Está reseña la he editado después de leer lo que el dueño del lugar tenía que decir respecto a mi opinión, que finalmente lo importante en estos casos es que la comunicación pueda fluir.
Recuerdo que el jueves Santo de 2021, mi esposa y yo nos preparábamos para subir el Tepozteco. Eran como a las 10:00 horas de la mañana y decidimos desayunar antes de subir la cima. Íbamos caminando sobre la calle que al parecer lleva el nombre "Revolución" y nos llamó mucho la atención un local de comida adornado con lámparas de papel rojas, se veía muy bonito y nos dimos cuenta que en este lugar ofrecían comida de la que se conoce como "Ramen". Nos pareció una gran idea probar este tradicional platillo oriental, previo a nuestra caminata, así que ingresamos al lugar, ocupamos una mesa y enseguida fuimos atendidos por una empleada que nos ofreció dos cartas, una en la que se exhibían los platillos de Ramen y otra dónde se apreciaban otro tipo de platillos más nacionales (chilaquiles, burritos, tacos...) Nosotros queríamos probar el Ramen, y centramos nuestra atención en la carta especializada en esos platillos. Al cabo de cinco minutos la empleada nos dijo: "veo que están interesados en los platillos de Ramen, pero debo decirles que éstos platillos se preparan después de las doce horas del día. Y no nos pensábamos quedar dos horas en espera del platillo. Queríamos subir el cerro pero también necesitábamos desayunar o podríamos desmayar en el intento, así que solicité que me prepararan un burrito de los que anunciaba la otra carta. La persona que nos atendía dijo que los burritos aún no los preparaban y que tardarían una hora. Entonces le pedí unos chilaquiles y un late (café con leche); mi esposa también pido chilaquiles y late. Nos tomo la orden y cinco minutos después nos puso los cafés en la mesa. Tomamos nuestro cafecito mientras esperábamos con hambre la llegada de los chilaquiles, y a los quince minutos regresó la que nos atendía diciendo que debido a que los chilaquiles estaban en paquete con café y fruta o jugo, pues deseaba saber que preferíamos; ya nos había dado el café, faltaba elegir la fruta o el jugo. Yo pedí jugo y mi esposa fruta; veinte minutos más tarde llegaron los chilaquiles, (40 minutos después de nuestra llegada al lugar) y es aquí donde toda la desilusión invadio mi alma. En el plato se veía muy bien, colocaron los totopos, y les caldearon una salsa; esparcieron queso cortado en cuadros pequeños, sin crema pero con una verdura picada parecida al cilantro, de la que no supe distinguir el sabor, pues la salsa que emplearon para estos chilaquiles tenía un sabor dominantemente salado. Alguna vez en mi vida quise probar el sabor de la salsa que venden enlatada en los supermercados y el sabor es dominantemente salado. Así es, desde mi punto de vista, en este lugar los platillos mexicanos los elaboran de una manera poco tradicional, no preparan la sala con verdura fresca, tampoco pasan la tortilla en el caldero de aceite para dorarla, pues compran los totopos embolsados, que eso seria lo de menos si la salsa fuera preparada de la manera tradicional, con tomate, Chile, ajo, cebolla, todo naturalmente licuados para integrar ese típico y tradicional sabor mexicano, sazonado la salsa en el sartén. Pero no, abrieron la lata de salsa, la calentaron en el microondas, colocaron los totopos en el plato, le echaron la sala caliente, luego el queso en cuadros y la verdura picada. (Está parte es solo especulación de mi parte por la molestia que me causo mi experiencia en el lugar, pues no me consta, no ví las latas) Perdonarán mi reseña, pero esos chilaquiles sabían horrible (rectifico: tenían un sabor que yo no esperaba). Si me dolió pagar $150.00 pesos por cada plato de ese horrible intento de platillo mexicano, pero después de probar ese horrendo sabor dejamos los platos, pague la cuenta y decidímos no regresar a ese lugar ni siquiera a probar la Ramen que ofrecen, pues si así preparan unos simples y sencillos chilaquiles, no me quiero imaginar cómo preparan una Ramen tradicionalmente oriental. Algún día...
Read moreWe picked tepozramen out before we even made it to Mexico because we were intrigued and also looking forward to eating something that wasnt strictly Mexican food. The food was delicious and pretty standard for what we expect back home. The server was great and attentive. It started to sprinkle a bit so she allowed us to move into the enclosed room. The place is beautifully decorated and a great spot for folks looking to change it up or have a nice easy day out. However, the church kept shooting off fireworks which made for some loud times. This is just the culture but a heads up to anyone that may be...
Read moreMy friend and I arrived in Tepoztlán in the early evening and were craving noodles so we landed on TepozRamen for dinner. We chose to sit in the covered dining area which was lucky because it started thundering and raining right after we ordered. Our server was soooo so kind and wore full rain gear to walk our food—also covered in saran wrap—from the kitchen to our table, so that it stayed dry. We shared the vegetable dumplings and I had the tofu yakisoba. Both...
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