarían un siglo después.

La prolongada duración de la obra hizo que distintos arquitectos intervinieran y modificaran el proyecto original. El resultado es una iglesia de planta de cruz latina dividida en tres tramos por contrafuertes, con diferentes bóvedas: de cañón y de crucería. En el exterior, contrasta su torre de estilo barroco con influencia gallega fue terminada en el siglo XVII.

La portada lateral o entrada principal es un arco de medio punto flanqueado por dos pares de columnas dóricas sobre plintos y coronada con hornacina.

Obra de gran envergadura, es uno de los retablos más importantes del siglo XVII de estilo barroco. Cuenta con la participación de varios maestros, destacando Mateo Flórez y discípulos del gran Gregorio Fernández. En el centro La Morenica preside desde un lujoso camarín y sobre el mismo encontramos el relieve más valioso de este retablo con la escena de la Ascensión. Culmina en el ático con el Cristo crucificado y a ambos lados el escudo de la ciudad. El retablo se levanta sobre cuatro relieves de los evangelistas y diferentes...

Basílica renacentista con cruz en su fachada exterior, en su interior podemos ver el retablo principal de madera policromada de la escuela del famoso escultor Gregorio Fernández y en el centro podemos ver la virgen de la Encina "La Morenita" patrona de la zona del Bierzo. Basílica que cuenta con una torre campanario que puede verse desde toda la localidad. Cuenta la leyenda que el Obispo de Astorga trajo a este virgen de Tierra Santa escondiéndola de las invasiones musulmanas. Se perdió el rastro de dicha imagen durante años, hasta que la orden templaria la encontraron dentro de una encina mientras aprovisionaban de madera la localidad, por ello adopto el apelativo del árbol donde fue encontrada. La entrada es gratuita y puede ser visitada, respetando siempre los horarios de misa y cultos. Si estas por el Bierzo...